my weakness (George Weasley)

1

𓆏

Dos pelirrojos caminaban tranquilamente hacia la estación 9¾, ese sería su tercer año en Hogwarts. En cambio, para su hermano pequeño sería el primero.

-Bien Georgie tendremos que buscar a Lee para planear nuestros nuevos productos, bromas!- le dijo Fred emocionado, mirando como habían niños nuevos. Nuevos clientes.
-Genial.- respondió este analizando el panorama.

-Fred! Eres el siguiente!- dijo la señora Weasley mirando al niño, sin embargo, George respondió por él. Aún no habían acabado de divertirse del todo.

-Él no es Fred! Soy yo!- le contestó George pareciendo estar ofendido.
-Honestamente mujer, no se como te haces llamar nuestra madre.- siguió el juego su gemelo también fingiendo decepción.

Molly suspiró algo cansada.
-Oh, lo siento George...- le dijo a lo que Fred se encogió de hombros mientras se dirigía a la pared.
-Solo era una broma. Yo soy Fred.- dijo antes de despedirse e ir a través de la pared.

La señora pelirroja rodó los ojos y miró a George quien sonreía divertidamente.
-George... te toca.- le dijo a lo que este hizo caso para seguir a su gemelo.

Cuando ambos pelirrojos llegaron al andén, miraron con ansias a todos esos inocentes que iban por primera vez a Hogwarts. Sin duda ese año habrían muchas víctimas.

Y cuando ambos iban a subir al tren, alguien pasó chocándole completamente.
-Disculpa...- dijo este algo sorprendido.

La chica no dijo nada y simplemente se fue de su vista, entrando al tren junto a más niños.
-Rara.- dijo para entrar él también.

Fred quien se encontraba con el pequeño Ron miró a George para pensar lo mismo.
-Ronnie... sabes que tendrás que pasar una prueba de fuego, no?- le dijo Fred de repente haciendo que este solo frunciera el ceño.

-Qué?- preguntó algo asustado.
-Si, por no hablar de las serpientes...- mencionó George fingiendo temor para asustarlo.

Ambos gemelos se miraron entre sí.
-Y suerte con las... arañas.- dijeron a la vez haciendo que Ron se asustara aún más.
-No!- gritó mientras s roba de su lado dejándolos solos.

-Genial, quieres gastarle una broma a los Slytherin?- preguntó Fred de repente.
-Pero tenemos que buscar a Lee...- dijo George no muy convencido.

Mientras, en el otro vagón, más concretamente en el de las serpientes, un pequeño platinado miraba a la chica que había chocado al pelirrojo.
-No vas a hablarme?- preguntó algo molesto.

Ella simplemente se sentó en uno de los asientos y se cruzó de brazos. Era tan injusto estar ahí en ese momento...
-Vamos, yo no tengo la culpa de que papá haya decidido sacarte de Ilvermorny.- siguió diciendo el platinado ahora sentándose a su lado igualmente.

-Draco cállate, no quiero hablar del tema.- dijo ella mirando ahora por la ventana.

Odiaba estar ahí, odiaba a su padre y odiaba lo incomodos que eran los asientos del dichoso tren. Es que no podía quedarse con todos sus amigos en el colegio donde hacía pasado sus dos primeros años?

Ya tenía una vida, ya tenía amigos y un lugar respetable en el colegio, ahora no era nadie. Era muy injusto.

-Mamá dice que un tal Snape vendrá a recogerte antes, dice que sortearan tu casa en privado... ya sabes, como estás en tercer año...- empezó a decir el platinado de nuevo.

-Lo que tu digas.- respondió ella ahora mirando por la ventana, deseando que solo fuera una pesadilla y que nada de la idea de ir a Hogwarts fuese real.

Draco rodó los ojos algo fastidiado. Su hermana no solía ser así, bueno... en realidad si. Siempre tan optimista y tan animada... claramente hablando con puro sarcasmo.

-Sabes? Me caías mejor cuando jugábamos juntos en el jardín de casa con Dobby.- le volvió a insistir este mirándola de reojo viendo como ahora la chica se acomodaba en su asiento.

-Y tu me caías mejor cuando estabas en tu cuna y solo hacías caca y llorabas.- respondió haciendo que el chico sonriera.

-No debería decírtelo pero por las mañanas te ves más fea que un ogro.- le dijo ahora consiguiendo que su hermana también sonriera.

-Por no hablar de quién te ha peinado, has usado todo el bote para fijarte el pelo?- le preguntó ella atacándolo con una sonrisa divertida.

-Y esta es la razón por la que la gente habla mal de ti cuando no estás.- le contestó el platinado ganándose una mirada sorprendida de la chica.

-Bien... sin duda has aprendido de la mejor.- le dijo ella con una sonrisa orgullosa.- Recuerda, si alguien se mete contigo...

-Tranquila, lo tengo todo bajo control.- le interrumpió este antes de que su hermana se pusiera a hablar en plan sobreprotectora.

Cuando ambos chicos vieron que el tren reducía, empezaron a levantarse para ir camino a la salida. Cuando la chica bajó del tren, se quedó paralizada al ver lo hermoso que era Hogwarts.

Sin duda el castillo era mucho más antiguo que su anterior instituto. Le pareció curioso.

George quén también bajaba del tres junto con Fred y Lee vio a la misma chica rara que le había chocado el hombros y se quedó demasiado confundido. Nunca la había vito antes... chica nueva? Eso era posible?

-George! A que esperas? A que te aplaste un hipogrifo? Vamos!- le dijo su gemelo para tomarlo del brazo e intentar arrastrarlo hacia la entrada sin embargo este no se movió ni un poco.

Fred frunció el ceño para mirar a la chica quién parecía de lo más fascinada con el castillo.
-Quien es esa?- preguntó el pelirrojo algo confundido también.

-Se comenta que hay una chica nueva... la han transferido de Ilvermorny.- les empezó a decir Lee, sin embargo cuando vio como Fred miraba a su gemelo y este miraba a la misma, entendió que ya la habían encontrado.

Ella claramente se dio cuenta de que habían seis ojos curiosos mirándola. De los tres chicos, miró al que tenía la boca entreabierta, quién la miraba más fijamente. Raro.

-Jaylene! Vamos!- le dijo el platinado emocionado por entrar. Ella rodó los ojos y solo siguió a su hermano quien la arrastraba con emoción.

-Por todo Godric... es una Malfoy.- dijo la voz de Fred demasiado sorprendido.- Lástima, es bonita...- comentó mientras Lee asentía.

George parpadeó unas cuantas veces antes de mirar a su gemelo.
-Claro... vamos.- dijo antes de empezar a caminar.