Todo por ti (Alastor y tu)

Capítulo 7

Febrero de 2000

Narra Aradia:

Otro día más y no uno malo. Hoy iba a hacerlo, era el día. Hoy los alumnos de mi colegio iban a hacer una fiesta en honor a los carnavales y justo hoy era el día de San Valentín. Tenían pensado hacer una fiesta de disfraces para la ocasión y no podía desaprovechar esta oportunidad.

Al y yo acabamos de volver de una caza. Prepare la mesa para poner el cuerpo y deposite los distintos tipos de cuchillo al lado.

-¿Lo quieres así o te apetece cocinarlo?-le pregunte mientras quitaba la manta que tapaba el cuerpo.

-Voy a preparar un plato con él.

-Bien-cogí uno de los cuchillos para hacer un corte más profundo y conseguir lo que quedaba de sangre. Estaba muy mutilado y no se si podría aprovechar algo. Alastor me agarro de la mano parándome.

-No querida. La última vez me dejaste sin ninguna gota. Deja algo para los demás. La carne sin sangre no es nada.

-Bien- suspire-. Pero guardame algo- mire la hora en el reloj de pared-. Mierda, se me hace tarde.

Alastor me miro raro. Cierto, no le conte nada.

-Hoy voy a salir. Tengo una fiesta y me tengo que preparar.

-No sabía que tu fueras a fiestas.

-Para una vez que soy invitada. Además hoy es una ocasión especial.

-Soprendeme.

-Hoy me voy a declarar.

Escuche una interferencia de su parte. Lo había sorprendido. Me miro y ví un brillo en sus ojos.

-Así que vas a pasar de observarla mientras duerme a declararte completamente- eso me llamo la atención.

-¿Co-Como sabes eso? Espera... ¡¿Me has estado siguiendo?!- dije encarándole.

-¿Acaso lo dudabas? Te seguí en todas tus escapadas. Lo que no me esperaba es que te metieras en sus sueños.

-No te importa lo que yo haga con mi vida. Puedes ver lo que ocurre, pero no te pases- dije mostrándole los dientes.

-Nada más allá, querida. Por eso no debes preocuparte.

-No me vas a hacer caso ¿verdad?

-¡En efecto!

-No sabes cuanto te odio ahora mismo- las garras empezaron a salir. Relaje mi respiración y mis músculos provocando que desaparecieran. Alastor me agarro del mentón y me miro fijamente.

-Has hecho bien en calmarte. No queremos que esto acabe tan pronto.

-Vuelve a amenazarme y creeme que me dara igual lo fuerte que seas- no me aparte en ningún momento, ni retire la mirada. El se rió y me soltó. Disfrutaba que pudiera ponerme a su nivel, aunque había límites que ninguno debía pasar por respeto al otro-. Ahora no me molestes que tengo que prepararme.

-Podría darte un vestido de mi época si lo deseas- giro a mi alrededor.

-Gracias, pero no. No me gustan los vestidos. Y es una fiesta de disfraces asi que.

-Como quieras- pasó por mi espalda tarareando y recibí un golpe de su bastón en la nuca. Le mire enfadada y solo me sonrió para seguir con su comida.

-Idiota.

***

Después de unas horas y algo de ayuda de mis poderes había terminado el disfraz. Iría de pirata. Llevaba todo lo necesario, las botas, el traje de pirata y el pañuelo en la cabeza junto con el sombrero. Perfecto. Salí de la habitación y espere a ver la reacción de Alastor. Estaba fregando su plato, si que era ordenado. Y el lugar donde antes había un cadáver estaba completamente limpio. Como si nada hubiera pasado.