Between us (YoonMin)

Capítulo V

Jimin se la pasó mejor de lo que imaginó la noche anterior, YoonGi había sido muy amable y considerado con él, incluso insistió en pagar la cena y no se pudo resistir.
Era grato saber que su compañero de trabajo sea un hombre tan caballeroso, inteligente y considerado, era prácticamente un sueño, estaba seguro de que podían ser buenos amigos.

Pero ahora se encontraba portando un elegante traje, su madre se encargó de que la señora Miyeon planchara hasta la más mínima arruga, esta cena era sumamente importante para su esposo pues el señor Jeon es nada más y nada menos que el candidato más aclamado a ser gobernador, una persona con mucho poder que definitivamente podría llevar a un mejor rumbo la vida laboral de su marido.

-¿Ya estás listo, amor? -cuestionó su madre desde el otro lado de la puerta.

-Sí, no me tardo -tomó su celular y peinó su cabello.

A Jimin realmente no le importaba tanto esta cena, pero igual quería dar una buena impresión por su madre, siempre era muy considerada con su padre y hermana, incluso con él, y sabe que solo quiere el bienestar de la familia.
Igualmente, el nerviosismo no era parte de él esta noche, incontables veces ha ido a la mansión de Jungkook, ha sido como otra casa para él, aunque debe admitir que el señor Jeon lo ponía un poco nervioso, un hombre tan egocéntrico, territorial y con tanto poder no congeniaba con su estilo.
De todas maneras siempre ha sido amable con su familia, y cómo no si su padre ha sido la mano derecha del mismo.

Con serenidad bajó las escaleras hasta llegar al auto, su hermana ya se encontraba sentada en el lado izquierdo del carro con audífonos y rostro de muerte, en fin, estaba en la adolescencia y no quería ir a esa cena, no es buena combinación.

Observó la estrellada noche, por alguna razón el hecho de que la noche sea muy linda le subió un poco el ánimo, tenía tiempo sin ver el cielo tan iluminado desde que la ciudad se comenzó a poblar más, hasta pensaba que algún día no habría día en el que pudiera salir sin mascarilla pues la contaminación había aumentado notoriamente, pero en fin, tenía que enfocarse en lo positivo.

Recorrieron un largo camino de unos cuarenta minutos, tuvo tiempo para seguir reflexionando la situación de su amigo fallecido y la manera en la que podría llegar a lograr algo, aunque no tuviera un sospechoso aún, estaba seguro de que a este paso podría ir acercándose poco a poco.

-Llegamos, -habló su padre quitándose el cinturón de seguridad- por favor saluda, Hyeri -le habló a su hija que seguía con un rostro molesto, esta rodó los ojos y asintió.

La familia fue muy bien recibida, el señor Jeon saludó a cada intengrante hasta llegar al padre de Jimin, su fiel colega.

-Buenas noches, me alegra que todos hayan venido -sonrió y abrazó al padre de Jimin.

El señor Jeon definitivamente tenía una apariencia agradable, un hombre atractivo pese a su edad, sonrisa resplandeciente y un porte que no cualquier hombre tiene, definitivamente lucia como esos políticos de comercial que con una sonrisa le dan esperanza a medio país. Es ese tipo de hombres que podría venderle lo que sea a alguien sin ser cuestionado, por algo Jungkook también era muy aclamado por su apariencia, al parecer es genética.
Jimin todavía recuerda esos recesos en la secundaria en donde las chicas animaban a Jungkook hasta por estar en la banca durante los partidos de baloncesto, era la viva imagen de su padre, aunque a diferencia de él, este no era hipócrita.

La familia Park tomó asiento, su comedor era gigante, Jimin casi podía ver su reflejo en aquella brillante mesa de cristal, sabía que su casa siempre estaba impecable pero esta vez de verdad parecía ser una situación especial, se preguntaba qué tramaba el hombre.

-Me alegra que nos hayan invitado a cenar, Jeon, hacía rato que no nos reuníamos todos en familia -habló Park Jaemin, padre de Jimin.

