Eres molesta. [Tsukishima x tú♡]

Capítulo 14

Naturalmente la noche es oscura y, algunas veces, fría, pero ésta vez sentía más oscuridad y frialdad que de costumbre. Llegué a mi casa y, a mi suerte, mi mamá no estaba y tan solo había una nota de ella diciendo que estaba en el supermercado.

Subí a mi habitación luego de quitarme las zapatillas en la entrada, dejé el bolso en el escritorio, me quité la ropa que traía y la dejé simplemente en el suelo.

Tomé una camiseta larga de mi closet, me la coloqué, me acerqué a la cama y aparté las frazadas para acostarme.
Luego de un rato, sin poder conciliar el sueño, sentí el ruido de la puerta abrirse, era mi mamá; el sonido de las bolsas en el suelo; las llaves sobrepuestas en el mueble de la entrada; las pantuflas de mi madre resonar sobre el piso de madera hacia la cocina. Pero el ruido que mejor podía escuchar era el de mis sollozos.

—(Tn), ¿ya llegaste?— gritó mi mamá desde el primer piso. No contesté, no tuve las ganas ni las fuerzas para hacerlo. Pasaron los segundos y el ruido de las pantuflas de mi madre estaban del otro lado de mi puerta. —¿Puedo pasar? escuché un quejido. — sin esperar respuesta giró la manija de la puerta y entró. —¿Por qué no respondes cuando te hablo?— dijo algo enojada. Y aún sin respuesta mía se acercó al costado de la cama. —No me hagas repetírtelo. — ella acercó su mano al borde de las frazadas y destapó mi cara. La almohada mojada, mi rímel corrido, algo despeinada y mi llanto era lo que mi madre podía ver y oír en esos momentos. —Hija... hija, cuéntame qué te sucedió. — dijo con tono de preocupación mientras se sentaba a mi lado y apartaba los mechones de cabello que caían sobre mi cara.

—C-confié en él mamá...— respondí entrecortado.

—¿El chico que te vino a dejar el otro día te hizo algo?— su tono de voz era dulce. Dejé de llorar por un momento y me senté en la cama secando mi rostro. 

—Y-yo creí q-que... en verdad le interesaba, p-pero hoy me di cuenta de que... no era así. —le contaba mientras jugaba con mis dedos. 

—¿Qué fue lo que hizo?

—Él... iba a besarse con una chica de su clase, f-frente a mí.

—Cariño...— dijo mi mamá antes de acercarse a mí para abrazarme.

—Pensé que todo iba bien...

—No deberías estar llorando por alguien que no supo apreciarte. Mereces mucho más...

—Lo sé mamá, pero... creo que él en verdad me gusta.

—Así veo, o no estarías llorando ahora.

—Creo que mejor me duermo, debo ir al club mañana.

—Está bien, te dejaré dormir. Descansa— mi mamá se levantó de la cama y caminó a la salida cerrando la puerta tras de sí. Volví a acomodarme, sequé el resto de lágrimas y cerré mis ojos para dormir hasta que sonara el despertador.

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—¿En verdad oíste eso?— preguntó una chica de mi salón a una que estaba en el grupo con ella.

—Sí, se besó con la chica que se sentó con él en el autobús de regreso. — respondió la amiga. Quizás debí haberme quedado en casa y me hubiera ahorrado escuchar este tipo de comentarios durante el día.