Capítulo 12

69 4 4
                                    

Congelada por el miedo, agarro mi linterna y apunto al hombre frente a mí.

Después de la conmoción inicial, mi mirada salta a la manga del hombre y luego a su cabeza en un intento de identificarlo.

(¿Una bata de laboratorio... y pelo blanco?)

Mis dedos temblorosos se deslizan hacia mi cadera en busca de mi arma, pero entonces recuerdo que no tengo ninguna.

—Un acto noble... pero será el último que hagas.

El hombre ni siquiera pestañea mientras Zero hace girar un cuchillo en su mano.

El hombre se libra del zombie, saca un vial de su bolsillo y se lo lleva a la boca. Luego, se bebe su contenido.

(¿Qué diablos está pasando...?)

—Siéntate.

Apenas el hombre dice eso, el zombie lo obedece. Camina hasta la silla más cercana y se sienta pesadamente sobre ella.

—Bueno, ahora sí lo he visto todo...

—Los estaba esperando. Asumo que los han enviado para terminar el trabajo.

—Si con eso te refieres a matarte, entonces sí: no me importaría hacerlo.

—Yo me encargo del zombie.

— ¡Raven, Zero, esperen! ¿Quién eres? ¿A qué te refieres?

—No hay tiempo para preguntas. Va a convertirse pronto.

—Oh... ¿No se los han dicho? Interesante.

— ¿Decirnos qué?

—Soy inmune al virus. No puedo convertirme.

— ¡¿Qué?!

—Eso es imposible. Estás mintiendo.

—Estoy de acuerdo. Nadie es inmune.

—Disfrutaré cortando tu garganta mentirosa...

El hombre da unos pasos deliberados hacia Zero, quien se prepara para un ataque.

—Mírame. ¿Mis ojos se están volviendo blancos? Mira la herida. ¿Se está poniendo negra? ¿Me estoy poniendo pálido?

— ¡Aléjate de mí!

—Hmm. Heterocromía. No es algo que se vea todos los días. ¿O son lentes de contactos?

Zero levanta una mano para cubrirse el ojo carmesí, como si se avergonzara de ello, pero no responde.

—No has venido a matarme, ¿No? Si me dan un momento para limpiarme está herida, se los explicaré todo.

— ¿Y el zombie?

—Puedes matarlo si quieres, pero es inofensivo. Ahora mismo, obedece todas mis órdenes. Da igual si decides matarlo, lo único que hará será quedarse ahí mirándote con esos ojos blanquecinos...

El hombre se acerca a un grifo y comienza a limpiar y envolver su brazo con gasa. Luego, se sienta y comienza a hablar.

—Mi nombre es Martin. Hace mucho tiempo, investigaba para hallar la cura al virus Angello. ¿Lo recuerdan?

—Por supuesto. Mi hermana murió después de contraerla.

(No sabía eso...)

—A esa epidemia le siguió la de los zombies. Y, aunque el virus Angello mató a mucha gente, todos lo olvidaron cuando los zombies aparecieron. Lo que la gente no sabe es que el virus Angello es el origen del brote zombie. Todo fue debido a una sustancia llamada <<Catalizador de la Resurrección>>.

Attack of the Deadحيث تعيش القصص. اكتشف الآن