Nunca muere un gran amor

Capitulo 7 ¿Lo Conoces A Luciano Pereyra?

Empezaba a refrescar. Las hojas caian y el sol se escondía temprano. Siempre me dio tristeza el frío.
No se porque.

Ese día llego Luciano, de uno de sus tantos viajes con un paquete en sus manos.
Paso por mi casa y me pidió que fuera a la suya.
Ahí todos alrededor de él esperábamos ansiosos que era eso tan importante que tenía para mostrarnos.
Lo abrió con cuidado y dentro de un papel transparente un CD con su cara en la tapa.
- lo logre- solo atinó a decir, miró a sus padres y se puso a llorar. Ambos lo abrazaron y le dijeron cuanto lo amaban y que orgullosos estaban de el.
Que lindo debe ser tener ese apoyo paternal- pensé- la suerte que tiene Luciano.
Me acerque a él y lo abracé muy fuerte.
Lo felicite tanto como sus padres y le dije cuanto lo amaba.

Días después mientras estaba en el trabajo, con la radio prendida en volumen bajo, a lo lejos reconozco un timbre de voz.
- subí subí!- le dije a mi compañera que estaba al lado de la radio.
"inconscientemente estoy pensando en ti...estoy bloqueado🎶
Mi canción!
Mi chino estaba en la radio!!

Creo que ese fue el comienzo del caos que se avecinaba.

A medida que fueron pasando las semanas, el ambiente se fue poniendo raro.
Luciano no paraba un minuto, todos los días llamaban de una revista o de un canal.
Había sido como una especie de boom, "el folcklore joven", "los sucesores" y cosas por el estilo decían los títulos.

De pronto empezamos a notar que era más difícil caminar por las calles donde siempre lo hacíamos.
Luján al ser turístico, siempre estaba lleno de gente, que inmediatamente lo reconocía en la calle.
El problema empezó cuando a esa gente se le empezaron a sumas chicas. Fans mejor dicho... Que era mucho peor.
Averiguaban donde vivía y varias veces hubo que sacarlas del jardín porque se metían sin permiso.

Un día llegó a la casa de Luciano del trabajo y Don Ángel y Marcelo estaban en el jardín de adelante amurando al piso una reja altisima que cubría todo el perímetro de la entrada.

Se estaba volviendo complicada la vida del cantante. Luciano lo sabía y a pesar de que le costó acostumbrarse a la exposición, el sabía al mundo donde estaba entrando y le gustaba pertenecer a él.
Su padre estaba igual de feliz, no tanto su madre que estaba aterrada pero lo aceptaba con tal de que su hijo fuese feliz.

Pero yo...
Yo era sapo de otro pozo. No me era fácil esperarlo largas semanas hasta que volviera ni esconderme para que no nos molesten.

Así pasamos meses y meses hasta el verano siguiente que fue aún peor. Luciano se consagró en Jesús María, vendió más de 200 mil discos y era. Conocido en toda la Argentina y países limítrofes. En un año nuestra vida se volvió de la más pasmosa tranquilidad a un caos a veces inaguantable.

Yo por mi parte seguí trabajando y terminé el cbc. El año siguiente tenía que empezar la facultad. Había ahorrado todo un año y estaba en posición de mantenerme sola. Ya tenía 18 años y podía tranquilamente independizarme. Mis padres me ofrecieron un departamento en la capital pero no estaba segura de irme.

Ese día pase como cualquier otro a ver a Luciano que increíblemente estaba en su casa.
Llegó a la reja y empiezo a buscar mi llave. Donde la Deje? Ay no me digas que me la olvide en el trabajo- pensé
Revise mis bolsillos y empecé a buscar en mi cartera, no encontré nada así que aplaudi las manos y seguí buscando, cuando iban a poner timbre estos hombres? de pronto senti la mirada sobre mi de alguien que se había parado delante mío.
Levanto lentamente la vista y era una chica de unos 16 o 17 años, con unos ojos verdes color esmeralda, pelo negro y tez muy blanca, tenía los labios pintados de un rojo fuego . Era visiblemente hermosa.

-Hola! - me dijo avanzandome- vos quien sos? Como te llamas?
Yo la mire y dude en responder.
-hola- dije dubitativa- me llamo Vanesa.
-no te van a abrir- me dijo segura
- espero que si- respondí-porque me olvide la llave y no quiero volver a buscarla.
- llave? - abrió los ojos grandes- vos vivís acá? Lo conoces a Lucíano Pereyra?? Quien sos vos? - todo esto me lo pregunto entre alterada y molesta. Me dio miedo. No sabía si responderle o no- contestame! - me apuro- sos la novia? - y esto lo dijo con odio
-no! - me ataje- no soy la novia, soy ehh la hermana
-Luciano no tiene hermanas- retruco inmediatamente muy segura.
-nn..no- dije pensando lo que iba a decir para que no se altere más- no tiene hermanas biológicas pero sus papás me criaron prácticamente... Por eso- ella me miró desconfiada.
De pronto la puerta del frente se abre y era Luciano.
La chica en cuestión empezó a gritar y mas gritaba a medida que Luciano más se acercaba. El sonreía incómodo y le pedía con señas que se calmara.
Abrió la reja para que yo pudiera entrar, la chica se metió por entremedio, se le colgó del cuello y lo beso en la boca.