6. Otra oportunidad

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Emil y Sara no se habían ido de la pista, tan solo la mujer tomó el cambio de ropa para estar mejor en cuanto salieran, pero al parecer veía a su amigo bastante inquieto por hablar.

No podía culparlo, en estos momentos debe de estar también confuso e incluso molestó, tanto con ella como con… Su hermano.

Más con este último.

Siente la pequeña pesadumbre, estaba temerosa a lo que el menor pudiese decirle, el como se siente de eso, porque tampoco es que dio la mejor cara en cuanto le dijo que sabía la verdad de lo de antes del accidente. Tan solo ver que el rostro alegre no habituaba en él, ya había supuesto que nada andaba bien.

¿Fue Mickey quien dijo la verdad? ¿La angustia de su hermano habrá sido mayor como para llegar a revelarle todo?

Saliendo de los vestidores, se encontró a Emil sentado en una de las bancas, esperándola; Sus dedos se movían entre si, más los pulgares que reflejaban el gesto impaciente y frustrado que no evitaba transmitir.

Ella suspiró, dejó su bolso en un lado, y luego se sentó. A pesar de eso, todavía el rubio se tomó unos largos segundos para comenzar.

—Supongo que… Tú sabías.

Notó como él la miraba de reojo, quizás esperando que le respondiera con un asentimiento, el cual así hizo.

Abrió su boca, queriendo decir algo, pero nuevamente Emil tomó la palabra, con una voz dolida, haciendo una pregunta que ella no se esperaba.

—¿Se querían burlar de mi?

Sara lo miró con disgusto en tan solo pensarlo. Negó rápidamente.

—No, no… Jamás seríamos capaz de eso.

¿De verdad pensaba eso? Es decir, sabía que estuvo mal ocultarle las cosas, ella incluso estaba molesta consigo por hacerlo, pero conociendo a Emil, creyó que podría de alguna manera tratar de entender el porqué lo hicieron.

Aunque por otro lado, entendía que Emil podía estar llegando a sentirse sensible, es decir, es frustrante, no haber recordado nada y de puras solo la recordó a ella, más no a Mickey. Ahora, él lo sabe, sabe que le estuvieron cubriendo muchas cosas, así que se mordió la lengua en tan solo haber sentido frustración por las suposiciones que estaba teniendo su amigo

No debía, así que trato de mantener calma, y decir lo que tenía que decir.

—No lo hicimos Emil, nuestra intención no era esa. Nunca fue lastimarte… Tanto Mickey como yo, so-solo queríamos que no te atormentaras mucho con los recuerdos perdidos. —Sara mordió su labio, resistiendo soltar un sollozo— Más Mickey, que… Él tomó muchas decisiones equivocadas, te juzgo muchas veces, y… Bueno, seguro ya sabes lo que pasó la noche antes de tu accidente.

Él asintió, fue cubriendo su rostro con cierto cansancio, era demasiado para comenzar el día. 

La morena solo se acercó más al checo, tocando con sus manos la espalda ancha, que se encontraba encorvada en lo que Emil seguía meditando de a pocos la situación. Sabía que su mente podía estar en un desorden ahora.

Pero no es que ella estuviese mejor.

Se sentía mal, demasiado mal; debió hacer lo que creía mejor desde un principio. Tomar un rumbo diferente, actuar de diferente manera de lo que ella junto a su hermano planearon. Aunque no estaba en posición de recriminar a ambos, la culpa hacia ella misma era más intensa. 

Debió ayudarle a Mickey a pensar mejor las cosas, quizás debió involucrarse mejor en la situación de ambos, hacer de su presencia más de lo que había dado; Las mentiras no eran buenas, y en exceso eran peor. 

Como si fuera la primera vez - [EmilxMickey]Where stories live. Discover now