Parte 1

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"Venden esto en un color mas...no sé.... naranja sangre?"

Louis observo a un hombre barbudo con jeans rasgados y gafas sin lente mostrarle un chaleco de malla azul claro. Naranja sangre. Naranja jodidamente sangre.

Louis no es una persona prefecta, pero se pregunta qué cosas horribles ah hecho en la vida para que el terminara trabajando en American Apparel* durante el verano.

American apparel la pretenciosa cuna de los hipsters en el centro comercial. El necesitaba un trabajo de verano para ahorrar dinero al estar en su último año de locura en la universidad, si, pero él no necesitaba un trabajo de verano en el que sus jefes insisten en mantener la tienda a 27° con el fin de hacer que sus empleados luzcan ingeniosamente empapados en sudor.

Agita su camiseta de los pliegues de abajo, tratando de ventilarse un poco y frunce el seño ante las gotas de sudor que puede sentir corriendo su espalda. El odia su trabajo.

Quizás este es el karma por delitos cometidos en una vida pasada, el cree. O por el aquella vez en la que olvido alimentar a su pez dorado cuando tenía 10 años. Tal vez.

El cliente aclara su garganta, llamando la atención de Louis de vuelta a él. Sus caros mocasines golpean impacientemente sobre el piso de madera solida mientras espera por la respuesta de Louis. Así que naranja sangre, perfecto.

Louis sonríe y camina hasta llegar hacia donde está el hombre “Lo tenemos en rojo chic, funciona eso para ti?” responde Louis, tirando de un perchero cercano el articulo en oferta y haciendo ademan de ver atraves de la tela roja.

El hombre arruga su nariz y lamenta “No, no, eso es muy rojo. Yo lo necesito naranja sangre.”

Louis puede sentir su sangre hervir, así que muestra su sonrisa falsa y pone el chaleco devuelta al perchero “Lamento decirle que eso es lo más cercano que tenemos a ese color, señor. Puedo ayudarlo a encontrar algo más?

“No, parece que tendré que ir a comprarlo en línea” el responde, suspirando como si estuviera molesto. Pone el chaleco devuelta en el perchero incorrecto y camina sin cuidado hacia afuera de la tienda. Louis mira el perchero y frunce el seño ante la prenda fuera de lugar, tomándola y colocándola en el lugar correcto. Idiota.

La tienda esta algo lenta hoy, y mas que no muchos clientes andan por ahí a un cuarto para las once un lunes por la mañana, pero no hay otro como Louis para apreciar largos y lentos tramos de tiempo como estos. Trabajar en una tienda al por menor le ha dado un nuevo interés por observar personas, un pasatiempo de el cual se puede dar gusto estando a salvo detrás de una caja registradora. Pone sus codos en el escritorio y mira el pasillo que esta por fuera de la tienda, observando diversos grupos de gente mezclarse por ahí.

Ahí esta Flash, la mujer de mediana edad quien recorre caminando –casi corriendo- el centro comercial cada mañana. Louis le dio ese nombre en particular después de verla pasar en frente de la tienda dos veces en tan solo quince minutos, en una muy empapada y desgastada camiseta y una respectiva cola de caballo. Admirando su tenacidad piensa que tal vez debería de intentar alguna vez esa especie de rutina.

Después de Flash, Louis no reconoce a nadie más. Está una muy agotada mama, empujando dos cochecitos de bebe en frente de ella con una mano mientras chatea en su teléfono con la otra. También hay un hombre mayor sentado en una banca de las afueras del lugar, felizmente comiendo de su pretzel, desparramando algunas migajas de canela en cada mordida que pega. Y hay un chico en la tienda frente a la suya bailando.

Alto. Los ojos de Louis regresan de vuelta a la tienda; Mira hacia arriba el letrero de la misma ---Lush--- y de ahí van de vuelta al chico. Él trabaja ahí al parecer, a juzgar por el delantal negro amarrado ajustadamente a su cintura. También tiene una escoba en sus manos, arrastrando el polvo con la ayuda de sus pies en movimientos exagerados, que Louis  sospecha, esta lejos, de en realidad, una buena limpieza. Pero el esta bailando. Bailando lo que Louis cree es la música del centro comercial (el genérico e interminable solo de saxofón que suena de los altavoces a todas horas las horas del día).

El chico es un desastre andante en piernas largas, algo parecido a un torpe y vago venado, hace algo sacudiendo sus caderas mientras pasa la escoba alrededor de su eje en un despliegue. Louis no puede ver bien sus rasgos desde donde se encuentra, pero su cabello se ve algo largo y ondulado mientras lo demás está sujeto bajo un colorido pañuelo. Es lindo.

El chico Lush tropieza sobre su propio pie y cae en unos contenedores negros de exhibición; se lanza a si mismo reincorporándose de nuevo y observa a su alrededor si alguien alcanzo a ver su metida de pata. Louis teniendo su  puño sobre su boca, da un respingo y se voltea para esconderse en la habitación trasera, fuera de vista del otro chico

El concepto que tenia de su turno de ocho horas en la tienda se ve más llamativo ahora que se da cuenta que podría tener al chico Lush como entretenimiento. Excelente.

Cotton Candy Kiss | l. s.Where stories live. Discover now