Anne y Gilbert [One-Shots]

•Cafetería•

Anne

El día empezaba normal como cualquier otro día en la cafetería. Hoy me tocaba abrir y cerrar a mi. No entiendo por qué el jefe insiste en no contratar a más empleados. Sofía y yo no podemos con tanto trabajo.
Lo único que agradezco es la paga, la verdad es muy buena como para trabajar sirviendo café.

Deje de lado mis pensamientos y en cuanto tuve todo el lugar limpio y listo para los clientes puse mi mejor  sonrisa y di vuelta el cartel a <<abierto>>.

Al principio solo llegaron adultos mayores vestidos de traje, era muy temprano para que llegaran los adolecentes. Mi jefe me explicó que a estos hombres hay que tratarlos muy bien, dejan una muy buen propina. Una vez uno me dejó hasta cincuenta dólares.

-Hola, Anne. Buenos días -le saludo Sofía. Mi compañera de trabajo. Auque no sea muy alegre en las mañanas hoy si lo estaba.

-Hola Sof. ¿cómo estás? -pregunte mientras preparaba un café para llevar.

-Muy bien -en mi cara se formó una gran sonrisa al verla feliz. En las mañanas siempre fingía una sonrisa, parece que hoy se levantó con el pie derecho.- luego te cuento. Voy a ponerme el delantal. -dijo y entró a la pequeña bodega.

Yo terminé de preparar el café con algunas medialunas y se lo di a un joven. El me agradeció y se fue.

En cuánto vuelvo a girar mi vista hacia la puerta, entra un chico con una rubia. Él es bastante atractivo, no voy a mentir. Ambos se ven elegantes. Supuse que también dejarían buena propina asique me acerque hacia ellos.

-Hola, buenos días. ¿En qué les puedo servir? -me pare a un lado de su mesa con mi pequeña libreta y una sonrisa cálida.

-Café -respondió fría, la rubia. Era muy linda pero su actitud opacaba tuda su belleza. Estaba acostumbrada a tratar con clientes así pero hice una sonrisa amarga y giré mi vista hacia el chico. Wow si que es hermoso, y aún más de cerca.

-¿Café solo o co..? -me interrumpió la rubia.

-Café, solo café. ¿Es una cafetería o no? -me pregunto viéndome fijamente con unos ojos entre grises y azules.

-Lo mismo, por favor -pidio con una sonrisa nerviosa. El si parece educado, nada que ver con su acompañante.

-¿Algo mas? -pregunte algo embobada pero volviendo la realidad.

-Ya pedimos lo que queríamos, ya puedes irte. -hizo una seña para que me fuera. ¿A esta que le pasa? Abrí mi boca indignada pero respiré hondo y me fui.

-¿Que te pasa, Winifred? Tienes que ser más amable -<<asique la rubiesita sin modales se llama Winifred>> pensé.

-Puedes llevarles esto a los de aquella mesa.- señale discretamente. -La rubia tiene malos modales y no quiero hablar de más -le tendí la bandeja a Sofía para que la lleve.

-Lo siento pero estoy atendiendo a aquel chico que es muy lindo y no lo quiero perder.- señalo a un chico de pelo castaño, y si, era lindo -Tranquila, es solo una chica, ya se va a ir. Inhala y exhala. -Sofia no me dio tiempo a responder y a regañadientes lleve la bandeja la mesa.

-Aquí está lo que pidieron -deje los cafés en la mesa -si necesitan algo más pue..-la rubia me callo con la mano.

-No necesitamos nada más, descuida. No te llamaremos. -dijo y me comencé a molestar. ¿Con qué derecho me trata asi?.

-Lo siento. Winifred no suele ser maleducada.- dijo el chico que estaba a un lado mío y como por arte de magia logré tranquilizarme.- Y gracias...-busco en mi delantal por si tenia una etiqueta con mi nombre pero como no lo tenia..

-Anne, Anne con una e -le tendí mi mano con una sonrisa.

-Gilbert Blythe -tomo mi mano y la beso. La rubia que al parecer era su cita lo miró indignada y hasta enojada. Rei internamente por su expresión. Yo claramente estaba roja, era todo un caballero el señor Blythe.

Rei nerviosa -tengo que ir a atender. -señale el mostrador en donde estaba Sofía con una gran fila.

-¿Cuando termina tu turno? ¿Puedo hablar contigo después? -me preguntó sorprendiendome.

-Eh, claro. Termino a las ocho y media. -respondi algo sonrojada y con una sonrisa nerviosa.

-Ok. Vendré. -me sonrió, dejó dinero en la mesa y se fue con su café.

-Ni se te ocurra -me señaló enfadada la tal Winifred y se paró de la mesa. Yo la saludé con mi mano y una cara angelical mientras ella trataba de seguir a Gilbert.

-despues de todo no te fue tan mal eh -me sonrió pícara Sofía.

-Gracias por no ayudarme -le sonreí falsamente, aún estaba un poco acalorada.

-De nada -respondio y reímos.

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Fin

Es corto, lo sé, pero no las quería dejar sin un one shot.
Trate de publicar la sorpresa de Gilbert para Anne pero el 8 fue mi cumpleaños y el 9 el de mi hermanita, asique deben imaginarse lo ocupada que estuve jaja.

También quería agradecerles por las 20k de vistas!! Enserio no me la esperaba, GRACIASS❤😘

Las quiero. Gracias por el apoyo 💕

-Bel🦋