Capítulo 27

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Narra Lauren:

Nuevamente me encontraba en un estancamiento, pero esta vez era algo completamente ajeno a mí de lo que yo no tenía control. Me sentía como si nuevamente me quitaran algo que amaba, pero el dolor era diferente, era mucho más intenso, el simple hecho de imaginarme perder a Camila me apretaba el corazón de una manera impresionante. Lo peor era que ella no quería tomar el tratamiento y todos sabían lo que pasaría si no lo hacía. Era como estar a punto de perder lo que más amas en la vida y no poder hacer nada al respecto, como ver a alguien cayendo por un precipicio sin poder atraparla. Era como verla en medio de una autopista y no poder quitarla, como si le dijera que van a atropellarla, pero ella no quisiera quitarse y lo único que quedaba era ver como los autos le pasaban por encima.

Estaba llena de impotencia y dolor, tal vez ella no me quería lo suficiente como para luchar por vivir, pero... ¿y su familia? ¿a ellos tampoco los amaba lo suficiente? ¿o de verdad el proceso era lo más desgarrador que me pudiera imaginar? No lo creo, no creo que haya algo más desgarrador que ver morir a la persona que amas.

¿Qué se suponía que debía hacer?

Esa pregunta rondaba por mi cabeza cuando llegué de casa de Camila, había llorado mucho ese día, miré sus fotos nuevamente, eso se estaba convirtiendo en mi cosa favorita cuando las cosas estaban mal con ella. Ver su sonrisa era una de las cosas más tranquilizantes que podía oír.

Al siguiente día fui al gimnasio a hacer ejercicio, realmente estaba usándolo para sacar toda mi frustración, sentía que mi cuerpo no daba más, pero yo le estaba exigiendo continuar, estaba sudada y agotada mientras escuchaba su voz en mis audífonos, oírla cantar era acogedor.

Me puse a pensar que ella era la persona más buena del mundo y definitivamente no merecía lo que le estaba pasando, y fue entonces cuando me di cuenta de que yo estaba siendo muy egoísta, quería someterla a algo de lo que yo no tenía idea, con tal de no perderla, sin embargo, era decisión de ella y yo debía respetarla y así lo haría.

Mientras pasaba eso, volvió el miedo de perderla y la adrenalina corrió por todo mi cuerpo haciendo que el ejercicio fuera mucho más fuerte, por suerte alguien tocó mi espalda haciendo que me detuviera. Me giré y ahí estaba ella con un semblante preocupado...

-Camila... -Dije con la respiración agitada quitándome los audífonos. -¿Qué haces aquí? -Pregunté sentándome en una de las máquinas.

-Vine a hablar contigo... Normani me dijo que estabas aquí. -Me miró con algo de temor en los ojos.

-Que bueno que viniste. Quiero disculparme... fui muy egoísta intentando hacer que tomes el tratamiento cuando no sé lo que es, no sé todo lo que sufres así que... lo siento, y de verdad voy a aceptar tu decisión. -Dije con dificultad, me acerqué a ella y tomé su rostro entre mis manos. -Pero olvídate de terminar esto porque yo voy a estar contigo, Camila, no te dejaré sola en esto... ¿me entiendes? -Ella asintió apretando los ojos empezando a llorar y yo la abracé con mucha fuerza intentando transmitirle todo mi amor y decirle que no estaba sola. Estuvimos en esa situación por un par de minutos hasta que nos separamos y limpié las lágrimas en sus hermosos ojos. -¿Venías a decirme algo?

-Voy a tomar las quimios. -Dijo con una media sonrisa, estaba segura de que mi rostro se había iluminado.

-¿De verdad, Camz? -La miré esperanzada.

-De verdad. -Asintió y yo volví a abrazarla, la cargué y la apreté contra mí. -¿Tú vas a estar conmigo? -Me miró con una carita adorable.

-Siempre, cariño. -La miré a los ojos para que se diera cuenta de que lo decía con toda la sinceridad del mundo.

Stay Fearless (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora