My Last Hope. George Weasley y tú

40 - Cartas y perdón.

- Otra carta - Alberforth la deja en la pila de cartas con el nombre de George Weasley y se larga.

Pero esto ya es diferente.

Ya no volveré.

Porque no pienso dejar a mi bebé fuera de esto.

Miro de nuevo mi prueba de embarazo que hice hace un par de semanas, y rompo a llorar.

Positivo.

Él ha intentado recuperarme, pero le es imposible. Me ha hecho mucho daño, y llevaba ya tres oportunidades.

Volví con Alberforth enseguida, y trabajé horas extras en San Mugo.

Ya han pasado unos seis meses.

Y no puedo contar todo.

Sólo lo sabe Harry, Ginny, Fred seguramente por George, Angelina seguramente por Fred, Charlie y Molly.

Molly es la única que sabe de mi embarazo, a parte de Alberforth.

Viene muchas veces al trabajo a ocuparse de que coma y haga mis necesidades.

Me limpio las lágrimas, me cambio y salgo.

- ¿Por qué no las tiras? No las vas a leer.

- ¿Cómo lo sabes? ¿Y si sí lo hago?

- No lo harás. No eres tonta. Al menos, no tanto.

- Ya veré. He de irme a la ecografía con Molly. Es la primera que me hacen.

- ¿Emocionada?

- ¡Sí!

- ¿Y el bebé?

- Da pataditas desde temprano.

- Sólo, ten cuidado - Alberforth me besa la frente antes de irme.

Molly está en la sala de espera de San Mugo hablando con Angelina.

La última vez que la vi fue en la boda de Alicia y Lee. George y yo ni nos miramos, pero nadie se dio cuenta. Hubo demasiado alcohol de por medio, yo no bebí porque, entonces, sabía que estaba embarazada.

Angelina me mira, y su cara pasa de emoción a sorpresa.

- Felicidades, supongo.

- Gracias.

- ¿Cuántos meses van ya?

- Seis. Siento no habértelo dicho antes. Todo en realidad. Como estamos en diferentes plantas, ya ni te veo.

- George está en mi casa. Sé algo. Pero teníamos algo de duda, ya sabes. Supongo que él no lo sabe.

- No quiero. Dijo que no lo quería ahora.

- ¿Se lo presentarás algún día?

- Me estuvo semanas persuadiendo para prepararme mentalmente ser madre. Y cuando al fin me mentalicé, resulta que él no está preparado. Si no lo está ahora, no lo estará nunca. El niño podrá relacionarse con quien quiera y tratarlo como quiera, pero él no será nunca su padre. Ahora, si me permites, tengo mi primera ecografía.

Molly me sigue. Me toma la mano y no nos hace falta nada más.

Tumbada, Molly parece más emocionada que yo. Tiene lágrimas en los ojos.

- Fíjese, es curioso, ¿ve allí? - agudo la vista.

- ¿Qué pasa? - pregunta Molly.

- Enhorabuena, va a tener dos bebés.

- ¡Ay! Eso es genial - Molly me abraza.

- ¿Cuál es su género? - curioseo.

- Niño y niña.

- Fred y Enhola.

- ¿De dónde viene el de la niña? - Molly me mira curiosa.

- La serie favorita de Harry cuando éramos pequeños. Me gustó el nombre. Y Fred por mi mejor amigo.

Molly se limpia las lágrimas y me sonríe.

Pero al llegar a La Madriguera, algo me llama la atención.

Entre mi nombre y el de George, sólo hay una F. Y no la de su hermano, que está justo al lado de George con la inicial de Angelina.

Respiro mientras me toco la tripa.

- ¿Pasa algo? - Molly entra y cierra tras ella.

- No, bueno, sí, el colgante...

- Aunque sea su regalo, quédatelo, te queda tan bien. Y tiene un hechizo protector.

- ¿De verdad? - ella asiente. Entonces me miro de vuelta al espejo - Sólo está la F. ¿Y la E? ¿Por qué no está?

- La pequeña está menos desarrollada seguramente.

Asiento no muy segura y salgo de ahí para ayudarla a preparar la mesa.

Pero algo falla.

- ¿Tanto?

- ¿Ya han venido todos mis niños? - Arthur entra en la cocina - ¡Tn! Que alegría. ¿Y George? Sois la primera pareja en venir, me alegra.

Miro a Molly sorprendida.

- Arthur, cariño, George no está aquí.

- ¡Oh! Está en el trabajo con Fred, ya lo entiendo. Has venido a ayudar, por eso eres mi nuera favorita, pero no se lo digas a los demás. ¿Qué tal la ecografía? ¿George no fue? Él es el padre.

- George...

- ¡Ayúdanos y cállate! - le regaña Molly.

Los primeros en venir son Percy, Penélope y Molly. Ambos se sorprenden más de mi embarazo que de mi presencia.

Bill, Fleur, Victoria, Charlie también se sorprenden de lo primero.

Hermione y Ron me abrazan al verme de nuevo.

Ginny tiene que sacar a Harry de mis brazos porque no se separa mientras susurra amenazas para George.

Angelina inclina la cabeza, Fred me abraza intentando no llorar.

Y cuando todos nos sentamos, aparece George.

Me levanto dispuesta a irme, pero Harry agarra mi mano y tira para que vuelva a sentarme.

Pero aunque mi mente quiere, mi cuerpo quiere acercarse a él y abrazarlo.

Corazón y mente van a colisionar.

Me siento al final, él a mi lado libre.

Ninguno come, pero todos están enfrascados en sus conversaciones para darse cuenta de nuestra conversación mental.

- Tn - murmura él a mitad de comida.

Me levanto sin llamar la atención, y salgo de ahí rápidamente. Pero de repente, todo se vuelve oscuro.