Él

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Un año, si, un puto año desde que ella se fue con él estupido de Griezmann. Hace poco se hablaba de un posible compromiso, al escuchar eso mi corazón se detuvo, no podía imaginármela caminando hacia el altar con Griezmann.

Isco me desmintió todo pues ella le contaba todo, ella le aclaro que existían posibilidades pero que nada era oficial, eso me calmo solo un poco, pues en cualquier momento Antoine se atrevería y lo haría.

Alessandra cada día estaba más distante de mi y lo agradecía infinitamente. Estaba realmente cansado de ella y no sabía como dejarla pues no quería lastimarla y mucho menos correrla de casa.

Mi teléfono vibraba y no dude en responder al ver su nombre en la pantalla. Para que ella me llamara debía ser de vida o muerte.

— ¿Todo bien? — respondí preocupado.

— ¿Te puedo ir a ver? — respondió sollozando. Alessandra no estaba pues estaba de visita con sus padres en Mallorca, como dije algo distante ya que ni siquiera me invitó.

— Cuando quieras puedes venir, te espero — dije sonriendo tontamente a la nada.

— ¿Entonces me abres? — pude notar cierta pena. Había preguntado si podía venir pero ella ya estaba afuera.

Colgué e inmediatamente me dirigí a la puerta principal, al abrirla ella estaba con una sudadera grande, unas gafas de sol y la capucha puesta. Me aparte para que se adentrara y ella lo hizo, al cerrar la puerta ella se giró y corrió hacia mi uniéndonos en un abrazo.

— No puedo hacerlo — dijo llorando. Yo no entendía nada.

— ¿No puedes hacer que? ¿Antoine te está obligando a algo? — la abrace aún más fuerte. Si era lo que estaba pasando lo mataría.

— No... solo que, yo no puedo seguir más con esto — ella comenzó a llorar aún más fuerte.

— Explícate pequeña — mi corazón se relajó al saber que no era lo que imaginaba.

— Antoine me ha pedido matrimonio, justo ayer y yo simplemente no puedo. Él podrá tratarme bien, podrá darme miles de cosas, podrá bajarme la luna, pero desgraciadamente él no es tú — me miro a los ojos a través de aquellos lentes de sol — soy tuya desde el momento en que te vi, obligué a mi corazón a amar a alguien más pero no pude obligarlo a pertenecerle, él jamás me ha hecho el daño que tú al jugar con mis sentimientos y aún así te amo aún más que a cualquiera. No pude evitar salir corriendo al verlo arrodillarse frente a mi y... y.... y ahora estoy aquí, humillandome frente a ti porque no he podido dejar de amarte. Porque mi corazón se decide por ti, siempre... — No la dejé terminar pues ya la estaba besando. Extrañaba demasiado poder hacerlo. Sentí sus lágrimas caer y no sabía con exactitud si eran de felicidad o de tristeza.

— Escapémonos — dije — tengo vacaciones, podemos ir con tu padre a México. Podemos ir a cualquier lado que me pidas, solo di que si — susurré directamente a su oído.

— Si — dijo ella sin siquiera pensárselo.

Voten si les esta gustando, me motiva muchísimo a seguir la novela jaja ❤️

Ibiza [MA20]Where stories live. Discover now