𝐓𝐇𝐄 𝐖𝐀𝐍𝐆 | "Lo único que quería hacer con ella, era follarla. Ella era tan inocente, tan preciosa, con esa mirada destellante y vibra chispeante... Yo era egoísta, una serpiente traicionera amante del dinero y de las mujeres y ¡Vaya que me de...
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27.CONFESIÓN
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Esa mañana, alegre y tibia, suavizaba la luz que se filtraba por las persianas a través de la ventana hacía la silenciosa habitación. Un par de días habían pasado después del nacimiento del primogénito de Dylan, y como era de imaginarse, la mansión Wang se llenó de una extraña aura de alegría y regocijo. La oscura mirada de Jackson parecía iluminarse mientras observaba al bebé en silencio, pero pese a estar enternecido en su interior, su inexpresivo semblante no cambió. Era pequeño, muy pequeño. Sus manitas, sus manitas eran muy lindas, sus facciones eran idénticas a las de Yebin, salvo su nariz afilada, esa era la de Dylan.
—¿Es normal sentir tanto amor por alguien tan pequeño?— Susurró su hermana mientras le sonreía con ternura al pequeño.
Jackson se sorprendió. Sooyoung llevaba años de que no sonreía de esa forma, sus ojos se hicieron pequeños y sus pómulos se realzaron. Sooyoung estaba encantada viendo a su sobrino dormir. Jackson frunció el ceño observando la reacción de su hermana, no lo podía engañar, a él no, pesé a mostrarse y sentirse feliz por Dylan, sabía que Sooyoung sentía una amarga tristeza en su interior, había muchas cosas que todos desconocían de su hermana, incluso Dylan.
Un vago recuerdo llegó a su mente de forma fugaz, se sentía melancólico, sus manos comenzaron a sudar frío como esa vez que recién llegaba de una fiesta, casi podía sentir el frío estremecer su cuerpo nuevamente, entonces la escuchó llorar en su habitación. Sooyoung lo había visitado ese otoño después de dos semanas de haberse divorciado, Jackson jamás le desearía a nadie sentir lo que él sintió al girar la perilla de la puerta y ver a su hermana sobre la cama en un charco de sangre. Sooyoung tenía tres semanas de embarazo para cuando su mismo cuerpo lo rechazó.
