📍MILAN

💎37💎

Narra Antonella

Me desperté porque tocaron la puerta, el embarazo y mi super panza me daba mucha vagancia de todo. Me puse la bata y cuando llegué a la puerta era un desayuno con un globo en forma de corazón. Era un súper desayuno con todo lo que tengo que comer, y algunos permitidos, también venía con un conjunto rojo y blanco.

Me senté en la cama y puse la bandeja en mis piernas y leí una cartita:

Carta 1: Buen día hermosos, como amanecieron? Yo me desperté con ganas de jugar así que les preparé esto. Cuando termines de desayunar lee la carta número 2 y segui las indicaciones (no son muchas) no hagan trampa, y provecho.

Cuando termine de leer me lleve la carta al pecho y la deje a un costado empezando a comer. Cuando termine de desayunar y me sentía muy hinchada leí la carta 2.

Carta 2: Espero que haya estado rico, todo lo hice yo, ni yo sabia lo que podía cocinar, con YouTube obvio, ahora te toca salir e ir al living, en la mesita encontrarás la última carta, si cortito el juego pero lo demás lo seguimos juntos.

Me vestí rápido y salí hacia el living donde se encontraba un sobre con un corazón y decía Anto.

Carta 3: Por donde empezar, por ese día donde te conocí capaz, sinceramente no me acuerdo la fecha exacta, vos seguramente si, pero si me acuerdo lo que senti al ver a esa morocha de ojos verdes y misteriosos, te soy sincero también mire tus hermosas curvas, pero en ese momento pensé, ella es mi mujer, a ella estoy destinado, y así fue como me acerqué y te intenté chamuyar, vos me preguntaste a que me dedicaba, yo te respondí que jugaba al fútbol y me dijiste que no te iban, que no creías que podían ser hombres de pareja, yo te dije no todos son así, yo te puedo demostrar que los futbolistas también pueden encontrar su amor, ni siquiera sabíamos nuestros nombres y yo ya me había enamorado, me dijiste que te llamabas Antonella Cavalieri, yo te dije que me llamaba Paulo Exequiel Bruno Dybala, te reiste por mi largo nombre y yo me enamoré de nuevo de esa sonrisa, te sonó el teléfono era tu amiga diciendo que se había ido, dejándote sola, sin manera de volver, me ofrecí a llevarte y dudaste pero al final accediste. Llegamos a tu departamento, me dijiste que estabas probando ciudades de Italia y la primera que fuiste fue Palermo, te dije que yo podía ser tu motivo de quedarte allí, me pediste que te lo demuestre, y así lo hice, yendo a tus desfiles y vos viniendo algunos partidos con un poco de timidez, conociste a mi mamá y te amo al instante, te convertiste en mi fan número 1 junto con mi mamá, mis mujeres para donde sea que vaya. Hasta que me lo dijiste, me quedo con vos e iré a donde vayas, y así fue cuando nos tocó ir a Turín juntos. No lo voy a negar vos seguías siendo mi fan número uno pero yo estaba cambiado, me importaban otras cosas, y no me di cuenta lo que perdi, dije que cosas de las que me voy a arrepentir de por vida pero ahora no es momentos de arrepentimientos, te deje ir y pensé que mi vida seria mejor sin vos, pero eso es imposible porque sos mi mujer. Hasta que te volví a ver, en otra parte de mi Italia querida, Milan, ahí nos reencontramos y al principio no fuimos bien pero después te convencí de intentarlo, lo arruine y me costo volver a tenerte, pero lo pude hacer y meses después vino Bruno, lo volví a arruinar, pero acá estamos haciendo una cuarentena juntos pero a la vez separados, tan cerca y tan lejos. Esta va a ser la historia que le voy contar a Bruno el día de mañana o el final puede cambiar, no lo sabemos. Te ama eternamente tu Pau.

Cuando termine de leer lloraba y sollozaba mucho, era mucha verdad de golpe, nuestra historia, y no quiero que termine así.

-Pau- dije cuando salió de la cocina y lo abracé- no dejemos que nuestra historia termine así, por favor, retomemos la historia, desde donde la dejamos- dije y sonrio

-Como no, amor- dijo y me besó.