El Legado

capitulo 8: fugitiva

con todo lo que ha pasado, no habíamos notado que teníamos mucha hambre, así que después de subir al bus, nos bajamos cerca de un restaurante. devoro con ansias mi hamburguesa y kilian hace lo mismo. Me recuesto en mi asiento y tomo un sorbo de mi refresco

—mi madre me dio esta carta antes de morir—susurro sin mas

Le paso la carta a kilian, el la recibe inseguro

Espero ansiosa su reacción, sus ojos recorren rápidamente el papel, sus cejas se juntan, el borde de la hoja se arruga por la fuerza con que la esta tomando. Después de lo que parece ser mucho rato me mira con una expresión que no logro descifrar

—siento mucho lo de tu madre—dice lúgubre, no me mira a mí, sus ojos están perdidos, sus facciones están contraídas, como... si estuviera sufriendo

—ellos...—susurra tan bajo, que no estoy segura de haberlo escuchado bien

Me acerco a kilian y lo tomo del brazo

—acabas de decir ¿ellos? ¿a que te refieres? ¡Kilian! ¿Qué quieres decir con ellos? —replico alto

—nada... solo estoy... Procesando la información—asegura con una expresión bastante convincente

—estas mintiendo—replico furiosa

Me concentro en su figura, no se como funciona esto, pero se con toda seguridad que me esta mintiendo, el esta aterrado...tiene miedo de alguien.

—¿a quién le temes? —pregunto con seguridad

Me mira asombrado, pero calma su expresión en un segundo

—no sé de qué hablas

—sí que lo sabes—afirmo—.de hecho, creo que sabes mucho mas de lo que dices, se que me estas ocultando algo. No te había querido decir nada ya que yo también te ocultaba todo esto, pero ahora que lo sabes todo de mí, necesito que tú también confíes.

Kilian me mira apesadumbrado, esta a punto de responderme, pero algo a mis espaldas capta su atención

—¡pretendes ignorarme! —le grito

—zenda...estas en las noticias—manifiesta lentamente

Giro lentamente, y miro el televisor. Una foto mía esta en las noticias, me reportan como desaparecida. Mis manos se forman en puños, pensé que nada podía empeorar esta situación, que equivocada estaba.

Ahora hay más personas que me buscan, perfecto.

También aparece una foto de mi madre, anunciando que murió recientemente por una extraña enfermedad.

Kilian se para y me ofrece su mano

—tenemos que salir de aquí—susurra

Miro su rostro insegura, quiero tomar su mano, ya que confió en él, pero ¿el confía en mí?

Tomo su mano y los dos salimos juntos del restaurante

—necesitas unas gafas oscuras y una gorra—replica

—como si eso sirviera de algo—digo tosca

—necesitamos llegar a el lugar que nombra tu madre en la carta, necesito que estés segura de ellos—replica rápidamente

Lo miro con tristeza, no puedo dejar de pensar que el estaría mejor sin mi

Pienso en la forma en que dice esa palabra, como... si supiera algo más

—la forma de llegar debe estar en el celular, necesitamos  verlo—le aviso

El asiente, me guía por la calle y entramos a una tienda de accesorios y ropa

—¿Cuánto dinero te queda? —pregunta

—el suficiente para unas cuantas semanas mas

Kilian toma un saco que parece ser dos tallas mas grandes que la mía y me lo tira, también coge una gorra y unas gafas oscuras

—pruébatelas —dice pasándome las gafas

Me las pongo insegura

Kilian me mira por un largo rato y luego me dedica una extraña sonrisa

—perfecta—dice sonriendo—. voy a pagar todo esto

 Me pongo el saco y la gorra y me observo en un espejo cercano

Me veo... ridícula, me rio con amargura, mi vida completa era cuidar de mi madre, y ahora estoy aquí, huyendo de la ley y de gente que quiere matarme. Y además con kilian. Lo observo desde lejos detenidamente. Su contextura delgada lo hace parecer débil, pero es el chico mas fuerte que he conocido, el me ha mantenido en pie todo este tiempo. miro con dolor su atroz cicatriz, eso debería parecerme aterrador y horrible, pero no es así, simplemente es una cosa mas que me atrae de él, esa cicatriz representa su... fuerza interna, y su valentía.

—¿estas lista para ver a donde tenemos que ir? —pregunta kilian acercándose

—ni un poco—los dos reímos

Kilian saca el celular de su bolsillo y lo prende

Pasan unos segundos y salen números y letras en la pantalla, no entiendo nada, pero al parecer kilian si, ya que se concentra y comienza a... memorizarlos.

De repente el celular se queda en negro

¿Qué diablos fue eso?

—lo tengo—dice con una sonrisa triunfal.