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En la oscura habitación solo se podían escuchar las respiraciones de una pareja de casados, un alfa que se encontraba durmiendo junto a lado de una omega que hace unos minutos se había despertado por las pesadillas que la carcomian, dio un giro para ver a su esposo. Observando cómo el alfa descansaba dentro de el oscuro y frío cuarto, se fijó en los rasgos tan elegantes y seductores que poseía su amado, soltó una sonrisa suave por recordar nuevamente que ese alfa frente a ella era su esposo... pero, esa curva en sus labios desapareció al recordar el como lo había conseguido.

"No importa el proceso tan solo el resultado" repitió en su mente dicha frase.

Suspiro desalentada, llevando su mirada al techo color carmín. Inevitablemente recuerdos sosos vieron a ella.

Donde se rencordaba casándose con Alastor, ese día estaba que regocijaba de euforia, sus ojos brillaban cual estrellas y su sonrisa podía ser comparada a la de un diamante, ningún otro omega podía competir con la belleza que resplandecía de ella.

La ceremonia fue tan mágica como lo había imaginado, esperaba que su luna de miel fuera igual o mejor pero no contó con lo que venía para esa noche.

Flash back:

Llegaron al hotel, se bajaron del carruaje, fueron a la recepción por la llave de su habitación, subieron en el ascensor, caminaron hasta el lugar designado, se encontraban frente a la puerta. Pero solo uno de los dos se sentía como la persona más afortunada del mundo.

— Realmente es hermoso! — halego con entusiasmo la omega mientras recorría la gran habitación — ¡Mira, incluso hay velas aromáticas! — expresaba emocionada dando vuelvas de felicidad al rededor de su mismo sitió, parando de golpe para luego acercarse a la cama en forma de corazón — Tal vez... ¿deberíamos empezar? — susurro con un sonrojo en el rostro sentándose en el centro de las sábanas, se notaba que estaba nerviosa pues había pasado mucho tiempo desde la última vez que lo hicieron.

Su último encuentro sexual fue en su celo cuando tuvo 16 años, el mismo celo en el que pudo quedar embarazada de su esposo, desde ese entonces no habían tenido relaciones sexuales pues Alastor había salido con la excusa de querer tenerla por completo y de manera correcta cuando llegara el momento, ese momento era hoy, hoy ya era su esposa ante la iglesia y la ley no había excusa que dar.... ¿verdad?

— ¡Oh! Querida, eso no ocurrirá — dijo con una enorme sonrisa sacándose su chaqueta colgando la en una de las sillas extrañas que había hay.

— Alastor... ¿A qué te refieres?— preguntó temerosa, su sonrisa se había desvanecido por completo.

— ¡Ja! Me parece, querida Charlotte, que deberías usar más esa cabecita que tienes — formulo dándose la vuelta quedando a un costado de la cama mirando por encima del hombro a la rubia para a continuación sentarse mirando fijamente a la chica  — Nuestro matrimonio no tiene valides alguna para mi, claro, eso ya lo deberías saber ¿no? — formulo con una gran sonrisa bien tallada en su rostro, observando como la cara de la chica era hace unos minutos de felicidad sin embargo ahora era una de confusión — ¡Oh! Charly, no me veas así.  Te recuerdo que todo esto es gracias a ti, disfrútalo cuanto puedas — tomando el rostro contrario con firmeza clavando sus uñas en las mejillas rosadas de la omega, esta emitiendo un quejido de dolor ante la raspadura — Feliz luna de miel — susurró de manera tan audible que incluso aterraba, soltando de golpe a la rubia empujándola a la cama mientras se levantaba y se dirija a la puerta de la habitación, saliendo de esta sin decir nada más.

"No Todo Puede Ser Tuyo" Alastor X Ángel (Omegaverse) RadioDustWhere stories live. Discover now