39 - Harry y Ginny

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- Tampoco has madrugado tanto para estar medio dormida en la boda de tu propio primo - susurra George mientras entramos tomados de la mano.

Tal y como lo hacen Luna y Neville, y Hermione y Ron delante de nosotros.

- Sí lo hice, a las cinco de la mañana ya estaba arriba. Que pereza. Tú no has tenido que venir a revisar a Ginny, Harry, la boda, las damas, las decoraciones, no sé, todo.

- Yo vine con Fred - me sonríe.

- Quiero pegarte.

- No puedo, me amas.

- Ser mejores amigos no ayuda.

- Ea - se encoge de hombros.

Llegamos al altar y él se va a su sitio cambiándole el puesto a Fred.

Ruedo los ojos.

Cuando termina la ceremonia, tenemos que volver con las parejas, con los que hemos venido, Fred se acerca a mí, pero entonces George lo empuja y me toma la mano.

- ¿Has terminado ya de madurar? - pregunto.

- Fred seguro te da un beso.

- ¿Y tú cuántos me vas a dar?

- Los que quieras mi amor - me guiña el ojo pícaro.

- Yo también te quiero. - suspiro.

- ¿Me vas a besar?

- Los besos me los ibas a dar tú cariño.

Me besa la mejilla y seguimos por la alfombra roja hasta la salida.

Charlie nos tira arroz, pero entonces George dice - Soy Fred estúpido.

- Angelina, no te enfades.

Angelina lo mira como si estuviera loco, entonces toma el arroz y nos lo tira.

- ¡Es Fred! - se queja Bill

- Lo vendo muy rápido - bromea ella seria.

- No, y nosotros - concuerda Percy.

- ¡Gracias! - Fred levanta los brazos indignado.

- Sé que no eras tú estúpido, ven aquí - lo toma de la cintura y lo besa.

- ¡Vivan los novios! - celebran George, Charlie, y Percy.

Bill me mira y me encojo de hombros.

- No entiendo nada - digo acercándome a él para tomar a mi sobrina en brazos.

George pone su brazo sobre mis hombros.

- Parecéis novios de verdad - Bill se mete con nosotros. Somos inmunes.

- ¿Verdad? Le falta que le diga novia - George le guiña el ojo divertido.

- ¡Salen los novios! - exclamo al verlos.

Victoria y yo lanzamos arroz con sus manitas pequeñas.

- Así, como tito George. - le digo a la pequeña.

George lanza arroz y besa el moflete de la pequeña rubia. - Te queda bien.

- Ya empezamos - murmuro.

- Fíjate, qué rápido crecen - me recuerda Charlie - Era una bebita y ahora, casada.

- Gracias por el recordatorio - bufa George.

- Bueno, Vicky, ¿tienes ganas de bailar? - la rubia asiente.

Tomo su manita y hago como que bailamos. Ella se ríe.

My Last Hope. George Weasley y túМесто, где живут истории. Откройте их для себя