27. Will

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Ni tengo a dónde ir
ni quiero ir a ningún sitio.
Si me pregunto por qué regreso a casa
no sé qué contestarme, ni me importa;
seguramente porque hace mucho sol,
y estoy cansado de mi sombra.

Karmelo C. Iribarren



Lo diré de buenas a primeras: si por poco meto la pata en la reunión fue por culpa de Nico

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Lo diré de buenas a primeras: si por poco meto la pata en la reunión fue por culpa de Nico. Puede que esté exagerando, pero de verdad me causó una perturbación inesperada, presentándose como el primo de Hazel con un brillo en la mirada que sentí en parte recriminatorio y en parte satisfecho.

Imagino que me quería dar el mensaje implícito de lo perjudicial que me puede resultar mi falta de interés en las personas que me rondan y no parecen tener relevancia. Podrían darme una sorpresa de esa magnitud —aunque dudo que alguien pueda darme una sorpresa mayor que esta. ¿Cómo iba imaginar yo que Hazel tendría familia que luciera tan distinta? Ella es de tez oscura y nunca me dijo que tenía raíces italianas. Aunque, si lo pienso mejor, encuentro ciertas semejanzas. Como el detalle de no mirar a los ojos a menos que sea estrictamente necesario, la resonancia de sus risitas nerviosas y esa terquedad que vuelve a Hazel tan eficiente y a Nico tan atractivo. Hay algo en la intensidad de sus pupilas, en ocasiones chispean el mensaje de «estoy lleno de sorpresas, no me subestimes».

Lo curioso es que yo también me sentí satisfecho. Algún neurotrasmisor liberado activó una sinapsis con transmisión excitatoria. Aunque no debes entender bien eso y me siento en la obligación profesional de explicarlo; además el funcionamiento cerebral se me antoja fascinante. Por favor, no me preguntes por qué escogí endocrinología y cardiología sobre neurología.

Pensemos en la neurona y proyectémosla en nuestra mente, con su forma de estrella y su cola —mejor conocida como axón. Ella sola puede hacer mucho. A su energía se le denomina «potencial», el cual puede mantenerse en reposo o ser de acción.

Sin embargo, es mucho más emocionante cuando consideramos sus interacciones con otras neuronas. Las neuronas individuales hacen conexiones con otras neuronas y estimulan o inhiben su actividad, lo que forma circuitos que pueden procesar la información entrante y producir una respuesta. De esta forma se considera que las neuronas «se hablan» entre sí. La sinapsis es el punto de comunicación. El fin es que la neurona receptora dispare su propio potencial de acción; o al contrario, este se inhiba.

Nico nos acompaña a Hazel y a mí hasta adentro de las instalaciones. Cuando nos toca separarnos ambos encontramos cierta resistencia, la cual rompemos; en mi caso, con una sonrisa forzada y en el suyo, con un «disculpen» carraspeado. Agradezco que la concentración de Hazel en la tarea que tenemos por delante le impida fijarse en sentimientos ajenos obvios.

El recepcionista, a quien Hazel me presenta como Frank, nos anuncia que el gerente nos está esperando y nos lleva personalmente hasta la oficina. Avanzamos a través de la amplia sala de entrenamiento en dirección al piso superior, al cual se accede por unas escaleras estrechas. En el camino Frank explica con ayuda de gesticulaciones el funcionamiento del Gym, pero solo recibe la atención de Hazel.

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