Noir Gray está perdidamente enamorado de Jin Berry, un profesor de su escuela que no lo puede ver ni en pintura.
En el pasado los dos tuvieron el tiempo de conocerse y darse cuenta de que ninguno de los dos se agrada y que se "detestaban", obviando...
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Hello, soy de nuevo, con un nuevo capítulo que será narrado por un nuevo personaje, léanlo hasta el final aunque es un poco mas largo de la normal. Además, el siguiente capítulo será narrado por otro nuevo personaje, luego seguimos con Noir y luego Jin. Por lo menos ese es el plan. Gracias por la espera, espero les guste! Feliz cuarentena!
K O R I
Unos días antes de que comenzaran las clases volvía con mis padres de la casa de mis abuelos por las vacaciones de verano. No estaba lista para volver al internado cuando tenía que dejar de ver a mis padres otra vez después de haber pasado un año terrible, pero no podía desaprovechar la oportunidad que él hermano de mi mamá me estaba ofreciendo de estudiar aquí, además de vivir en su casa mientras lo hacía. Después de vivir en un orfanato por unos 9 largos años todo había mejorado al ser adoptada por mis actuales padres, aunque eso duro cierto tiempo hasta que entre a la escuela donde comenzaron a hablar sobre mi adopción y los niños me repelían como si tuviera alguna enfermedad. Pensé que esa situación mejoraría cuando entrara a la preparatoria, pero las cosas sólo comenzaron a empeorar.
-¿Estarás bien sola? Podría quedarme unos días en lo que vuelves a adaptarte.
Suspira, lo que menos quería era preocupar a mi mamá y aunque deseaba que se quedara negué con una sonrisa.
-Estaré bien, los veré en vacaciones de invierno -acaricio sus mejillas con cariño demostrándole que estaría bien.
Sonríe intentando ocultar su obvia preocupación. Toma mis manos y las aprieta, luego me deja ir y me manda un beso de despedida pues mi padre la está esperando afuera en el coche, no le gustaban las despedidas difíciles.
Mi sonrisa desaparece y esas inmensas ganas de llorar cuando veo que se cierra la puerta me invaden. Camino despacio hacia mi habitación en el segundo piso, mientras sollozo en silencio estaba esperando llegar a mi habitación para llorar como dios manda. Estoy a una puerta de mi habitación cuando otra se abre de repente dejando a una persona salir de ahí. Grito empujando el cuerpo flácido de la persona estrellándolo contra el suelo.
La persona se retuerce del dolor, mientras maldice en un idioma diferente y es ahí cuando me doy cuenta que es Travis, mi primo a quien he empujado.
-Lo siento, ¿estás bien? -preguntó tendiéndole una mano que toma hasta que está de pie-. ¿Qué haces aquí? No estabas con tus padres en Japón.
-Yo también te extrañe, Kori -responde metiéndose a su habitación para recostarse en su cama.
Lleva su pijama, tiene el cabello despeinado cubriéndole los ojos y sus lentes de descanso. Hace una mueca cuando me siento a un lado de él.
-¿Tus padres saben que estás aquí?
-Nunca fui a Japón, tonta Kori, me quedé aquí porque perdí el avión y mis padres me castigaron dejándome aquí solo en las vacaciones.
