Capítulo 14

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— ¿Y qué vas a hacer, Kris, golpearme como la última vez? —Yixing lo reta y el chico que lo acompaña insiste en llevárselo, pero este se suelta de manera violenta.


—Debí matarte, así dejarías de joderle la vida a Zhan.


— ¿Y quién mierdas eres tú para decidir eso Kris?


—Soy su mejor amigo.


Yixing deja escapar una carcajada y coloca sus brazos sobre la mesa adosando la parte superior de su cuerpo para acercarse a Kris. —Los mejores amigos no tienen sexo entre ellos Kris.


La respiración de YiBo se acelera y sus ojos nunca se han apartado de Xiao quien lo único que hace es llorar. Yixing ahora se dirige a YiBo. —Te lo dije YiBo, tienes que cuidarte de Kris, Zhan siempre termina regresando con él.


— ¿Regresando? Sabes que eso no es así Yixing —Kris se defiende.


—Tú fuiste quien le dijo que me dejara y que sorpresa Kris, cuando terminó conmigo tú estabas ahí listo para él ¿No es cierto?


—Las cosas no son así y lo sabes, así que deja de tratar de confundir a YiBo. Y yo no le pedí que te dejara simplemente le aconsejé que lo mejor sería alejarse de esa relación en la cual nunca fueron solo ustedes dos.


—Claro, porque tú también estabas.


— ¡Vete a la mierda! No quieras culparme por tus fallos, fuiste tú quien perdió a Zhan, yo simplemente lo ayude a atravesar su tristeza.


—Oh sí, me imagino que lo ayudaste mucho...


Kris se levanta de golpe y toma por el cuello de la camisa a Yixing causando una conmoción dentro del bar, varios meseros se acercan a tratar de calmar a los hombres y pedirles que si van a discutir abandonen el lugar. Con la ayuda del acompañante de Yixing Kris logra sacarlo del establecimiento, dejando a YiBo y a Xiao solos en la mesa.


Xiao trata de recomponerse y se limpia la cara con una servilleta, cuando ve a YiBo su corazón se acelera y su nerviosismo se dispara, el menor no ha dejado de verlo durante toda la discusión de Kris y Yixing, su rostro inexpresivo asusta al mayor y cuando YiBo habla sabe que no hay marcha atrás, y que en este mundo entre cielo y tierra todo se llega a saber.


— ¿Es cierto? —le pregunta YiBo.


—Yo...


— ¿De verdad ustedes son amantes? —pregunta casi en un susurro.


Con sus ojos rojos e hinchados Xiao responde. — ¡No!


— ¿Te acuestas con él?


—No...


— ¿Te has acostado con él? —pregunta masajeándose la frente.

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