Ética

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La ética, o leyes morales en Heráclito, no dependen del criterio de los hombres en particular, puesto que todo se alteraría según la conveniencia de cada cual. Hacer buenos y malos unos días como Hesíodo sería absurdo, porque las leyes morales no dependen de los individuos sino del ontologos, única verdad eterna y común a todos.
   La muerte es justa porque justifica la vida y la vida justifica la muerte; ambas se complementan y se hacen justicia: Para los hombres no es mejor que haga cuanto quieren: la enfermedad ha hecho grata la salud, el mal el bien, el hambre la hartura, el trabajo el descanso.
    Los que hacen el esfuerzo por comprender la naturaleza de las mujeres cosas (ontologos) podrán pensar con virtud, con razón (logos= razón) y poder decir la verdad en todo momento. El pensar es la virtud máxima, la sabiduría decir la verdad y obrar como los que comprenden la naturaleza de las cosas.
   En otras palabras sólo el logos es ley y en ella se finca la felicidad según Heráclito. Podemos decir que el hombre vive una doble condición humana: una que se inclina a los placeres del cuerpo y otra, al honor y la justicia. Por eso Heráclito sostiene que Los mejores prefieren a toda una cosa, el amor sempiterno a lo mortal. Los más se hartan como animales.
   Y en ese sentido la mayoría se queda con lo sensible y los menos con lo espiritual. En fin, porque si la felicidad consistiera en los placeres del cuerpo, llamaríamos felices a los bueyes cuando encuentran algarrobas para comer.
   Permítasenos citar a Reunión. Mondolfo, quien aclara la relación existente entre el logos y el más alto bien universal:

La comunidad de logos no es sólo expresión de su universalidad lógica, sino el más alto bien social, la superación de todo arbitrio individual. Es comprensión de la ley universal. El cosmos tiene su ley como la polis: Heráclito es el primero en enunciar esta idea típicamente griega, y afirma que es solamente el logos el que comprende la ley divina, en la que se alienan todas la leyes humanas.

  El logos, en cuanto razón teórica,. mantiene una relación directa con la vida concreta de los hombres. Así , el más alto bien social se alcanza en la comprensión del logos, en la ley que ordena la conducta de los hombres.
   Ahora bien, regresando a la idea central de la ética heraclitiana debemos insistir en que el hombre en su doble naturaleza, esto es como ser sensible y espiritual (alma y cuerpo), supera o rebasa la sensibilidad, es decir, las inclinaciones del cuerpo en una unidad superior, que hemos llamado logos. Así, la diferencia entre el bien y el mal sólo se da en el nivel del logos, esto es, en cuanto El bien y el mal son uno. Por eso, sólo conocemos el bien con relación al mal, y el mal con relación al bien. Si ambos fueran excluyentes (es decir, si no fuera posible esta unidad superior en el nivel del logos), el comportamiento del hombre quedaría sometido a lo meramente sensible, a las inclinacionesdel cuerpo.
   Hegel en este punto dice: "No cabe expresarse en términos más verdaderos y más espontáneos hablando de la verdad. Sólo la conciencia de lo individual y la conducta individual, la originalidad como peculiaridad del contenido o de la forma, es lo falso y lo malo. Por tanto, la maldad y el error consisten, exclusivamente, en el aislamiento del pensar: en el hecho de que éste se aísle de lo general".

Fragmentos de HeráclitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora