Ocean Waves [Jimsu Mermaid AU]

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Las olas se escuchaban muy fuerte, el cielo se nublaba dejando nubes grises y opacas, una tormenta se aproximaba, tenían suerte de que llovería en aquella isla ya que así los dejaba a salvo de un posible ataque aéreo. 2 semanas habían pasado, Yoongi comenzaba a tener náuseas desde la primera semana de embarazo, ya se estaba acostumbrando a sentirse mal, Jimin dormía en una colcha que le proporcionó SeokJin, eran varias capas de algodón y mantas, no eran como aquellos colchones duros y feos en los que tenía que dormir Yoongi, pero al menos no estarían allí un buen rato, Yoongi pasaría su embarazo en un lugar mejor, Jimin estaba planeando buscar una casa cuando fueran a Canadá por una temporada.

Aquella cabaña era un poco pequeña pero allí cabía una mesa para que pudieran comer ya que comer en los comedores de la cocina del hotel no era muy óptimo ya que no era un lugar de cinco estrellas y sólo estaban por una temporada. Y Por tiempos de guerra era un refugio para científicos y militares, no quería exponer mucho a Yoongi, el le llevaba comida siempre, todos los días y lo mimaba para brindarle seguridad.

Comenzó a Llover y ambos estaban en aquella cabaña, Jimin estaba leyendo un libro en la mesa con un quinqué para ayudarle a leer mejor.

"Amor, tengo frío, ¿Puedes darme un abrigo?" Yoongi se levantó con una bata blanca (de esas que usaban las mujeres en esa época), para ir hacia Jimin y sentarse en su regazo.

"Cariño, está lloviendo, no puedo arriesgarme a que pesques un resfriado, no le haría bien a nuestro bebé, te daré la sábana con la que duermo para abrigarte más" Jimin levantó a Yoongi y lo puso en la cama con las dos sábanas para que no sintiera frío, la pequeña ventana que estaba junto a la puerta dejaba entrar viento y agua pero no les importó mucho ya que la tormenta pasaría.

Yoongi tenía el cabello un poco largo, ya estaba por debajo de sus orejas y por éste aspecto ya parecía una mujer. Aunque no lo era, pero al menos aparentarían para que se pudieran casar y pasar la guerra en otro lugar y no le afectara a Yoongi en su embarazo.

Jimin besó sus labios y se acostó con el para abrazarlo y acurrucarse con él y esperar que la tormenta pasara con calma.

"¿Que pasará cuando la guerra acabé?, No me gusta ver a los humanos enojados unos con otros, ¿Podremos ser una familia feliz si pasa esto?" El pálido se acurrucó al pecho de Jimin mientras se frotaba en él y olía el aroma que desprendía, amaba su olor, olía como a tierra salada, por eso Jimin lo hacía sentir en su hogar, él era su nuevo hogar y formarían una familia.

"Ojalá espero que pase, quiero que mis hijos corran felices por la casa y sin ningún temor..."

"¿Cuantos hijos quieres que tenga?" Cuestionó el pálido hacia su amante mientras lo veía a los ojos con un brillo especial.

"4 o 5, entre más mejor, quiero estar seguro que no tendremos problemas para criarlos, quiero ser felices con ellos y a tu lado" Yoongi acercó su nariz para frotarla con la de Jimin.

"5 es mucho pero veremos luego si podemos darles lo que necesita cada uno" dijo un poco decaído, tenía miedo a que sus futuros hijos corrieran el riesgo de que algo les pasase por no ser un humano, ya que no era común que un hombre se embarazara, no era común tan siquiera ya que no existían los hombres embarazados, en caso a los humanos.

"Estaremos bien, estarás bien... lo prometo, tu cabello no es tan corto, claro que podrás hacerte pasar por una mujer para huir del país por un tiempo, solo necesitamos eso, tiempo" Yoongi asintió y se quedó dormido en los brazos de Jimin cayendo en el morfeo mientras se imaginaba a su hija o hijo corriendo feliz y jugando como un niño normal y ambos como una familia normal.

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Seokjin vió hacia el cielo esa mañana, estaba despejado y ya no habría tormenta, sería perfecto para que Jimin y Yoongi huyeran lo más rápido posible antes de que los mataran por bombas aéreas o por ataques militares o incluso que los científicos capturaran a Yoongi para su experimentación por estar embarazado e incluso ser un espécimen de sirena.

"Solo espero que vayan seguros a Vancouver" se dijo a si mismo en voz alta uno de sus compañeros científicos alcanzó a oírlo.

"Te veo ansioso, ¿Que planeas en Vancouver?" Dijo el chico rubio mientras lo veía un poco intimidante.

"Mi colega Jimin Richards, quiere irse con su novia a Vancouver pero ella está embarazada y el no puede irse con su padre a Denver porque el señor Steven Richards es un hombre de negocios prestigioso en Estados Unidos y no quiere que le pase algo si el regresa ya que están interrogando en estos meses a personas que no son blancas y son de diferentes etnias y aveces llegan espías infiltrados que le pueden dar pistas de donde vive y pueden asesinar a toda su familia" aquel chico rubio torció los labios poniéndose en el papel de el colega de Seokjin.

"Es mejor que se vayan de una vez, aquí corremos riesgo todos, y la pobre chica está embarazada y lo peor es ver a una madre muerta con su esposo, por eso huí de Alemania por el asqueroso ser sin corazón de Adolf Hitler que por su culpa unos militares mataron a mi hermana con su hijo en brazos todo por estar casada con un hombre judío, antes de la guerra ese hombre era súper rico y ahora ya está muerto junto con mi hermana, sería por el bien de ambos que huyeran a un lugar seguro" el chico sacó lágrimas al contar esa historia y lo mejor sería que Jimin y Yoongi se fueran ese mismo día a Vancouver pero tendría que ir con ellos para arreglar papeles ya que tenía familia y contactos importantes en Canadá que le ayudarían con el trámite a ambos.

"Solo espero que todo esté bien"