su vida estaba llena de lujos, diversión y excesos. Para Harry nunca hubo un no por respuesta, el nacer en cuna de oro y haberlo tenido todo desde su niñez lo habían convertido en un egocéntrico, mujeriego y libertino alfa que no conocía los límites. Todo muy diferente a la vida de Louis, un omega y madre soltero que solo busca superarse y dar lo mejor de sí mismo a sus tres hijas.