Between us (YoonMin)

Capítulo II

"En otras noticias, se busca cerrar el caso del joven Jeong In, los especialistas indican que todo apunta a ser un caso más de suicidio, se espera que-

Jimin no pudo evitarlo y sin pensarlo dos veces, apagó el televisor de la sala.

—¿Qué te pasa? Yo la estaba viendo —se quejó su hermana menor de a penas trece años.

—No te pierdes de nada, las noticias solo están llenas de mentiras. La policía ni siquiera hace bien su trabajo —afirmó el castaño.

Un incómodo silencio se hizo presente pues a un lado de aquella espaciosa sala se encontraba su padre colocándose uma corbata para ir al trabajo.

—¿Qué habíamos dicho Jimin? —Cuestionó su madre.

—¿Es así como lo miras? ¿Seguirás con esa actitud? —Con una mirada penetrante y serio, su padre lo observó molesto.

—¿Qué más puedo decir padre?

—¡Suficiente! —gritó molesto y Jimin caminó hacia su habitación—. ¡Regresa!

De brazos cruzados, su hijo mayor lo observó con seriedad.

—¿Crees que es una tarea fácil ser el jefe del departamento? ¡Ser policía es un trabajo difícil! Todo esto lo hago por ustedes.

—Lo sé padre, pero... ¿Es tan difícil investigar el caso de Jeong In? A parte, te he dicho que quiero entrar al departamento de policías.

—¿Sigues con esa idea? Habíamos aclarado que el próximo año tomarías el examen de admisión a la universidad, me haré cargo de todos los gastos.

—Cambié de planes, hace poco tomé el curso y entregué mi solicitud en la estación.

—¿Qué? ¿Cuándo ocurrió eso? —El hombre impresionado dirigió la mirada a su esposa—. ¿Sabías de esto? —La mujer apenada asintió.

—Nuestro Jimin de verdad se veía muy entusiasmado por entrar.

—¿Entonces es así como quieres que sean las cosas? Pues perfecto, Jimin. Revisaré tu solicitud, así sabrás lo difícil que es el trabajo que tanto subestimas.

—Así me daré cuenta de todos los fallos que hay, y yo seré quién verdaderamente hará un cambio.

El hombre entrecerró los ojos y pensó que la determinación de su hijo podría ser una ventaja, pero si seguía con esa actitud no le iría muy bien.

—Bien, me retiro al trabajo familia, los quiero. —Dirigió su mirada a Jimin y este solo asintió.

Jimin desde pequeño siempre ha sido una persona con mucha determinación, pero su sentimentalismo y el involucrar sus emociones en situaciones que no lo ameritan siempre ha sido su mayor problema.

Decidió salir a correr un rato a un parque cercano, necesitaba gastar toda esa energía y despejar su mente, a parte, ahora que comenzaría su vida como policía amerita más condición física.

Mientras tanto su padre en aquella oficina llena de papeles y más papeles, encontró finalmente la solicitud de su hijo, esta curiosamente había sido aceptada, pasó todas las pruebas con buenos puntajes.

La duda aún estaba en su mente, pero su hijo poco a poco se convertía en un hombre, tenía que aceptarlo.
Por ello cree que merece una oportunidad y será una manera de que Jimin crezca como persona.

Decidido tomó el teléfono y marcó a uno de los policías más jóvenes pero con mayor potencial y experiencia, Min YoonGi.

Desde que tiene memoria, siempre ha sido un chico educado y responsable, aunque a veces pueda parecer que tiene un mal temperamento, siempre razona todas las situaciones y es minucioso hasta con el más mínimo detalle, por lo que repetidas veces se le ha otorgado la oportunidad de participar con el equipo de investigación.

—Buenas tardes, Min YoonGi.

—Buenas tardes, señor.

—He estado revisando varias solicitudes, espero que puedas hacerte cargo de esta situación, mañana mismo ya no patrullarás solo, tendrás compañía. Espero que logres dirigirlo bien y enseñarle todo lo que sabes muchacho.

YoonGi estaba sorprendido, ¿En verdad tanta confianza le tenía el jefe como para otorgarle tal deber? estaba halagado.

—Claro señor, haré mi trabajo lo mejor posible.

El señor Park llegó agotado a su hogar a altas horas de la noche como lo es de costumbre, observó a su preciada familia quienes lo esperaban para finalmente cenar todos juntos.

—¡Papá! —gritó su joven hija con emoción y este le dio un beso en la frente.

Cada quién tomó su lugar, repentinamente el hombre se levantó de su silla y regresó con algo en manos, la esposa e hijos confundidos se miraron entre sí.

—Esto es para ti, hijo —estiró su brazo para darle una placa.

—Gracias, padre.

—Espero que hagas un buen trabajo, hazlo por nosotros, esperamos mucho de ti.
Ya hablé con Min YoonGi, será tu compañero de ahora en adelante, comenzarás mañana mismo.

—¡¿Mañana?! —Jimin abrió sus ojos con sorpresa.

—Cuanto antes, mejor, ¿no estabas muy entusiasmado por trabajar? —cuestionó con un tono burlón y nuevamente se sentó para terminar su cena.