• 11[O r g u l l o]

1.1K 77 82
                                    

Amor propio es sinónimo de orgullo.

Jeon Jungkook era, por opinión de muchos, un hombre tosco, distraído y apasionado por su trabajo

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Jeon Jungkook era, por opinión de muchos, un hombre tosco, distraído y apasionado por su trabajo.

Siempre estaba tomando café, no sé si por costumbre o porque le servía de verdadero estimulante. Y usaba un reloj de pulso de apariencia muy sofisticada, a lo que algunos habían especulado que su familia era poseedora de una gran empresa.

También se corría el rumor de que muchas habían intentado ligar con él, pero que a todas había rechazado como pelotas de béisbol haciendo foul. Tan decepcionadas e indignadas quedaban que no volvían a intentarlo.

A mí no me entusiasmaba la idea de sumarme al club de mujeres rechazadas, y no porque fuera fea o estuviera falta de posibilidades para atrapar a ese hombre. En realidad, era muy guapa. Mi figura espigada y mis piernas provocaban comentarios tanto de hombres como mujeres, los últimos no muy amistosos. La forma de mi cara estaba hecha por mis ojos grandes de pestañas largas y voluminosas. Mis labios ya habían sido acreedores a muchos halagos.

Jeon Jungkook figuraba fuera de mi rango sólo por sus dos defectos: ser mi profesor de integración profesional y por portarse tan cabronazo conmigo.

Desde que recordaba me había tratado con cierta displicencia anormal. Era un hombre serio e irónico, pero parecía que yo retrataba a la alumna que no querría tener en su clase ni por equivocación.

¿Por qué?, me preguntaba. Mis notas eran espectaculares, aunque tuviera competencia. Se podía decir, sin ser pretenciosa, que era una de las mejores estudiantes de la generación. Otros profesores me felicitaban por mi compromiso para estudiar y tener éxito, mis amigos me admiraban, pregonaban que estaban orgullos de ser mis amigos y que aspiraban a ser como yo, ¿por qué él no lo hacía? ¿Por qué, al tratarse de Jeon Jungkook, siempre me encontraba con alguna dificultad para tener una nota excelente?

La situación había llegado al extremo cansino de que me fastidiaba acudir a su clase y sólo verlo. Estaba segura de que en alguna que otra ocasión le había gruñido nada más encontrarme con su mirada y que él notaba todos los sentimientos desagradables que gestaban en mí por su culpa y por su antiprofesionalismo.

Una vez llegué tarde a su clase porque el profesor anterior nos entretuvo cerca de diez minutos. Llegué agitada al aula por correr, pero mi querido profesor avanzó rápidamente hasta a mí una vez descifró que quería entrar.

—Diez minutos. ¿Le parece eso algo puntual, señorita Manoban?

Sabía bien que le tendría una respuesta negativa, así que dije que no.

—Mi anterior clase se retrasó un poco.

Por el modo en que me vio daba la impresión de que estaba decidiendo si creerme.

Apreté la correa de mi mochila. Jamás había llegado tarde, ¿por qué hacía tanto drama para permitirme entrar?

—Que no se repita —dijo con tono muy serio y rotó sobre sí mismo para darme la espalda, una gran espalda, había que resaltar.

RaméWhere stories live. Discover now