Painted With Roses (Oreki x Chitanda) (Historia de opplayerv23)

Capítulo 22 - Adiós

Me mudo el próximo trimestre.

Tan pronto como Oreki oyó esa línea, se sintió un poco... sorprendido. El hecho de que Chitanda se estuviera moviendo fue, por alguna extraña razón, molestándolo ligeramente.

"Oreki-san... ¿Qué se supone que debo hacer?" preguntó Chitanda en un tono muy deprimido y estresado.

Suspirando, cerró su libro y la miró. "Negocio familiar, ¿verdad?"

Miró hacia arriba y vio su rostro sin expresión, aunque parcialmente serio. Parpadeó unas cuantas veces, e instantáneamente sus ojos violetas brillaron. "¿Cómo lo supiste, Oreki-san? ¡Tengo... curiosidad!"

Sucede mucho, contestó simplemente. 

"Ya veo... ¿Esto te pasó a ti también?" 

"Sólo una vez."

Entonces Oreki metió su mano en su bolsillo y sacó el llavero. Lo puso delante de Chitanda y sus ojos estaban llenos de vaga y asombro.

"¡Esto es muy lindo, Oreki-san!" El llavero de hámster colgaba alrededor de su dedo índice mientras lo admiraba y jugaba con él.

De repente, dejó de jugar con él y lo miró atentamente. Luego bajó la cabeza, su negro azabache bloqueando su cara e hizo ruidos de olfato.

"Oreki-san... gracias..." Chitanda murmuró con gran aprecio llenando su sollozante voz.

Mientras levantaba la cabeza, Oreki vio su rostro rojo y sus ojos llorando. Intentó contenerse de llorar, pero sus lágrimas se negaron a dejar de caerse.

"oye..." Su mano inesperadamente se acercó a ella, pero poco después la recuperó.

Mientras lloraba, Oreki se sentía un poco confundido. Por qué lloraba, se preguntó. Cruzando sus brazos, esperó a que Chitanda empezara a recuperar su ser normal. Pensó que era mejor dejarla hasta que terminara.

Lo siento, Oreki-san, murmuró por vergüenza. 

Sacudió ligeramente la cabeza. 

"Alguien... me dio este llavero... pero... pero-"

 ¿Esto? pensó Oreki.

Lágrimas una vez más comenzaron a gotear por sus mejillas, pero ella las limpió casi instantáneamente. "Pero... ella murió de una enfermedad. A mis padres no les gustaba exactamente, por sus padres, y cuando descubrieron mi relación con ella... Bueno, se llevaron el llavero y lo tiraron al río. No pude encontrarla, incluso después de encontrarla día a día. Así que... gracias, Oreki-san. Mi corazón ahora se siente más cálido.

"... no tengo nada que ver con tu amigo."

"¡Pero, Oreki-san! ¡Encontraste este llavero para mí! Y... tú también lo lavaste..." Ella lo miró con ojos tranquilizadores. "Así que... estoy muy agradecida."

"Chitanda, no lo-" 

Abruptamente, la puerta del club se abrió rápidamente. ¡Chii-chan! ¡Lo siento mucho por llegar tan tarde!, Ibara se disculpó y corrió hacia ella.

Fukube entró también, atrapando la vista del llavero rodeado por los dedos de Chitanda. Entonces alternó su vista a Oreki y le dio un pulgar hacia arriba.

Chitanda de repente se puso de pie y se enfrentó a los dos miembros del club recién llegados con ojos genuinos y arrepentidos. "Maya-chan... Fukube-san... Me gustaría que supieras que me mudo el próximo trimes-"