(𝗔𝗗𝗔𝗣𝗧𝗔𝗖𝗜Ó𝗡 𝗖𝗟𝗔𝗨𝗠𝗜𝗟𝗜𝗔)
La mágica historia de Emilia, una prostituta bien pagada y Claudio, el orgulloso y millonario empresario.
¿Logrará este amor sobrevivir a las habladurías, a la diferencias de clase y por supuesto... a ellos...
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- ¿Qué pasa mi niña?- preguntó Julia acercándose a ella.
- Nada.
- A mí no me mientas muchacha- la acusó con un dedo- ¿para que te quería la señora Rosario?
- Nada, solo quería preguntarme un color de vestido.
Julia entrecerró los ojos- no te creo, aunque sé que igual no vas a decirme así que te aviso, hace un momento llegó tu vestido de novia, lo dejé en tu habitación.
- Gracias Julias, ¿quieres venir conmigo a verlo?
Julia encogió los hombros- por supuesto querida, incluso hasta pensé en echarle una ojeada por si te demorabas.
Las dos rieron y subieron las escaleras a ver el vestido de Emilia, a Julia la enamoró el vestido. Emilia había optado por no usar blanco en cambio había escogido un vestido de ensueño color champaña, tan hermoso como el de una princesa, el corpiño se ajustaba a su cintura y a sus pechos tal como le había quedado en el almacén.
La diseñadora le había mandado una tarjeta con un saludo de felicitación y buena suerte para la boda, Alma y la mujer había escogido para ella los modelos más hermosos y Emilia había hecho su elección, la cual tenía frente a ella sobre la cama- es un vestido verdaderamente hermoso Emilia.
- Sí- pasó la mano por el encaje- tiene un aire antiguo que me encantó tan pronto lo vi, seré la reina por un día.
- Te verás hermosa y todo mundo te va a envidiar.
Emilia sonrió y colgó el vestido en el fondo del armario ocultandolo con algunos abrigos por si a Claudio se le daba por fisgonear.
- Hola bonita- dijo Ulises sonriente.
- Ulises, qué bueno que viniste- le dio un beso en la mejilla.
- Vine tan pronto me llamaste.
Emilia asintió- es que quería pedirte un favor.
- Sabes que estoy a tus pies cuando quieras.
Emilia sonrió- quiero saber si- tragó saliva- Machu a vuelto a verse con Claudio.
Ulises se removió en su silla- ¿por qué la pregunta?
- Es una duda nada más.
Ulises se aclaró la garganta- no me gusta hablar de mi hermana pero no- suspiró- no se ha vuelto a ver con Claudio.
Emilia tragó saliva- uh.
Ulises se sentó junto a ella- ¿qué pasa Emilia?
Emilia negó con la cabeza y sonrió- bobadas, no me pongas atención.
Ulises le tomó una mano- somos amigos Emilia, ¿piensas que Claudio se puede arrepentir de la boda?
