Catalina la inmaculada
Puso el disco de Red Bono. La cogió de la mano, y la saco a bailar, se divirtieron un rato escuchando música y bailando. Catalina se le paso la tarde muy rápido.
Llego Mateo.
-Hola mamá.
-Hola príncipe como te fue
-Bien tengo tareas.
-Te presento a Luis. Luis te presento a Mateo.
-Hola campeón Dijo Luis
Se saludaron, empuñando las manos y dándose un toquecito en los dedos.
-Quiero jugar Nintiendo. Dijo Mateo
-¿Te gusta Mario Bross? Pregunto Luis
-Si mi preferido. Jugamos,
Jugaron una hora Luis tenía que irse, Mateo no quería.
-No lo mismo que Carlos siempre se tiene que ir. No otro ratico, lo prometo un rato y nada más. Dijo Mateo
-¿Quien es Carlos?. Pregunto Luis
-El novio de... decía y no terminaba. Luis miro a Catalina.
-El novio de mi amiguita Ángela, Sergio si es muy serio, pero también jugamos, el novio de mi otra amiguita Cecilia.
-Si claro, Carlos es un vacan. Y Sergio igual. También son mis amigos. Dijo Luis
-Que bien, todos somos amigos lo dijo lanzándose encima de Luis.
-Bueno, bueno, así no, le dijo Catalina.
Luis le hizo cosquillas lo domino en el sofá.
-Me voy amiguito nos vemos otro día y hacemos un duelo.
Chao lo dijo chocando las manos.
-Mujer nos vemos, me alegro conocer tu hijo, tu apartamento y degustar un café junto a ti. Le dio un beso en la mejilla tomándola de las manos,
-Vuelve cuando quieras. Gracias por todo. De repente se vio dándole otro beso en la mejilla. Se dio cuenta y se retiró unos pasos. Luis se sonrió y le dio otro beso en la otra mejilla. Muy cerquita a la boca, ella lo sintió muy cerca a la boca. La reacción la decepciono, no se puso nerviosa, ni sudo, ni lo empujo, le gusto. "No que me está pasando pensó".
Luis salió, ella abrazo a mateo, Luis dejo la billetera, Lo llamo al celular
-Luis soy Catalina se te quedo la billetera.
-Sí, espera un momento, no, si se me quedo.
-Ya te la llevo a la portería. Dijo Catalina
-No mujer estoy de un afán, guárdamela mañana paso por ella sí.
-Ok,
La observo, la miro, la esculco, encontró tarjetas, no las saco solo las observo, le dio miedo que tuvieran un orden y se diera cuenta, Dinero en efectivo, pesos, dólares, la dejo sobre la mesa.
En la mañana fue a la entrevista, se vistió muy elegante. La psicóloga fue muy amable, la contrataron. Parecía que todo iba a cambiar.
En la tarde Luis la llamo.
-¿Hola mujer, puedo ir por mi billetera?.
-Si, estoy en el apartamento.
Lo espero, llamo a recepción dijo que el señor Luis Gerónimo vendría a visitarla que por favor lo dejaran entrar.
Timbraron.
-Hola Luis como vas sigue.
-Hola Mujer como estas.
-Bien, sigue siéntate. Ponte cómodo.
-Que te ofrezco, un jugo, si quieres te puedo hacer un granizado.
-Pues sí me parece bien. Dijo Luis sonriente
Catalina saco el hielo y lo echo a la procesadora batió la pulpa del maracuyá con el azúcar y le aplico el hielo, deseas crema de leche, leche condensada o solo.
-Si con todo eso. Dijo Luis
Vio su billetera la abrió, la encontró normal, tuvo un impulso y abrazo a Catalina por detrás. Catalina no se lo esperaba, lo empujo suavemente y le entrego un vaso con el granizado colocándole un pitillo.
-Esta delicioso y con estas sed. ¿Quieres probar?.
Catalina lo observo, se quedó mirándole la boca.
-Tranquilo, siéntate, le dijo algo nerviosa.
Luis Le introdujo el pitillo en la boca de Catalina. Catalina sorbió un poco. Miro el vaso. Sintió los labios de Luis muy cerquita a los de ella. Tan cerquita que hizo un movimiento involuntario y termino besándolo. Luis se deshizo del granizado y le correspondió el beso.
No supo cómo termino besándolo, no pensó solo se dejó llevar, lo tomo por la cabeza y se dieron muchos, muchos besos, robados, bien dados, no importaba. Luis la retiro suavemente. Le sonrió. Ella estaba asombrada.
-Lo mejor es que te vayas, mira yo estoy muy agradecida contigo, pero esto lo dejamos aquí.
-Bien como quieras, cogió la billetera y se fue.
Yaneth por la noche la llamo.
-¿Hola como te fue con romeo?.
-Mal es un guache, se aprovechó y me beso. Dijo Catalina
-Que bien. Un S.O.S
-No qué reunión ni que nada, no lo quiero volver a ver. Dijo Catalina
-Primero te convenses tú y luego a los demás. Dijo Yaneth
-Yaneth no me terapee, eso es un culicagado. Consentido, hijo de papi mami, desgualambido, desgraciado, que nada se le niega y dijo, esta tonta cae porque cae.
-Si como, ya caíste. No te va a llamar, no te va a rogar a ese hombre le llueven las mujeres. Dijo Yaneth
-Sí que le lluevan yo no necesito de nadie, soy feliz así.
-Bueno, no dejes que el muchachito se le suba a tu cabeza porque si no te veo emproblemada. Dijo Yaneth
Enci Silva
ŞİMDİ OKUDUĞUN
Cinco mujeres y el amor
RomantizmCinco amigas les unían las ganas de superarse, las cinco habían sufrido el desamor, confiar en la historia del príncipe y la cenicienta, no creían en el amor, Procedían de distintos lugares, compartían el gusto por la música y el baile, sin proponér...