Capítulo 81

1.1K 155 6
                                    

"Despierta", escuchó a la vez que sentía un leve sacudón, sus ojos le pesaban y sentía que su cuerpo se negaba a cumplir aquella orden tan simple, "Scarlet Despierta", volvió a repetir, su voz le sonó familiar, pero no pudo sacarla del abismo de oscuridad en el que se encontraba.

— ¿Qué le hiciste maldito?, —Reclamó furioso Remses volviendo a golpear a su hermano que con la cara llena de sangre se reía de él—.

—No le hice nada, —Contestó—, está cansada por lo bien que la hemos pasado, —Sonrió—, sabes, es buena en la cama, muy buena.

—Desgraciado, —Dijo con toda la rabia a cuesta a la vez que lo alzaba del piso para volverlo a golpear—, mientes, ella jamás haría eso.

—Si claro, ¿acaso estas ciego?, acabas de encontrarla desnuda en mi cama.

—Eso no comprueba nada.

—Por favor Remses, —Intervino Eleonor—, ¿Cómo puedes ser tan irracional?

—Tú no te metas, Scarlet, —La sacudió, esta vez por los hombros hasta que despertara—.

—Mucho cuido con como tratas a mi hija, —Advirtió Iol, acercándose y cubriéndola con su abrigo—.

— ¿Rem?, —Susurró aún algo somnolienta y pronto sus ojos se abrieron al reconocer al hombre que tenía al frente—, Rem, —Se abrazó a Remses deseando que eso no fuera un sueño y él no tardó en envolverla en sus brazos—.

—Pequeña, —Besó su coronilla—, tranquila, todo va estar bien.

—Sácame de aquí, por favor, no quiero estar aquí, —Rogó hundiendo su cara en el norme pecho del berserker—.

—Tráiganlo, —Ordenó Iol, señalando a Kael—, lo interrogaremos.

—Enseguida, —Respondió Eiden tomando a Kael de los brazos y llevándoselo de mala manera—.

La arropó y cargó hasta la habitación, no lo había soltado en todo el camino, era increíble lo frágil que se veía en esos momentos, parecía una niña asustada, su niña, le preparó la tina y puso algunos aceite florales para que se relajara un poco, estaba tan feliz de volverla a tener a su lado que no quería dejarla un solo segundo.

—Te preparé el baño, te ayudará a que te relajes un poco, iré a traerte algo de comer.

—No me dejes sola, —Lo tomó de la mano—, quédate conmigo, ¿sí?

—Yo siempre estaré contigo, —Besó su frente y la ayudó a desvestirse para luego él también sumergirse en la tina con ella, se abrazó a él y dejo que la acurrucara, que la calmara, que le diera esa paz que solo él sabía darle, se sentía protegida a su lado, había descubierto tantas cosas que sabía qué destruirían a su adorado berserker, pero que tarde o temprano se las tendría que contar—.

Entre El Amor  Y El Odio [COMPLETA]Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang