~~Te Necesito Chica~~ (Levi y Mikasa)

🌺09

El azabache la observaba, ese pequeño cuerpo tendido en esa fría cama. Tanto sus brazos y piernas, se encontraban con ematonas demasiados grandes, su rostro tenía muchos moretones grandes, su labio se encontraba partido. Simplemente se miraba demasiado herida.

Sabía quién era el causante de esto, y no dubaba ni un segundo para matarlo, no dejaría que las cosas se quedaran así. Lo mataría si o si, estaba arto que el le hiciera mucho daño a su familia, ya había deñado mucho a su esposa no dejaría que lo siguiera haciendo. Ya había llegado su paciencia al límite, no dejaría que ese maldito mocoso le siguiera haciéndole daño a su familia.

-¿Levi a dónde vas?-escucho a su amiga.

-Solo cuida de Lu, tengo cosas que hacer.

Y sin decir alguna palabra, salió de la habitación. Bajo en el elevador, hasta la plata baja, fue directo al estacionamiento y subió en su motocicleta. Directo para el lugar, dónde debería estar el mocoso.

Al llegar lo vio, estaba en el mismo lugar de siempre. Tomando y consumiendo drogas, se bajó y sin esperar saco el arma que llevaba con el, quitó el seguro y camino hasta el. Ganándose la atención de todos.

No había vuelta atrás.

Pagaría por todo.

-Te habías tardado-sonrio-Pense que nunca vendrías.

-¿Que esperabas?-el azabache arqueó una ceja.

-Vamos aslo-rio con sarcasmo-Veremos si no eres cobarde.

-No me tientes-susurro-No te mataría Jeager, nunca le haría esos a tus padre. Pero espero verte tras las rejas, por mucho tiempo.

Guardo su arma y camino hacia el, a los minutos dos patrullas llegaron al lugar. El azabache le coloco las esposas y lo llevo hasta la patrulla, dónde dejo que sus compañeros hicieran lo que se debía.

Volvió a subir a su motocicleta y arranco. No mentía al decir que lo quería matar, pero no lo hacía por ella. Porque la amaba, y sabía que ella nunca le guardaría algún rencor al castaño, ¿Entonces porque el, tendría que matarlo?, No quería arruinar su vida. Y sabía que si lo mataba el terminaría arruinando su vida, y no lo quería hacer.

Había alguien que siempre lo esperaba.

Y esa persona era quien lo amaba.

Incondicionalmente.

🌺🌺🌺

-¿Sabes dónde está el?-le pregunto la azabache, acomodándose en el cama.

-No lo sé-suspiro-Tramquila, ya regresara.

Mikasa suspiro, hace más de dos horas que ella había despertado y su única esperanza era hallar al azabache a su lado, pero el no se encontraba. No mentía eso le dolió, lo único que recordaba fue haber llegado a la comisaría y correr hacia el. Luego no recordaba nada más.

Sabía que su pequeña niña estaba bien, la castaña la tenía y eso le alegraba. Pero el problema aquí, era saber dónde el se encontraba, se imaginaba lo peor pero no quería aceptarlo, solo esperaba que el azabache no haya ido de tras del castaño.

Ella no lo odiaba pero no lo quería ver en su vida, el le había hecho demasiado daño y no esperaba volverlo haber, no quería saber nada más de el por un buen tiempo. Su mejor amigo la había decepcionado y eso no lo perdonaría ella jamás. Era hora de abrir los ojos.

La puerta fue abierta, Mikasa vio hacia ahí y sonrió al ver a su esposo sano y salvo, la castaña salió de la habitación dejándolos solos. El azabache se acercó a ella, tomando asiento a su lado y tomando su mano, regalandole un beso.

-Me alegra que estés bien-susurro-Me pegaste un gran susto.

-Lo siento-susurro-Tenias demasiada razón, el era malo. El nunca me quiso, el siempre pensó en hacerme daño-susurro.

-Tramquila, ahora estás a salvo-le sonrió.

Mikasa se acercó hacia el y lo beso, un beso muy tierno para ambos.

Ambos se necesitaban, sabían que problemas como estos se acercarían cada vez más, pero estarían listo para enfrentarlos. Ambos se amaban, y no dejarían que nada se atravesará en su camino.

Juntos.

Podían vencer al mundo.

🌺🌺🌺

Luego de casi pasar una semana en el hospital, por fin volvían a su adorada casa. Y no era mentira, por el lado del azabache necesitaba que su esposa volvería, el no tenía la paciencia para cuidar de su pequeña en la noche, y no era que no la amara, pero sabía que la experta en eso era su adorada esposa.

Por el lado de ella, quería regresar a su hogar. Nunca le gustaron los hospitales, mucho menos ahora, necesitaba estar con su pequeña hija porque muy dentro de ella sabía, que al azabache le daría un ataque si llegara a pasar otra noche con ella. El doctor por fin le había dado de alta, ahora todos los meretones no se miraban, y las cortadas tenían una cicatriz que muy pronto se quitará.

Ella estaba bien, y lista para empezar un nuevo comienzo, sin mentiras sin miedos. Junto a su familia.

-Este fin de semana abra, una linda velada para los nuevos reclutas. ¿Vamos?-le preguntó el azabache llegando a su lado.

-Esta bien-le sonrió.

Si.

Ellos ahora eran felices.

Pero la felicidad nunca dura para siempre.

Holaaa.
Espero les guste, corto pero el siguiente capítulo sera mejor. ¿Desean lemon?.

Bueno quería comentarles algo, hay muchas veces que yo desaparezco de aquí y en realidad de todas mis redes sociales. Pero siempre vuelvo, eso no quiere decir que desaparecere ahora, pero puedo que llegue a pasar. Espero lo entiendan y me comprendan.

Adiós 👋👋