Capítulo 11

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El día era bello y soleado, las aves trinaban su bello canto y las cosas no podían irle mejor al bello, inteligente y guapo príncipe Light, obviando el hecho de que se arrastraban como gusanos.

-Si alguien me hace el favor de matar a la narradora, se lo agradecería mucho…-murmuró lúgubremente el apuesto príncipe.

Lo que sucedía era que estaban de mal humor porque no habían desayunado solo unas barras de chocolate y chocolate caliente, ya que Mello se negaba a hacer aparecer otra cosa.

Lo importante era que luego de un rato de caminata, el "príncipe", sus dos vasallos y las cuatro criaturas místicas salieron de la jungla. Ante ellos había un bonito campo verde, sereno y para nada peligroso, un lugar donde uno se tiraría a dormir plácidamente bajo tan cálido cielo.

-Ahh… finalmente podré terminar mi travesía en calma sin que nada me esté persiguiendo, y conseguir a mi princesa, y yo la besare, y ella despertara, y nos miraremos y todo será tan perfecto y…

-Y ya le cortas con tus condenadas fantasías si no quieres que te acribillen a balazos.-Mello ya estaba cargando su arma especial para ocasiones fastidiosas.

-Ya Mello, déjalo soñar, luego de tantos problemas, creo que se merece un final feliz, por esta vez.- concilió tuNear, extrañamente importándole la vida de otra persona que no fuera él.

-Si claro, final feliz blablabla…

Y todo habría sido tan perfecto como Light lo habría imaginado de no ser por…

¡!

…ese extraño ruido que les llegó desde atrás, que arruinó tan tranquilo momento. Todos se voltearon asustados, indiferentes y divertidos (estos dos últimos correspondientes a Near y Ryuk, respectivamente). A lo lejos se podía ver como pedazos de vegetación salían volando por los aires y algo de polvo que les hizo toser gravemente. Una explosión sucedió justo a unos metros a la izquierda de donde estaban parados. Luego de que la nube de polvo se disipara vieron una extraña máquina con un par de segadoras a los costados y una boca trituradora al frente. El conductor se bajó de dicho vehículo de una forma altanera y se quitó los anteojos protectores.

-¡Nunca me había divertido tanto la jardinería como hoy! Como me gustaría probar esta belleza en cosas más "sustanciales" .

Todos (obviando a Near y Ryuk) se miraron asombrados al reconocer a Beyond parado como si tal cosa con una sonrisa comparable con la del gato de Alicia en el país de las maravillas.

-¿¡Pero qué mierda haces aquí maldito demente!? ¿¡No te había dejado encerrado en un pozo!?-exclamó Mello bastante sobresaltado, y eso que no muchas cosas lo hacían ponerse así.

-Ese truquito tal vez le funcione a la estúpida del aro pero no conmigo. Me ofendes.-se cruzó de brazos fingiendo molestia.

Light, quien tuvo que cerrarse la boca manualmente, por fin reaccionó.-Pero… pero… pero se supone que tú no deberías estar aquí.

-Oye es un país libre, hago lo que quiero y tomo lo que quiero y en este momento, me apetece tomar a una princesa en peligro. En ambos sentidos de la palabra si es que me entienden….

-Pues no lo permitiré, yo gané justamente, es mi derecho…

-Si, si. Ahora me encargaré de eso ¿Te gusta mi nueva sierra y máscara? Porque ahora vas a tener el gusto de probarlas- Rio macabramente

Justo cuando Beyond iba a cortar a Light por la mitad con una sierra oxidada, un piano le cayó encima, como si todo esto fuera una especie de caricatura de las que dan por cartoon network.

L Bello DurmienteWhere stories live. Discover now