Impresión

766 83 26
                                    

Lucia
Estoy comenzando a desesperarme. Esto en verdad es una tortura por que todo lo que tenemos para observar es la oscuridad o la charca, la cual no se a vuelto a iluminar cuando nos muestra algo desde hace ¿minutos, horas, días?, no lo se, no estamos cien por ciento seguras de como pasa el tiempo en donde sea que estemos, nunca pensé que extrañaría los sonidos de unas simples aves, los ladridos de Shazta o inclusive los cláxones de los autos. También extraño no poder confeccionar, salir a pasear e ir por un simple café y extraño mucho la comida de Val, aun que no he tenido hambre en todo este tiempo que llevamos aquí en la oscuridad y creo que Mia tampoco por que usualmente tanto ella como Sara son comedoras compulsivas y siempre tienen hambre y desde que esta aquí ni siquiera a mencionado que tiene hambre.

No entiendo como es posible extrañar algo que ya has visto por muchos años y que antes se te había tedioso y muy cotidiano pero estando aquí me di cuenta que ahí lugares peores pero sobretodo a Stefan, el tan poco tiempo me a hecho tal feliz y esa felicidad proviene de los momentos que hemos tenido, como cuando me hace reír y me divierte a mas no poder, de los paseos que tuvimos donde no era necesario decir nada por que estábamos muy cómodos el uno con el otro sin la necesidad de tener que hablar de algo, incluso los momentos tristes y melancólicos con el los recuerdo con mucho afecto por que estábamos juntos y estuvimos cuando el otro mas nos necesitaba.

-No puedo seguir mas tiempo aquí- digo frustrada en mi lugar sentada en el piso con las piernas extendidas y la cabeza hacia tras mirando hacia arriba- Quiero salir, ya.

-Yo igual- enderezo mi cabeza y miro que ella esta caminando de una lado a otro mientras se muerde las uñas de los dedos- Quiero volver para capturar a Thomas Velasco y hacerlo sufrir hasta que su cuerpo y mente ya no den mas por todo lo que nos hizo, para empezar el que estemos aquí tu y yo.

-Si, bueno creo que esta es la parte donde te digo que estas siendo muy vengativa y que debes controlarte un poco pero francamente yo estoy igual que tu así que, yo te ayudare a torturarlo cuando llegue el día- digo sin mucho interés y sin ganas de ser la razonable hoy

-Sabes estoy tan molesta tanto con los Noctis como con los chicos por habernos metido en este mundo que esta de cabeza- replica mi hermanita mientras mira fijamente la charca de el suelo con molestia en su cara que se refleja en cada una de sus facciones- ¡Odio la situación, las peleas, la sangre que corre por nuestras venas y sobretodo mi vida!- espeta exasperada mientras le da una patada a la charca provocando que el agua salga volando por los aires.

-Lo se pero no digas esas cosas de ti, mucho menos de tu vida por que...

-¿¡Por que no!?- pregunta elevando la voz- Oh vamos me vas decir que ¿mi vida es muy buena y que aun me falta mucho por hacer y vivir?, tal vez no quiero eso por que la vida solo me a dado paliza tras paliza durante toda mi existencia, no tengo padre, mi madre murió, siempre he sufrido de bulling y humillaciones y sinceramente ya estoy cansada-su voz se vuelve ronca conforme va hablando y de estar gritando se pasa a hablar en susurros- Como para que ahora tenga que lidiar con una guerra donde muchas personas morirán y aun que algunas de esas personas son horribles yo no quiero ser como ellas llenando mis manos con su sangre- termina de hablar y se cruza de brazos mientras se los frota reconfortándose, me levanto y voy hacia ella pero antes de llegar siento como mi pierna izquierda se hunde para que después mi otra pierna también se hunda, al parecer pise la charca y esta me esta jalando hacia abajo, logro sostenerme de el borde y uso mi fuerza para no caer, pensé que el agua me haría más pesada al caer pero no tengo ni una sola gota de agua encima ni siquiera tuve que aguantar la respiración, veo abajo y solo puedo ver nubes y el azul de lo que creo es el cielo, siento como todo mi peso juega en mi contra y lo que sea que este en la charca me hacen mas pesada. Intento subir aplicando fuerza a mis brazos, poco a poco logro poner mis brazos en el borde para sostenerme. Mía se arrodilla para ayudarme, jalando me de la mano y por la parte trasera de mi torso mientras con la otra mano me sigo sosteniendo para hacer palanca, mi cuerpo se está cansando y estoy perdiendo agarre. Me  sostengo por unos instantes más pero mi fuerza se empieza a desvanecer y me suelto de agarre a la orilla pero Mia no me suelta para nada aún que la mitad de su cuerpo ya está dentro de la charca junto conmigo, la mitad de su cuerpo superior está dentro soportandome y su mitad inferior está en la superficie sirviendo le de ancla pero el peso de ambas empieza a ser demasiado para ella. Subo la vista para verla y ella está mirándome igual pero de repente veo como abre sus ojos a más no poder mientras mira algo debajo de mí, agachó la vista y veo que en lugar de el cielo que ví, ahora hay unas luces con todo tipo de tonalidades verdes al igual que unas de color azul celeste, blanco y otros tipos de azúl, de pronto siento un jalón por dónde me está jalando Mia y escucho algo desgarrarse y entonces caigo y lo último que logro ver antes de ver solo el blanco de el vacío es a Mía gritándome, hasta que ya no logro verla.

