Antes de comenzar necesito ofrecerte dos disculpas, la primera por obviamente escribir esta nueva carta a altas horas de la noche, pero pensé que sería una buena idea que tu al despertar leyeras esto, buscando de cierta manera que te provoque la felicidad necesaria para motivarte a tener un buen día. Por otro lado la segunda disculpa es porque el día de ayer no actualice esta historia, el escribir una carta diaria es mucho más complejo de lo que aparenta, no significa que no me guste, todo lo contrario es el único medio por el cual me puedo expresar de esta manera, manera en la que para ser sinceros nunca había sentido y eso es debido a que nunca antes me había enamorado con tal magnitud.
En lo personal mi relación con el amor nunca antes había sido tan existente, todo era sencillo, hasta que apareciste tú. Siempre me había preguntado cuál era la verdadera forma del amor, y creo que hasta hoy tengo una respuesta clara, el amor no tiene forma, es omnipresente, solo lo sientes, estando en cualquier lugar, sientes esa sensación que te hace sentir invencible, te hace sentir glorioso, solo piensas en esa persona, y eso, justo eso es lo único que ronda por mi cabeza todo el tiempo mi imaginación recuerda tus hermosos ojos, tus labios que provocan un deleite, tu cabello rizado, tu aroma, es algo ridículamente hermoso, el pensar en ti, me hace mucho bien, el tan solo escuchar y/o decir tu nombre me lleva a un lugar en el cual solo estamos tu y yo.
Quizá esto sea un error, pero de lo que puedes estar segura es que mi amor es una resistencia, es algo en el que siempre estarás a salvo, algo en donde siempre podrás confiar, reír y llorar, porque eso es el amor, y créeme que quiero conocerlo por primera vez contigo, solo contigo, ya que tu eres mi único y primer amor.
El no verte día a día, me esta destrozando por dentro, estaba acostumbrado a apreciarte casi diario y ahora me doy cuenta que te necesito como nunca antes, que te extraño como nunca antes había extrañado, que te amo, como nunca antes había amado. No es algo pasajero, te amo todo el tiempo y todo ese tiempo tu estás presente en mi mente.
Se que muy en el fondo de tu corazón empiezo a hacer que tu también sientas algo por mi y espero que tu me permitas ser una pequeña gran parte de tu vida, así como tu eres en la mía, eres simple y sencillamente mi motor de vida, día a día me despierto con la emoción de seguir enamorado de ti, de gritarlo a todo el mundo y con el único deseo de que tu comiences a sentir esta locura, esta pequeña cosa llamada amor.
Al escribir esto, se me viene únicamente a la mente tu voz, es el sonido más placentero que un oído puede escuchar, también se me viene a la mente tus ojos, ese hermoso color café que me recuerda a un lugar donde puedo estar seguro, ahora mismo lo único que quiero es estar a tu lado para abrazarte para escucharte, para aconsejarte, para contarte mis problemas, ya que solo te quiero y te necesito a ti...
Espero verte pronto, si tu así me lo permites, aunque si no es posible yo aguantare todo el tiempo que sea necesario para poder verte al menos por un segundo, para ver mi reflejo en esos cristalinos ojos, y solo para decirte que te amo, que eres la mujer perfecta, física y emocionalmente, que eres mi mujer ideal, que eres el amor de mi vida y que siempre, siempre mi amor por ti es y será irremediablemente infinito, pues tu me haces sentir glorioso.
Recuerda que eres una persona única que nada ni nadie puede apagar, ya que ni siquiera las estrellas son tan bellas y brillantes como tu lo eres, espero te haya gustado esta nueva carta, mañana ten por seguro que tendrás una nueva, expresando lo tanto que “Te amo", la intención de esta, era recordártelo...
Eres la luz que ilumina mi camino, “eres lo que más quiero en este mundo, eso eres…”
Te amo…