-Y a nosotros nos alegra que aceptaran nuestra invitación, hoy no es como cualquier día, verán, la postulación va con excelencia, a este paso no dudo que ganemos las elecciones. Te debo mucho, Jaemin.

-Me da demasiado gusto, sabes que puedes contar conmigo, tu reputación es impecable y has sabido ganarte tu lugar, lo tienes bien merecido.

-Hablando de eso... -la madre de Jin mostró la bolsa de regalo y la señora Jeon colocó su mano derecha en su rostro cubriendo una sonrisa.

-De verdad no debiste -sonrió tomando la bolsa al mirar que la madre de Jimin extendió su brazo con esta -mira amor, justo uno de tus favoritos - la mujer sacó la botella y se la dio a su marido, el señor Jeon agradeció con una sonrisa y una leve reverencia.

Los primeros minutos fueron aburridos, solo charlas de política, que aunque Jimin estuviera interesado en esta rama, ellos se basaban en cosas que no eran de tanto interés.
Permanecía curioso pues Jungkook aún no se presentaba, se preguntaba por qué la demora.

La cena fue servida, una variedad de comida que le hasta le pareció exagerada al castaño, estaba acostumbrado a este tipo de cenas pero de verdad... ¿era tan necesario tal cantidad de comida? Jungkook ni siquiera llegaba aún, solo eran él, su hermana, y aquellos adultos.

No se dio cuenta de cómo ocurrió, pero repentinamente la conversación dio rumbo a la inseguridad que era creciente en la ciudad y no pudo contenerse.

-Definitivamente hará un buen trabajo señor Jeon, espero que cuando ocupe su cargo haga algo con la policía, no sé si se enteró pero... un fiel amigo fue asesinado hace poco y las autoridades tuvieron el descaro para decir que se suicidó.

La madre de Jimin lo miró molesta y su padre sin duda alguna se giró con aquella penetrante mirada para observarlo.

-Jimin no aún no sabe sobrellevar la situación, lamento este tipo de comentarios Jeon -Jinin no podía creerlo, le daba tan poca importancia al asunto.

A diferencia de Jaemin, el señor Jeon lo miró con interés comprendiendo su enojo.

-No, no te disculpes, entiendo perfectamente a Jimin, tiene mucha razón. No te juzgo Jaemin, pero tiene razón, y créanme que haré lo posible por investigar el tema, Jungkook no podía ni comer, no salió de su cuarto en dos días.

-Gracias señor Jeon- terminaría su frase pero se vio interrumpida por alguien más.

-Buenas noches -aquella voz la conocía perfectamente, era Jungkook.

El joven saludó a los padres de Jimin, al ver a su amigo sonrió, aunque guardando distancia pues su padre se encontraba ahí y no se sentía cómodo actuando con la extroversión que usualmente lo caracteriza.

Lo que sorprendió a los demás fue que seguido de esto, una joven chica se hizo presente haciendo una leve reverencia frente a todos.

-Buenas noches.

Todos respondieron ante el saludo.

-Es una pena que hayan llegado tarde -comentó el señor Jeon- seguro se estarán preguntando qué hace en la cena familiar bueno, Jungkook les explicará.

-Lamento nuestra tardanza, nos retrasamos, pero no volverá a suceder. Se supone que llegaríamos temprano para dar la noticia como se debe -ambos pasaron a sentarse, quedando justo frente a Jimin y su hermana, Hyeri- ella es mi prometida, les presento a Soojin, próximamente formará parte de la familia, espero y se lleven bien.

El señor y la señora Park se sorprendieron, pero no pudieron evitar sonreír ante la noticiaz una joven y atractiva pareja siempre es aclamada y bendecida por todos.

La pálida chica de ojos grandes se notaba un poco nerviosa al recibir la atención de todos en la mesa, colocó su ondulado cabello detrás de sus orejas y se atrevió a hablar.

-Mucho gusto, soy Soojin y espero tengamos una buena relación -sonrío tímida.

Jimin no podía creerlo, colocó su mirada en Jungkook y este sonrió, ¿estaba soñando?