Look who's talking • [versión en español]

Movie night

—Te di cinco dólares, ¿cómo demonios has comprado todo esto?– Theo se quedó boquiabierto viendo a Olivia apilar una pila de DVDs en la ya precaria pila de libros de su brazo que Max, colgando en el otro brazo, parecía intentar empujar. Los tres comenzaron a caminar, Theo miraba a Max cada vez que ella extendía un puño regordete con la esperanza de derribar la torre de DVDs y libros que él intentaba mantener fuera de su alcance.

—Tenían una oferta.– Olivia sonrió.
—Ocho DVDs por cinco dólares.

—Vale.– Le echó a la chica una mirada dudosa. —¿Y qué hay de eso?–Theo preguntó, asintiendo con la cabeza al reproductor de DVD portátil que aún tenía en sus manos. —¿Esa parte del trato también?– Olivia chasqueó la lengua, con los ojos en blanco.

—Bueno, no, pero no podría verlos sin él, así que...

—¿Lo robaste?– Theo completo por ella con petulancia.

—Robar hace que suene mal.

—Eso es porque es literalmente contra la ley.– Theo dijo. Olivia no sólo puso los ojos en blanco esa vez, sino toda su cabeza, un dramático gemido de desprecio burlón pasando por sus labios como si Theo le hubiera dicho que el aterrizaje en la luna era falso.

—¿Me vas hacer que lo devuelva?

—No.

—Entonces no te quejes.– Ella ordenó. Como si Theo fuera el problema.

—Me quejaré del hecho de que me engañaron para hospedar una pequeña cleptómana si quiero.– Theo se quejó.

—¿"Cleptómana"?

—Cleptomanía. Significa que robas porquerías. Llévatela...– Theo ordenó, empujando a Max sobre Olivia antes de que ella lograra golpear la pila.

—Mi madre podría estar muerta, se me permite robar un reproductor de DVD sin ser una capomaníaca.– Olivia dijo, haciendo malabares con Max y el reproductor de DVD.

—Cleptomaníaca...–Theo corrigió, robando el reproductor de DVD de sus manos antes de que pudiera decidir dejar a Max para mantenerlo a salvo. —¿Y de verdad? Estás usando el hecho de que tu madre podría estar muerta como excusa para esto...– Se burló agitando el reproductor de DVD. Olivia asintió con la cabeza. —Un poco precipitado, ¿no crees?

—Tienes que trabajar con lo que tienes.–Olivia dijo con un encogimiento de hombros indiferente que hizo sonar una risa de Theo vergonzosamente fuerte. Una sonrisa brillante iluminó la cara de Olivia, con los ojos brillantes mientras lo miraba.

—Crees que soy graciosa.

—Creo que eres molesta.

—Te gusto. Hey Max, ¡Le gusto!– Ella arrulló. Max gorgoteó en una burbuja de saliva.

—Ella está mintiendo. La tolero.– Theo advirtió a la bebé llena de burbujas. —Vámonos.

—Admite que crees que soy graciosa.

—Literalmente nunca va a suceder.– Theo dijo, pisando hacia el coche. Olivia corrió tras él, tirando de su manga, casi derribando sus cosas en el proceso.

—Admítelo Theo.

—No.

—Theoooo– Se quejó.

—No va a pasar.

—Hey Theo, Toc toc.– Olivia dijo valientemente. Theo puso los ojos en blanco, mirando la molesta mierdita que se aferraba a sus brazos, con los oyos llenos de picardía. Max gritó desde donde ella estaba colgando.

—¿Quién está ahí?– Él le siguió la corriente, con la cara seria.

—No es mi madre.– El ruido que dejó la garganta de Theo fue espantoso, un chillido de risa horrorizada que hizo que Olivia sonriera orgullosamente y que Max cacareara como un alegre loro, incluso cuando se acercaba al suelo. Theo corrió hacia el camión, intentando quitarle la sonrisa de la cara antes de que Olivia se le metiera en la cabeza más ideas sobre él disfrutando de su compañía.