Akuma Pirates: Reencarné en One Piece

Capítulo 6: Arlong y primeras recompensas

-¡Los piratas de Arlong!-exclamó Zoro sorprendido-Son tritones, muy difíciles de matar.

-Sí-admitió Buggy-Pero recuerda que Luffy puede manipular el agua.

Nami miraba cabizbaja al suelo.

-Nami, creo que debes explicarles tú la situación-le pedí a mi nakama.

Todos salvo Buggy y yo miraron a Nami extrañados. A modo de respuesta, Nami mostró el brazo, con el tatuaje en el hombro.

-Arlong y sus piratas atacaron mi hogar, asesinaron a mi madre y me forzaron a trabajar para ellos mientras les hacía mapas y robaba dinero, bajo la promesa de poderles compra mi hogar a cambio de 10.000.000 de berries-explicó con lágrimas en los ojos-Me uní a vosotros con la esperanza de que me pudieseis ayudar y Luffy accedió a ello.

Todos me miraron.

-¿Qué?-pregunté mientras me bebía la jarra de un trago-Nami es nuestra nakama. Haría lo mismo por todos vosotros.

Kaya y Alvida abrazaron a Nami emocionadas y Ritchie comenzó a lamerle el rostro.
En cambio, yo me apoyé en el tridente para levantarme y los miré uno a uno con una sonrisa interior. Me encantaba el grupo que había formado hasta ahora, algunos muy inesperados. Aún así, estaba preocupado por como decirle a Nami que iba a reclutar a un tritón.

-A pesar de que se que puedo acabar con Arlong, necesito que todos vosotros entrenéis duramente, sobretodo Moody y Gin, con vuestras nuevas akuma. Ahora, Nami, ¿puedes venir conmigo a mi camarote?

Nami asintió y me acompañó. Al llegar al camarote, le pedí que tomase asiento y me senté en el borde de mi escritorio.

-Tengo una situación muy tensa entre manos de la que quería hablar contigo-expliqué-Conoces a este tritón, imagino.

Le mostré el cartel de se busca de Kuroobi, de 9.000.000.

-Sí, es Kuroobi. Es el único tritón que no ha matado a nadie, pero si dejó sin hogar a varios vecinos míos al destruir sus casas. ¿Cuál es el problema?

-Quiero reclutarlo. Es un experto en Gyojin Karate y es muy fuerte. Quiero intentar que se ponga de nuestro lado en la batalla.

-No lo hará, Luffy. Sí que es cierto que sería un tripulante muy valioso, pero odian a los humanos y nos tratan como seres inferiores.

Asentí mientras escuchaba sus palabras.

-Si accediese a recibir un castigo, ¿lo aceptarías como tripulante? Entiendo que nakama es mucho pedir.

-Si el castigo es duro, accedería, pero tendría que demostrar muchas cosas para que pueda considerarlo un compañero.

-Gracias por tu comprensión, Nami. Entiendo que no es fácil lo que te estoy pidiendo. Lo siento, de verdad.

-Luffy, confío en tí y en que sabes lo que estás haciendo. Solamente espero que no te equivoques.

Me levanté y le di un abrazo a Nami, quien rompió a llorar en mi hombro.

-Nami, dentro de poco tu hogar será libre. Lo prometo.

Nami, sonrojada, se giró y marchó por la puerta, para luego entrar Kaya y Alvida que, al verme con cara de preocupación, se acercaron a abrazarme.

-No es nada chicas, pero gracias. El problemas es que quiero reclutar a un tritón y antes de hacerlo quería decírselo a Nami.

Ellas asintieron comprendiendo la situación. Entonces, sin aviso previo, Alvida cerró la puerta de una patada y comenzó a desvestirse. Kaya, al verlo, se sonrojó y se dio la vuelta.