P r ó l o g o

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—Gracias por aceptar el trato URSS, con todo esto de la guerra me siento más tranquilo dejando a mi hija bajo tu cargo que sola en casa.. —Dijo el británico suspirando mientras veía al hombre rojo de imponente altura frente a él, mirándolo seriamente y sin importarle el asunto.

—Solo lo hice por el dinero y las armas que ofreciste, no lo confundas con un favor. —El tono frío del soviético hizo virar los ojos al de piel azul, pero al menos sabía que con ese carácter serio y estricto mantendría en línea a su descontrolada hija.

—Claro Claro, sólo mantenla lejos de los bares, cualquier lugar con alucinógenos y sobre todo de los hombres con hormonas alborotadas.. —UK dio la vuelta para abrir la puerta de la limusina que lo trajo hasta la casa del eslavo, dejando ver a una joven mujer bicolor dormida y cubierta con una manta.

—Cuando hicimos el acuerdo, creí que te referías a un niña, ella se ve lo suficientemente mayor como para cuidarse sola —El de gélidos ojos celestes arqueó una ceja en dirección al de traje negro pidiendo una expedición a su duda.

—Es básicamente como si lo fuera. Pasar tanto tiempo con USA y sus amigos la a descarrilado, por eso el porqué de lo que dije antes, te la confío a ti en lugar de mandarla a su territorio porque eres el único que podría mantenerla quieta... además no quiero que la alcance la guerra contra ese enano bastardo o le suceda algo entre esa gentuza con la que se junta —Se explicó el más bajo sin dejar de mirar a su niña, era su favorita desde que conquistó una parte del territorio sudamericano sólo por ella al verla junto a España.

—Como sea. Espero ver esas armas luego o te costará caro —URSS tomó a la mujer en brazos que poseía un sueño realmente pesado y dando una última mirada al taciturno y esperanzado inglés entró a su gran casa.

Caminó por algunos pasillos luego de subir a escalera y entró en la habitación más lejana a la suya en donde ya se encontraba el equipaje de la castaña debido a que la servidumbre se encargó de sacarlo del auto. Se inclinó dejándola sobre la cama perfectamente tendida aún arropada por la suave manta azul claro con la que había llegado y se marchó nuevamente a su oficina para ocuparse de sus asuntos en la guerra en la que aún no se incluía debido a su tratado con el demonio de la esvástica.

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Perú (5 horas después)

Desperté debido al frío que mi cuerpo comenzaba a sentir, antes de abrir los ojos sabía a primeras que estaba en una cama...pero no era la mía, no olía como mi habitación, el olor a vainilla había sido brutalmente reemplazado el aroma a nada. Literalmente no olía a nada, preocupada por mi paradero me levanté asustada pues lo último que recordaba era estar cenado con mi padre cuando el sueño me atrapó...
El té, estaba bebiendo el té que me había ofrecido, por favor Dioses..que esto no sea un maldito reformatorio o me voy a morir. Apenas tuve mejor movilidad en mi cuerpo me cubrí mejor con la manta que si olía a mi y abrí la puerta topándome con un muy largo pasillo totalmente vacío y sin ninguna decoración, esto es horrible, caminaba tratando de controlar el castañear de mis dientes a causa del frío y los nervios cuando oí una voz bastante pausada y ronca a algunas puertas de distancia, ese era idioma Ruso.

—Sé que estás despierta, date prisa. —El tono era serio y frío, sin duda de un hombre mayor.

—Por favor que esto sea sólo una pesadilla.. —Murmuró lo más bajo que pudo avanzando y abriendo la puerta de donde vino la voz, alzó las cejas sorprendida cuando se encontró a un nombre que le sacaba por lo menos una cabeza y media de altura o más, poseía una musculatura notable y un porte serio y sumamente varonil— Si este es el infierno, no me quiero ir.. .

—.... —Soviet la miró inquisitivo por la extrañeza de la mujer, decidió ignorarlo esperando que no le diese problemas— Tu padre te dejó a mi cargo, hay 6 reglas fundamentales que debes de seguir al pie de la letra si no quieres problemas.

—¡Ese...adicto al té! ¿¡Me trajo al servicio militar!? —Chilló alarmada la de ojos café claro, iba a hacer un berrinche... quería volver a su cómoda mansión de inmediato.

—Silencio. Como iba diciendo, las reglas son;.. —Comenzó a enumerar seriamente.

No traer hombres.

No emborracharse.

Ser ordenada.

Mantener limpio lo que toques.

No gritar.

Respetar los horarios de despertar y dormir.

—No puedes estar hablando en serio, ¿No beber?, ¿No sexo?, ¿No gritar?. ¿Que mierda es esto, un monasterio? —Respondió la bicolor de mala manera, se tensó muchísimo cuando vio al mayor levantarse...estaba jodida.

—Vas a respetar cada una de esas reglas como si se trataran de tu vida, de lo contrario te enviaré directamente con el imbécil Nazi y me va a importar un carajo el trato que hice con tu estúpido padre. —La voz del eslavo salió aún más ronca y sombría, su ojo visible parecía congelarlo todo, Perú supo que debía obedecer si quería su pellejo entero.

—‹Padre...¿en qué mierda me has metido..?› —Dijo la castaña para sus dentros, se limitó a asentir en respuesta a lo dicho por el más alto, este la miró conforme y la mandó a su habitación...eran casi las 2:30 a.m .

Beautiful Angel Of The Night (URSS x FEM Perú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora