XVII: Tiempo

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Destapa la caja
Extrae un cigarrillo y lo enciende.
No tiene ganas de fumarlo ver el humo desapareciendo  en el aire es calmante.

Su mente está nublada y casi no sabe lo que hace.
Su estado es el limbo y no quiere volver.

El cansancio ya no existe y los sentimientos que alberga se conviertieron en una música lejana.
Este escritor quizás está perdiendo el tiempo en la forma más desventajosa de todas.

Pero su obra, su amor ya trasncendió así que en realidad ya no importa.
Tiene toda una vida para esperar, 99 cigarrillos más para encender y quemar.

El tiempo se va, las dudas nunca lo harán, porque el tiempo  nunca lograra que deje de importarte y no, igual no vas a cansarte.

Dirán que desperciaste el tiempo si no lo logras al final, hablarán de ti a tus espaldas...

Oda a la Luna, oda al Sol.Where stories live. Discover now