Especial de Navidad ^-^

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Holaaaaa primero que todo quiero agradecer a todas mis lectoras que me han estado apoyando, dejando sus votos y comentarios >w<

Llegamos a los 1K *------* Muchas gracias a todas!! las amooo <3 <3 <3

Bueno sin más preambulos les dejo este especial hecho con cariño :3

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Ya casi era Navidad, época del año en que la gente se vuelve prácticamente loca comprando regalos (endeudándose de paso), que la cena, que esto que lo otro, etc. aunque a pesar de todo lo anteriormente mencionado, la gente suele ponerse muy feliz con estas fechas, sobre todo los niños pequeños. Pero para Maya la cosa era muy distinta, no entendía cual era el propósito de la navidad y era lógico, nunca había tenido una, no con la familia con la cual le había tocado vivir antes de conocer a Sebastián, por lo que se encontraba un poco decaída. El mencionado anteriormente se percató rapidamente del cambio de humor de Maya, así que decidió hablar con ella.

-Maya-dijo llamándola

-¿Eh?-gira la cabeza-¿Sucede algo?-preguntó

-Esa es mi línea, ¿qué te sucede? te noto decaída-dijo con clara preocupación

-Ah... bueno... es solo que no me gusta esta época, es todo-dijo desviando la mirada con tristeza

Sebastián la observó sin decir nada, sabía perfectamente el por qué no le gustaba esa época, no había necesidad ni de preguntar la razón de por qué estaba así, ya que desde el momento que dijo eso, recordó a la familia de Maya, si es que así se le puede llamar. La miró por unos instantes y luego se acercó y se sentó junto a ella en el sofá.

-¿No quieres hablar de ello?-dijo tomando su mano

-Es... difícil para mi hablar de esto-dijo apenada mientras agachaba la mirada

-Lo sé, pero puedes desahogarte-dijo mientras la tomaba de la barbilla para que lo mirara

Tenía razón. De nada servía seguir reprimiendo esas malas experiencias si tenía a alguien que estaba dispuesto apoyarla en todo momento. Maya sonrió, no podía ocultar lo feliz que se sentía al estar con él, a pesar de las circunstancias de esas fechas tan difíciles para ella.

-Está bien... te contaré mis... experiencias-dijo tratando de no equivocarse en las palabras

-Te escucho

-Bien... Una de las tantas, fue cuando tenía 5 años, si mal no recuerdo, mis padres habían salido y tuvieron que llevarme con ellos, creo que fuimos al centro comercial, cuando volvimos una vecina de avanzada edad se acercó a mí y me dio un osito de peluche, me sentí muy feliz cuando me lo entrego, ya que nunca había recibido algo así de mis padres, estaba tan concentrada admirando el regalo, que no noté cuando mi madre se acercó y dijo:

-¡¿Qué te sucede por qué no entras de una vez?!

-Y-yo... y-yo solo...-trataba de decir mientras temblaba

-Cassandra, déjala en paz, ella no tiene la culpa-dijo la señora Joanna

-Usted no hable vieja chismosa!-gritó enfadada

-Por supuesto que hablo, mira que tratar así a una pequeña de 5 años ¿Es que acaso no te da vergüenza?-sentenció

-¡No venga a decirme como tratar a esta niña! ¡La trato como se me da la gana le guste o no!-gritó más fuerte todavía, mientras me tomaba bruscamente del brazo

-A-ay!, ma-mamá, m-me lastimas-intentaba decir

-¡Silencio! Entra de una vez!-gritó de nuevo, no tuve más opción y así lo hice-Dame eso!-me quitó el peluche de las manos

Solo eres túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora