°•Experimento•°

Cuando ambos se acercan.

Faltaba poco para la explosión de Ciencia en la Universidad y los días previos al evento Kohaku tuvo que sacar casi a rastras al peliverde del club de Ciencia o incluso el mismo personal de limpieza o los miembros del club tuvieron que ingeniarcelas para sacarlo de allí de  tan absorto que estaba en el proyecto que estaban realizando y decir que el ojos de rubí estaba emocionado era corto ya que no paraba de hablar de las ansias que tenía de mostrarle a todos el cohete que el junto con los del club de ciencias habían fabricado con tanto esfuerzo y en más de una ocasión había logrado dormirla con esas charlas sobre el desarrollo del cohete, el proceso para ser fabricado, la función de sus distintas partes, su tipo de combustible, que tan lejos y alto podría llegar, los materiales necesarios para hacerlo etc, aunque ella no se quejaba ni se aburría de escucharlo la verdad es que la apenaba no entender ni adelante ni atrás las palabras del joven.

No es que las platicas de él sobre la ciencia y de más le parecieran aburridas o no quisiera oírlas simplemente aveces las charlas de Senku sobre eso aveces la dejaba agotada mentalmente y sin contar que ahora ella también tenía que esforzarse pues también se acercaba de a poco su competencia de artes marciales y quería estar más que lista y preparada para eso, sin dudas y quedaba aun más cansada cuando tenía que dividir también su tiempo en su trabajo resaltando también que se acercaba a lo que Amarrilys llamaba "La repostería de caridad" y tendría que prepararse para casi una o dos semanas de eso sin duda alguna pero aun así también le divertía aveces el ayudar a Senku con sus proyectos y de paso aprendía algo ella también.

En pocas palabras ambos se ayudaban mutuamente e incluso aveces recibiendo ayuda de sus demás amigos.

Aunque en medio de todo eso aun había algo que preocupaba y mantenía en incógnita a ambos jóvenes y es que también el repentino regreso de las escamas del peliverde era algo que nisiquiera él entendía hasta el momento aunque había dado varias teorías aun ninguna lo convencía a ninguno de los dos.

-¡Kohaku-chan, Senku-kun!- el grito de Yuzuriha  los hizo voltear a ambos. La castaña venía con los hermanos Kinrou y Ginrou y como no también con el otro castaño- ¡Aquí están los estuvimos buscando!- dijo en un tono de regaño pero con una sonrisa-

-Bueno- dijo la amazona- aquí estamos ¿que pasa?- dijo con una sonrisa-

-¡Prepare pastelitos!- dijo mostrando una cajita color blanca con bordes dorados en la tapa antes de abrirla mostrando unos pastelitos decorados de distintas maneras muy apetitosos-

-Se ven deliciosos- dijo Ginrou mirando el contenido de la caja mientras saliva le brotaba de la boca-

-Ya lo creo- dijo la amazona en el mismo estado que el ojiverde mirando la caja-

-¿Que esperan?- dijo Yuzuriha sonriendo- tomen uno-

Cada quien tomo un pastelito de la caja y se lo llevo a la boca y empezaron a comer. El sabor de los pastelitos era de vainilla y chocolate esponjosos, suaves y muy dulces, tenían la base superior cubierta con crema y adornados con trozos de merengue.

-¡Mmm!- dijo Kohaku- Yuzu cada vez te quedan más ricos- dijo mientras comía con los ojos cerrados y con una expresión de niña pequeña en su rostro-

-El que sepa como prepararlos así es gracias a Ruri-chan- dijo la castaña cerrando sus ojos mientras sonreía-

-¿Ruri cocina?- Senku miro a Kohaku-

-¡Ah! ¿No conoces a la hermana de Kohaku-chan o si?- lo miro-

-Bueno...algo así- río entre dientes recordando la vez en la que conoció a Ruri por primera vez y ahora que lo recordaba le daba risa-

-¿Enserio?- dijo Ginrou a la par de Taiju y Yuzuriha-

-Si- dijo Kohaku riendo también al recordad aquella escena de Senku sobre ella cuando su hermana abrió la puerta de su departamento, aunque todo había salido bien al final, lo que no esperaba era que su hermana terminase por darle un condón antes de irse y eso fue lo que la hizo pensar ¿acaso su hermana....? ¿no podía ser o si? Pensar en eso termino por adornar sus mejillas de un color rojo-