Alba, a sus 20 años empieza a trabajar en un centro medico cuando por casualidad o por cosa del destino hace que se cruze con Natalia, una chica que le marcará mucho. Ninguna de las dos tenía en sus planes enamorarse, pero de esa manera fue inevitab...
Ambas nos levantamos de la cama y fuimos hasta la cocina para preparar la cena.
-Qué te apetece cenar?- Le pregunté a Natalia mientras abría la nevera para mostrarle lo que había
-Lo que tú quieras, a mi me da igual- Dijo Natalia encogiéndose de hombros
-Pues a mi me apetece un bocadillo de tortilla. Que te parece?- Le dije a Natalia cojiendo unos cuantos huevos de la nevera
-Por mi perfectísimo, me encanta la tortilla- Dijo ella con una sonrisa
Mientras preparaba las tortillas,Natalia ponía la mesa, y después le puso aceite, sal y tomate al pan. Cuando acabamos de preparar la cena nos sentamos en la mesa del comedor y empezamos a cenar.
-Rubia, esto está buenísimo- Dijo con la boca llena mientras le pegaba un bocado al bocadillo
-Muchas gracias. La verdad es que se me da bastante bien cocinar- Le dije a Natalia sonriendo
-A mi se me da bien hacer postres- Me dijo aún con la boca llena
-Pues haber cuando me haces un postre rico- Le dije deseando probar uno de sus postres
-Me lo apunto- Dijo Natalia guiñándome el ojo -Supongo que te gusta el chocolate no?- Me preguntó
-A que clase de persona no le gusta el chocolate?- Dije yo soltando una carcajada
-Bueno yo solo pregunto- Dijo ella riéndose también
-Pero el chocolate blanco no me gusta, solo me gusta el negro- Le aclaré
-Como a mi entonces- Dijo ella
-Guay- Dije contenta porque teníamos los mismos gustos
-Pues la próxima vez que cenemos o comamos juntas traigo yo el postre- Me informó Natalia
-Me parece genial. Tengo curiosidad por ver que traes- Solo de pensar que iba a traer Natalia se me hacía la boca agua
-Tu no te preocupes, traeré algo muy rico- Dijo Natalia para que se me hiciera aún más la boca agua
-Perfecto, pero no sabré que comerme primero si a ti o al postre- Le dije a Natalia poniendo cara de diablillo
-Ui rubia- Dijo ella poniendo la misma cara que yo acababa de poner
Durante la cena hablamos de varias cosas y cuando acabamos de cenar como nos sobró un rato hasta que Natalia se tuviera que ir, nos fuimos al sofá. Antes de empezar a hablar con Natalia le envié un mensaje a Marina.
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-Antes de que te fueras me gustaría decirte una cosa Natalia- Dije empezándome a poner nerviosa. Notaba como mi corazón se aceleraba y como mis mofletes se iban poniendo como un tomate
-Claro, dime- Dijo Natalia, suponía que intrigada por ver que le quería decir
-Se que esto puede sonar a locura porque hace poco que nos conocemos pero bueno simplemente te lo quiero decir. Desde que nos conocimos no he dejado de pensar ni un momento en ti y desde que nos vimos por primera vez me has hecho sentir cosas increíbles. Puede ser que sea demasiado pronto porque es el tercer día que nos vemos, pero bueno, el caso es que me gustaría que empezásemos algo serio tu y yo- Le dije a Natalia tranquilizandome porque ya había empezado a decirle todo lo que le quería decir. Notaba calor en mis mofletes de lo rojos que estaría, ahora solo esperaba que ella sintiera lo mismo por mí.
-Rubia, me encantaría que fueses mi novia. A mi me pasa exactamente lo mismo contigo- Después de decirme eso me agarró del cuello con las 2 manos y me dió el beso más tierno que nunca me habían dado
-Me gustaría hacer las cosas despacio contigo. No quiero que nos precipitemos, no quiero cagarla contigo.Quiero hacer las cosas bien- Le dije a la oreja mientras nos fundíamos en un largo abrazo
Después de este bonito momento que acabábamos de vivir nos tumbamos en el sofa. Yo me tumbé encima de Natalia abrazándola. Se nos pasó volando el tiempo, en teoría habíamos quedado para ver una peli y ni habíamos encendido la tele, tampoco nos comimos los bombones que ella había traído ni hicimos las palomitas que fui a comprar al super expresamente porque venía ella. Pero me daba igual, habíamos pasado una tarde muy bonita y jod.. que ya era mi novia oficialmente
-Cariño, me tengo que ir ya- Me dijo mi novia intentando levantarse porque yo estaba encima suyo
-Vale- Le dije poniendo una cara triste y dejando que se levantase
Natalia se puso los zapatos y la acompañé a la puerta. Nuestra despedida fue dándonos un largo abrazo y muchos besos muy tiernos. Después de eso ella cogió el casco que había dejado en la mesa del comedor, me volvió a dar otro beso y se fué. Yo aproveché los 15 minutos que me quedaban hasta que viniese mi hermana para recoger los platos. Cuando me dí cuenta Marina llegó.
-Hola guapa- Le dije a Marina mientras le abría la puerta y le daba un abrazo
-Que tal tu tarde?- Me preguntó Marina con curiosidad de saber como habían ido las cosas con Natalia
-Mejor vamos al sofá y te cuento- Le dije a mi hermana cogiéndole la mano y llevándola al sofá
-Vale vamos. Donde está Blacky?- Me preguntó Marina cuando nos sentamos en el sofá
-Está en el jardín, antes no ha querido entrar. Supongo que le daría vergüenza porque estaba Natalia- Le dije a Marina riéndome porque era un perrito muy vergonzoso
-Pues voy a buscarlo y lo traigo para que se esté aquí con nosotras en el sofá- Dijo Marina dirigiéndose al jardín
-Así también le cuento mi vida amorosa a él- Dije riéndome
-Claro- Dijo mi hermana también riéndose desde el jardín
Marina vino con Blacky en brazos y nos sentamos los 3 en el sofá. Blacky se tumbó en las piernas de Marina mientras lo acariciábamos.
-Lo primero que tengo que decirte es que tengo novia- Le dije a Marina esperando su reacción
-Toma ya! Me alegro mucho por tí- Dijo Marina saltando de alegría mientras se acercaba a mi para darme un beso en la mejilla y un abrazo. Lo dijo con tanta emoción que Blacky se asustó y pegó un bote para bajarse del sofá
-Yo también estoy muy contenta- Le dije a mi hermana con una sonrisa de oreja a oreja
-Y como ha sido?- Me preguntó con curiosidad mientras acariciaba a Blacky porque se había asustado
-Pues cuando hemos acabado de cenar nos hemos sentado aquí en el sofá y básicamente le he dicho todo lo que siento por ella. Ella después me ha dicho que quiere ser mi novia y me ha besado- Le dije a Marina poniéndome super roja porque estaba muy emocionada.
No me creía lo que acababa de pasar hacía un rato, no era consciente de ello. Hacía 2 días que había tenido un día de mierda y ella lo arregló por completo, ayer la acompañé a tatuarse y nos dimos nuestro primer beso, y hoy ya era mi novia. Era el tercer día que nos veíamos, pero hay cosas que son inevitables. Fué amor a primera vista por parte de las dos, como en las películas y nunca antes me había sentido así. En ese momento solo deseaba que las cosas fueran bien y no nos precipitáramos.
Después de ponernos al día, Marina y yo vimos una peli y nos fuimos a dormir porque a lo tonto se nos hicieron las 3 de la mañana.
