Capítulo 2

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Habían pasado dos semanas y media, aproximadamente.

Nadie violó, ni forzó a Jinyoung a nada.

Se había hecho amigo de la omega trigueña despampanante, a quien llamaban Hwasa, y ya había aprendido mucho del dialecto de la tribu; ella le hubo enseñado, también la omega mayor, Sihoh, pero esa omega era muy seria y seca, no le agradaba mucho.

Hwasa le contó que esta tribu era una tribu agresiva, conquistadora, y que hubo masacrado a su tribu hacía un año atrás, cuando entraron en conflicto por cuestiones de territorio; al final, sólo conservaban a los omegas, para educarlos y tenerlos junto a sus omegas solteros nativos, enseñándoles a ser buenos omegas; y así, ofrecerlos de regalo en alianzas con otras tribus más fuertes, acordándo la paz. Jinyoung incluso se estremeció con eso.

Las demás omegas le manifestaron su sorpresa por su capacidad de aprender tan rápido el dialecto de la tribu. Muchas "nuevas", habían tardado meses en hablar decentemente. Pero Jinyoung era un genio, y aprendía bastante rápido.

Mientras iba a por la recolección de agua en el manantial más cercano, se percató de que uno de los alfas que cuidaban, supervisaban y escoltaban al grupo, lo miraba mucho. Incluso lo consultó con Hwasa, y ella bromeó con eso, que quizás le gustaba.

A Jinyoung le dio un escalofrío, no era su tipo, ninguno de éstos salvajes era su tipo. Él pensaba que nunca llegaría a gustar de ninguno. Tampoco le importaba.

Cuando terminaron, convenientemente, ese alfa se ofreció a ayudarle a llevar sus dos baldes de agua, pero se negó y se apegó al resto del grupo. Todas las omegas rieron bajo y disimulado. No era su culpa, él tenía derecho a que no le guste un alfa, simplemente no, sobre todo después de haberlos visto decapitando a sus compañeros.

Pasó un par de días más.

Hasta la fiesta de alianza con una tribu lejana. Y absolutamente toda la tribu fue un alboroto.

En los tipis, las omegas vinculadas ayudaban con la preparación de las plumas para adornar a los generales de su pequeño grupo de luchadores. Jinyoung y su grupo se encargaron de preparar la comida, maceraron las especias del bosque machacadas en un bol, y quitaron las víceras de los venados capturados.

El grupo de betas hembras, se puso a tostar en la fogata, a llama pequeña, la carne, junto a las patatas dulces.

Luego de que Jinyoung se hubo bañado junto a las demás, en el río que separaba la ex tribu de Hwasa y la actual tribu, fue hacia el wigwam donde descansaba. Y todos los lechos tenían una túnica diferente, más traslúcida, mejor bordada. Jinyoung casi podía calcular en monedas de oro, todo lo que valía una sola prenda así, allá en Londres, sólo podría ser un poco más alta, y sería perfecto para ser ropa de dormir. 

Pero su rostro palideció cuando se dio cuenta, que las demás vestían esas túnicas sin nada más dentro, excepto un taparrabo, ridículamente corto. Los pechos podían verse si enfocabas bien el ángulo de la luz.

Jinyoung solo se puso su calzoncillo, no lo usaba porque la túnica habitual era gruesa, por lo que estaba limpio y seco resguardado bajo su lecho. Nervioso, esperó sentado junto con el resto del grupo.

Hwasa le dijo que las vestían así, a modo de oferta para los alfas de la tribu visitante. No había escuchado mucho de ellos, pero era una gran tribu, un pueblo, con alfas fuertes y poderosos.

Ésta tribu estaba tratando de afianzar la paz con ellos, y la mejor estrategia: era ofrecerles omegas, las que quisieran, las que gustaran. Todas las del wigwam ya pertenecían a ésta tribu, y si alguno de ellos deseaba vincularse a alguna, sería lo mejor para pactar un lazo de paz. La omega mayor, Sihoh, esperaba que algún general de esa tribu escogiera a alguna de sus omegas.

Wild Alpha [Bnior/JJP]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora