Capítulo 38

3.4K 176 47
                                    

La campana no sonó como solía hacerlo, el arbitro salió del ring a hablar con otro y con algunas personas que supuse que eran de producción, la mayoría de la gente abucheaba incluyendo a Dinah y nadie me explicaba qué rayos estaba pasando.

-¿Qué pasa? -Le pregunté a mi mejor amiga frunciendo el ceño.

-El pie. -Decía sin despegar la vista del ring.

-¿Qué? ¿Cuál pie? -Me estaba desesperando al igual que Clara. Sofi tenía el mismo semblante que Dinah.

-El pie de Lauren estaba fuera de la lona. -Apretó los dientes.

-¿Y?

-La cuenta no vale si todo el cuerpo no está dentro del ring.

-Este combate se reiniciará, ya que, la cuenta no ha sido valida. -La mujer que anunciaba habló, saqué todo el aire retenido y como si fuera automático, los nervios volvieron a mí.

Cabe recalcar que el público gritó como loco cuando terminó de hablar.

Narra Lauren:

Casi entraba en pánico cuando la cuenta llegó a tres, no levanté mis hombros de la lona porque además de que estaba agotada, sabía que mi pie estaba fuera y que no valdría, sin embargo, el arbitro tuvo que verlo nuevamente porque no lo hizo a la primera, por suerte le dijeron.

El hombre esperó a que ambas estuviésemos de pie, pero era difícil, ninguna parecía poder continuar, llevábamos más de media hora de lucha y era demasiado. Parecía que habíamos acordado no tocarnos para descansar por unos dos minutos. Al hacerlo tomé el rostro de Becky y lo empujé contra el esquinero, intenté golpearla, pero ella me bloqueó cargándome y pasándome del otro lado de las cuerdas. La tomé y la saqué para que estuviera en la misma situación que yo. Me dio unos golpes en el cuello causando dolor considerable, tomé su cabeza, levanté su cuerpo y la solté logrando que cayera de cara contra el suelo.

Me quedé en el borde del cuadrilátero intentando recuperar el aliento. Cuando se levantó la sorprendí cayendo encima de ella, después la cargué e hice que su espalda chocara con las barras para el público. Era uno de mis arranques de adrenalina. La regresé al ring, escalé hasta la tercera cuerda y le caí encima del pecho. La cubrí, pero la cuenta solo llegó a dos. Acomodé mi cabello frustrada, ya no podía más, quería terminar con esto, tenía mucha presión encima.

Como si no le hubiese hecho nada, se puso de pie y en un movimiento rápido me dio un rodillazo en la cara dejándome caer como una tabla, posteriormente me levantó e hizo que cayera sentada en la lona, movimiento muy peligroso porque si caía mal mi columna podría sufrir un daño grave.

Intentó hacerme su movimiento final, pero logré zafarme, de lo que no me libré fue de su llave de rendición, el devastador disarm-her. Dolía, sentía que en cualquier momento mi brazo se rompería, no podía ceder, pero estaba agotada. Pensé en Camila y en lo perfecto que sería ese día, con ayuda de mis piernas logré deslizarme hasta tomar la cuerda obligando a la chica a soltarme.

Tomé mi brazo en un intento de que el dolor pasara mientras oía a Becky quejarse con el árbitro. Hice un último esfuerzo y me puse de pie, intentó aplicarme un lazo al cuello, pero logré esquivarlo. Subí a la tercera cuerda lo más rápido que pude y caí dándole una patada en el cuello derribándola. Una vez tirada boca abajo en el ring, tomé su pierna y la entrelacé con la mía, enredé mis brazos en su cuello y jalé con todas las fuerzas que me quedaban, era mi STF. Sentía mis brazos punzar de cansancio, mi cuerpo ya no daba más, apreté más fuerte y lo único que alcancé a ver antes de soltarla fue su mano dando palmadas en la lona, se había rendido, la campana sonó y yo estaba aturdida con los gritos.

Stay Fearless (Camren)Where stories live. Discover now