Mía
-¡¡LUCIA!!-grito de desesperación al verla caer, vuelvo a gritar por qué  no me salvó de caer justo después de mi hermana. Mis ojos no se enfocan mientras caigo y la caída no ayuda, siento que caigo desde más mil metros desde el aire, eso provoca que me desmayé.

Lucia
Caigo, caigo y sigo cayendo más, pareciera que no tuviera fin donde sea que me llevo la charca, estoy así por un largo rato hasta que escucho algo, es como el sonido de mil abanicos en el aire mientras pasan atraves de el aire. Siento que algo grande y rápido pasá a mi lado y me golpea en las costillas mientras estoy en el aire, la que sea que fuera logro voltear y ahora estoy boca abajo lo que tal vez me facilita un poco el ver lo que es, volteo a todos lados para ver de qué se trata pero no logro ver a nadie. Entonces siento algo afilado acuchillando me los hombros, dejo de caer por lo que sea que me sostiene pero eso no es un gran alivio para mí por qué mis hombros me matan por el dolor de lo que sea que me está sujetando, trato de liberarme moviendo me como puedo pero es fuerte, alzó la vista hasta mis hombros y veo que son unas garras enormes que abarcan por completo mis dos hombros. Se me ocurre algo para que me suelte aún que puede o no funcionar pero no me quedan alternativas por qué no sé que es lo que quiera conmigo esta cosa así que me agarró de las garras con mis manos para impulsar me hacía arriba y que mi cara quedé a la distancia de las garras, cuando estoy cerca abro la boca y muerdo una de ellas con todas mis fuerzas. La cosa suelta un gran chillido como el de una sirena pero más agudo y me deja ir, preferible caer que dejar que me coman pero mi victoria no duró mucho por qué me vuelven a tomar pero ahora por una de mis piernas, grito por el jalón que resivo, la impresión y el susto, no me dolió está vez por qué sus agarras no se me clavaron ya que me sujeto alrededor de la pierna; empieza a dirigirse a quien sabe dónde pero yo trato de llegar hasta mi pierna para que me suelte pero antes de lograr algo siento como mi cabeza choca contra algo tan duro que me noquea por completo.

Mia
Al despertar siento que el aire me da directamente en la cara y en toda parte de mi cuerpo, abro los ojos y al parecer aún sigo callendo, mis ojos no enfocan bien por la velocidad a la que caigo además de que el aire me lo impide, poco a poco voy enfocando mi vista y noto algo. El color verde está por todas partes además de el marrón, eso me hace reaccionar por significa que estoy cerca de el suelo, el pánico se apodera de mí y grito un poco antes de que mi cuerpo se impacta contra algo sólido, una y otra vez, es duro pero suave y áspero. Mientras caía cada vez que mi cuerpo impactaba contra algo mi cuerpo se movió de un lado a otro hasta que al fin deje de caer para aterrizar de espaldas en la tierra.

El impacto fue fuerte por qué me aturde, lo que causa que aunque tenga los ojos abiertos vea borroso. No solo mi cabeza duele, mis costillas también duelen al igual que mis brazos y piernas incluso creo que me duelen hasta las uñas de los pies. Mi vista se nubla y se distorsiona cada vez más provocando que quiera cerrar mis ojos, antes de cerrarlos noto que es un bosque en dónde caí. Mi vista logra enfocar de repente a una sombra que está sobre mi, no distingo muy bien si es humano o animal, parpadeó un par de veces y ya no la veo pero siento algo haciendo presión alrededor de mis tobillos, eso provoca que me queje y gima por el dolor, la sombra o quién sea que sea me está jalando, me arrastra mientras yo aún sigo en el suelo, antes de cerrar los ojos puedo ver el cielo claro y azul sobre mí y los árboles a mi alrededor, esa es la última imagen que visualizo antes de cerrar los ojos.

El Camino hacia NaturaeWhere stories live. Discover now