Caída En Picada. ●Sakura Haruno● |SasuSaku|

☆45☆ La flor que se marchitó

Me puse ha escribir mucho así que subiré todo lo que ya tengo, por si en la semana no puedo actualizar. Estaré muy ocupada, así que espero y les guste.

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Sasuke con dos dedos toco la frente de Sakura. La pelirosa se detuvo antes de darle el golpe final. Sasuke viajo por toda la mente de Sakura, hasta encontrarla. Ella estaba sentada en un espacio oscuro. Sola, desnuda y frágil. Se veía muy vulnerable y estaba mirando a la nada. Sasuke se acercó a ella.

— Sakura... —habló Sasuke.

— Le hago mucho daño a todos, jamás van a perdonarme, estoy lastimando a los que más amo... —susurraba Sakura para sí misma, lo que causaba que no le hiciera caso a Sasuke.

— ¡Sakura! —gritó Sasuke, pero ella seguía sin hacerle caso. Quiso acercarse más a ella pero mientras más avanzaba, Sakura se iba alejando. Siguió gritando su nombre y corría más rápido.

— Le hago daño a todos, jamás van a perdonarme, todos me odiaran... Sasuke me odiará... Naruto me odiará... —comenzó a susurrar más alto. Sasuke corrió y corrió.

— ¡Sakura, despierta ya! —gritó Sasuke y al mismo tiempo alcanzó a tocarle el hombro, a lo cual ella lo miró. Sasuke abrió los ojos y seguían en la misma posición. Sakura se había detenido antes de darle el último golpe.

Solo que Sasuke al intentar mirarla, unas gotas de agua cayeron en sus mejillas. Se dió cuenta de que Sakura lo miraba con expresión distinta. Estaba llorando y lo miraba con los ojos abiertos.

— Sakura... —habló Sasuke acariciando la mejilla de Sakura. Ella bajó su mano y comenzó a hacer sellos con sus manos.
Se alejó un poco de Sasuke y se apresuró a terminar, aunque su cuerpo no respondía mucho estaba haciendo su mejor esfuerzo por mover sus manos. Justo cuando le faltaba el último sello una espada salió del pecho de Sakura. Sasuke se levantó como pudo y vió a Madara detrás de Sakura.

— Que mal, fallé. —soltó Madara.

— Dis... —susurró Sakura, pero no pudo terminar el último sello ni terminar la palabra. Sasuke abrió sus ojos como platos y Sakura seguía llorando. Sangre corría por la boca de Sakura y su sharingan se apagó, volviendo a sus ojos verdes. Madara sacó la espada y la volvió a clavar, esta vez atravesando el corazón de Sakura, pero detuvo la espada con sus manos, para que Madara no pudiera atravesar a Sasuke con la espada también.

— Ahora serás libre. —dijo Madara intentando hundir más la espada para alcanzar a Sasuke, pero Sakura no se lo permitió. Las manos de la pelirosa comenzaban a sangrar.

— No dejaré que te lastime... —susurró intentando que sus palabras sonaran, pero su voz se quebró. Madara sacó la espada nuevamente y la lanzó lejos. Sakura soltó un grito ahogado y Madara la tomó de los hombros, lanzándola lo más lejos posible de Sasuke.

— Un desperdicio de ojos. —se encogió de hombros Madara. Naruto alcanzó a ver y comenzó a llorar.
Sasuke soltó sus lágrimas y la miró a lo lejos.

— ¡SAKURA! —gritó desgarrandose la garganta. Ella lo había protegido hasta el último segundo de su vida. Sakura cayó al suelo y todos los shinobis miraban la escena sin saber bien a quién ayudar.

— Parece que no pudo completar sus sellos. Igual era una idiota al intentar matarme. —dijo Madara burlón.

— Sasuke... Lo-lo siento... —susurró con su último aliento, aunque Sasuke no pudo escucharla ella sonrió leve y cerró los ojos. Eso fue suficiente para que la adrenalina comenzara a arder por el cuerpo de Sasuke, la ira, el sharingan apareció y se puso de pie como pudo, caminando hasta ella.

— ¡Sakura! —gritó Sasuke. Pronto alguien fuete apareció en la mente de Sasuke. Ahora ambos estaban rodeados de oscuridad y no había rastros de Sakura.

— Hola Sasuke. —habló aquel anciano.

— ¿Dónde... Dónde estoy? —dijo Sasuke temblando un poco.

— Tranquilo, estamos en tu interior. Veo que necesitas ayuda para acabar con Madara. —explicó. Pronto el anciano le dijo quién era y por qué estaba ahí. Explicó algo sobre el chakra de alguien que reencarno en Sasuke pero que nunca se había puesto a utilizarlo. Le dió un poco de ayuda para sacar ese poco de chakra. Al despertar se daba cuenta de que su ojo izquierdo era diferente. Naruto ya estaba de pie, y de él emanaba un chakra muy poderoso.

— Vamos, Sasuke. —gritó Naruto. Sasuke miró a Sakura, quien yacía sin luz en el suelo. Cerró sus puños y con desición fue con Naruto y entre los dos comenzaron a pelear con Madara. Sasuke usó el Susano y Naruto uso el chakra de Kurama. Ambos estaban sincronizados y peleaban rápido.

Los kages llegaron a la escena. Habían sido derrotados por Madara pero Tsunade al fin había conseguido curarlos. Lo primero que hizo la quinta al llegar fue ver a su pequeña alumna que yacía sin vida sobre la tierra.

— Sakura... —la llamó. Las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas y corrió hacia ella.

— No se acerque, Tsunade-sama. —dijeron algunos shinobis de la hoja, pero la Hokage no hizo caso. Corrió y corrió hasta llegar a ella. Se dió cuenta de la enorme herida que estaba en su pecho. Su corazón no latía y estaba fría.

Tsunade comenzó a sanar sus heridas mientras Naruto y Sasuke peleaban.
— Tu no... No puedes morir, niña. —dijo Tsunade mientras daba toda su energía. Sabía que sería en vano pero tampoco quería dejarla así. Quería intentarlo por más estúpido que fuera.

— Déjame ayudar... —dijo Obito acercándose a la quinta. Kakashi lo ayudaba a caminar ya que zetsu negro impedía que se moviera.

— ¡Tu fuiste quién causó todo esto! ¡Le hiciste esto a Sakura! —gritó Tsunade mientras lloraba. Estaba molesta y con obvias razones.

— Lo sé, pero puedo ayudarla, sanando sus heridas no lograrás que vuelva a la vida, pero yo sí. —dijo Obito arrodillándose a lado de Sakura.

— ¿Qué planeas hacer Obito? —dijo zetsu negro ralentizando los movimientos del Uchiha.

— Obito... Pero cuando lo uses... Morirás. —dijo Kakashi. Se alegraba de ver a Obito de nuevo y de ver que ahora intentaba remediar las cosas, pero no quería que muriera de nuevo.

— Sí... Pero esta niña fue manipulada para mal. Hay mucho potencial en ella y creo que le espera un buen futuro, se lo debo, quiero que viva. —sonrió de lado.