💐Kou y Tú💐 ×Solo Mía ×

💐Cap. 11💐

=Subaru's POV=

La muchacha alzó la mirada para demostrar que no estaba aterrorizada, aunque no servía de mucho si seguía temblando de aquella manera. Resultaba un gran espectáculo para Laito, pero para la joven todo se estaba desmoronando a su alrededor.

-¿Cómo te llamas?- Pregunté.

-Me llamo (T/n).

Calló y esperó a que le hiciéramos más preguntas. Estaba tomando la actitud propia de abrir la boca solo y exclusivamente cuando te dirigían la palabra. Temía hablar de más y equivocarse en algo. 

-Te haré una única pregunta.- Dijo Shu.- ¿Por qué crees que deberíamos ayudarte?

Típica pregunta. Aunque no era mala. Necesitábamos razones y argumentos lo suficientemente válidos como para ponernos en peligro. Básicamente, todo dependía de lo que dijera a continuación.

-Pues... Em... La verdad es que... - Titubeó, sin saber realmente qué decir.

-¿Acaso no sabes hablar cuando tu novio no está delante para protegerte?- Volvió a cuestionar Shu.

La chica enmudeció y quedó absorta y confundida.

-Esto es una pérdida de tiempo, podéis iros.- Dijo Laito, levantándose del sillón.- No deberíamos de haberlos dejado pasar desde un primer momento.

Se dirigió hacia la puerta para abrirla y echar a la chica, pero Shu le agarró del brazo, impidiéndole continuar su camino.

-Espera. Deja que hable.- Ordenó, mirando (T/n).

Entonces vimos cómo la humana tenía los ojos húmedos y rojos, a punto de derramar lágrimas. Pero no lloraba. Se negaba a ello.

-Sé hablar sin Kou a mi lado. Sé hacerlo. No lloro porque me niego a humillarme delante de gente como vosotros. Si no nos ayudáis, seguiremos nuestro camino los tres solos. ¿Queríais razones? Vale. Soy lo suficientemente egoísta para meter a inocentes en este problema. No quiero morir, quiero vivir. Necesito vivir. Estoy asustada, aterrorizada y ni siquiera sé defenderme. Pero eso no os da derecho a juzgarme y a mirarme por encima del hombro. Me tratáis como si fuera una inferior. Por el hecho de ser una humana. Bien, si tan débiles somos los humanos, ¿por qué mantenéis todo esto en secreto y os escondéis? Igual que hay humanos fuertes y débiles, también hay vampiros fuertes y débiles. ¿Sabéis qué? No necesitamos vuestra ayuda. Ya no. Que paséis un buen día.- Dijo, y cuando terminó pasó por el lado de Laito, sin mirarle a la cara, luego abrió la puerta y miró hacia atrás un último momento.- Ah, por cierto. ¿Te llamabas Laito , ¿no?- Preguntó, girándose hacia él. Este asintió, todavía asimilando las palabras anteriores de la chica.- Vete al cuerno.- Finalizó y salió de la sala.

-Creo que ha dado suficientes razones, ¿no es así Shu?- Le dije a mi hermano mayor.

-Eso parece, Subaru.- Contestó, con una sonrisa.

=(T/n)'s POV=

Idiotas. Idiotas todos. Los maldigo por ineptos y cucarachas. Cuando salí de la habitación, me encontré a Kou y a Yuma pegados a la puerta, seguramente porque estaban escuchando nuestra conversación. Espero que no les haya molestado que desperdiciara nuestra única oportunidad, pero tengo orgullo y no pienso arrastrarme por unos malnacidos.

-Sabes, cerda... Me alegra que hubieras puesto a ese pervertido en su lugar.- Me animó el de pelo naranja.- No te preocupes por lo demás, ya encontraremos otra manera de llegar hasta los fundadores.

Kou se limitó a rodearme con sus fuertes brazos. No dijo nada, pero me brindaba todo su apoyo. Después, caminamos hacia la salida, pero cuando nos dispusimos a avanzar, alguien nos paró.

-Hemos cambiado de opinión, ¿os gusta leer?- Preguntó Subaru, con una leve sonrisa en el rostro.

Mi cara se iluminó como una luciérnaga en plena noche. No la había cagado tanto, después de todo. Miré a Kou, el cual parecía igual de satisfecho que yo.

-(T/n), ve con Laito al laboratorio; Kou, tú con Subaru a la biblioteca; y Yuma, ven conmigo a la habitación de Reiji.- Ordenó el mayor de la familia.

¿De verdad? ¿Con Laito? ¿No podía ser con otro? Aturdida y confusa, acepté el mandato con el fin de no molestar demasiado. Me volví hacia el muchacho de ojos verdes y me dedicó una sonrisa. Ugh...

-Bitch-chan, supongo que ahora tendremos mucho más tiempo para conocernos mejor, ¿no te parece?

-Sí... Eso parece...

Me hizo un gesto con la mano, indicando que le siguiera. Obediente, hice caso.