Sólo un par de palabras

Celos (MoGuanShan) (2)

NOTA: la parte dos me salió un poco rara cada que pensaba en como seguirla me salían diferentes escenarios en la cabeza, bueno espero que les guste y creo que haré una parte 3 donde todo sea más hogareño... no se disfruten!!!

Celos (MoGuanShan) (2)

-aun no es tarde Mo- la voz de Xixi se repitió una y otra vez en su cabeza.  Pero lo era, el tren en el que iba se detuvo en la estación las puertas se abrieron la gente salió, entró y las puertas se cerraron de nuevo. Todavía tenía tres estaciones más para pensar antes de llegar a su destino.  Miro por la ventana las luces de la ciudad nocturna pasaron rápidamente frente a sus ojos.

-Ya es tarde...- se murmuró desconsolado, la oportunidad de ser querido por Hetian se le había escurrido entre los dedos como agua. Tanto tiempo juntos, todas las maneras en las que el pelinegro le decía que lo quería.

Los recuerdos de sus primeros días viviendo con Hetian le llegaron como pequeñas dagas filosas.

-es casi como si fuéramos una pareja de recién casados viviendo juntos- dijo He con una sonrisa en los labios. Mo puso cara de asco.
-no lo somos- dijo indignado – solo somos amigos-
-pequeño Mo siempre hieres mi corazón- dijo dramáticamente el más alto.
-como si eso llegara a pasar- gruño el pelirrojo y siguió cocinando.
-bueno no me daré por vencido tan rápidamente- Mo se sonrojo.

Cerro lo ojos abrumado. Era demasiado tarde, Hetian por mucho tiempo había estado siguiéndolo cachando cada pedazo de amistad, de corazón que Mo le arrojaba de vez en cuando. Y aunque no tenía suficiente, aunque no podía vivir con eso lo aceptaba. Pero Hetian también tenía un límite ¿qué no?

Ahora lo entendía, él había sido un idiota con Hetian y aquel chico merecía a alguien que lo amará bien, no a escondidas y cobardemente como él lo hacía. Él se merecía a LeeXeng con su bonito cabello, su suave piel y sus dulces labios.

La ciudad frente a sus ojos se empezó a distorsionar, se volvió acuosa y triste. ¿Estaba lloviendo?
Efectivamente era agua, pero no caída del cielo. Se limpio las lágrimas con el dorso de la mano.

Salio de la estacion del metro, era otoño hacia frio, pero no estaba helando. Se acomodo la bufanda y camino. El camino hacia lo que antes puedo haber llamado hogar se le hizo eterno. Entró, adentro estaba cálido.
La luz de la sala estaba prendida. Dio dos pasos y ahí frente a sus ojos estaba Hetian, en una mano tenía una cerveza en la otra el control remoto de la televisión.

-GuanShan- dijo mirándolo, le sonrió pero no hubo felicidad, el corazón se le comprimió al pelirrojo, el sobrenombre que Hetian le había dado “pequeño Mo” era ahora un recuerdo grato, las ansias de que se lo dijera por última vez le carcomieron el alma. Aspiro aire era ahora o nunca.

-¿podemos hablar?- dijo el pelirrojo.

-claro...- Hetian se iba a sentar, pero Mo no se movió de su lugar por lo que se quedó parado.

-quiero...- Shan lo miro de reojo, no podía verlo de frente era doloroso- quiero pedirte...-trago saliva su voz le tembló al decir la última palabra. Sus sentimientos se revolvieron en su pecho, su corazón latía apresuradamente “que me abraces y nunca me dejes” pensó el pelirrojo. Suspiró captando todo el aire.

-quiero que me perdones...- Hetian abrió los ojos sorprendido.

-Mo...-

-no... déjame hablar- la voz le seguía temblando- quiero que me perdones por todo lo malo que te hice... y quiero agradecerte por haberme recibido en tu casa... y... solo quiero decir que...- un par de lágrimas se escaparon por la comisura de sus ojos- yo... yo te amo y lamento no haber dicho esto antes soy un egoísta lo sé, yo quiero que seas feliz, por eso me voy a mudar- Hetian se quedó de piedra, Shan se pasó las manos por el rostro intentando limpiar las lágrimas.

-yo...- levantó la vista detrás de Hetian en el marco de la puerta estaba LeeXeng mirándolo con tristeza, su corazón latió con más fuerza, un nudo se formó en su garganta – me tengo que ir- de dos pasos llego a la entrada y desapareció.

Hetian seguía inmóvil al centro de la linda sala. Su mirada se fijó en LeeXeng, quien ahora se encontraba a su lado sujetando su brazo.

-Xeng-

-Está bien, Tian yo lo sabía- el chico tenía la cabeza baja- cuando comenzamos a salir fuiste sincero conmigo sobre tus sentimientos y por eso no te odio. Sabía que esta relación no terminaría bien, solo quería intentarlo- Lee le sonrió y le dio un beso en la mejilla- gracias fue divertido, ¿ahora que esperas ve por él? - dijo el castaño y con una mano lo empujo –no te preocupes no estaré cuando regresen- y le sonrió.

GuanShan llego a la esquina y se quedó parado bajo la lámpara del alumbrado público. Respiraba rápidamente había corrido sin pensarlo. Saco el celular de entre sus ropas, le hablaría a Yi y a Zhan para pedirles posada en su casa.

-pequeño Mo- se giró asustado. Hetian estaba parado frente a él, se veía cansado de correr, pero tan hermoso como siempre.

-¿Hetian?-  el chico alto se acercó y coloco su mano derecha sobre la mejilla de Shan, acariciando la piel fría con su dedo pulgar.

-¿regresemos a casa pequeño Mo?-  GuanShan se alejó furioso.

-¿qué mierda haces? No voy a regresar a ver cómo te besuqueas con Xeng ¡idiota!-

Hetian sonrió.

-bueno comienzas a comportarte como siempre...- Hetian lo tomo de los antebrazos y lo jalo hasta envolverlo en un abrazo. -yo también te amo Mo, nunca he dejado de hacerlo-

El pelirrojo sintió fuegos artificiales brotar de su pecho, el enojo y la frustración desaparecieron y se abrazó con fuerza de Hetian. El alto se separó y se acercó peligrosamente a sus labios.

-¡bastardo! No lo harás- grito enfadado el pelirrojo tapando la boca de Hetian con ambas manos.

-pero quiero besarte-

-¿crees que dejaré que me beses después de que estuviste toda la tarde con el menso de LeeXeng?-

Hetian sonrió.

-¿acaso estas celoso Mo?-

-lo estoy, lo estado desde que llego a mi apartamento... así que solo dejaré que me beses después de que te bañes y te laves los dientes.

-está bien- musito el pelinegro sonrojado- entonces vamos a casa-

-bien- dijo GuanShan y dejo que el más alto lo abrazara una vez más.