≈ Asahi Aszumane

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LauraOrtega258

Abrí las puertas del gimnasio extrañada. Desde afuera se escuchaban pequeños gritos. Cómo buena manager, decidí ir a investigar, ya que en esa tarde el entrenamiento comenzaba un rato más tarde de lo usual.

En efecto, al entrar encontré a Kageyama y Hinata peleándose. Usualmente, cuando comienzan a pelear, un par de gritos sirven para que ambos le pongan fin, pero esta vez no era así.

Ya cansada de ver como ambos se lastimaban, decidí meterme.

- ALT- no terminé no la primer palabra que un golpe impactó en mi brazo.

Varios golpes después ya pudo lograr que paren de pelear. Los tres parecían bestias salvajes, en especial Hinata y Kageyama, quienes tenían sus remeras medio rotas.

Un tanto adolorida, decidiste avisarle a Yachi que por hoy no estarías en el entrenamiento y que irías a tu casa. Al igual que le avisaste a ella lo hiciste con tu novio. Azumane se extrañó, pero pensó que solo estabas cansada.

Al llegar a tu casa, divisaste que tu padre te dejó una nota en la nevera.

Bebe, esta noche tu madre y yo iremos a visitar a unos amigos, entonces no estaremos en casa. Dejamos comida en la nevera.

- genial - suspiraste aliviada.

Tu madre era un poco sobreprotectora en muchos aspectos, tanto así que las pocas veces en las que Asahi venía a tu casa debías dejar la puerta y ventana abierta de tu habitación, a pesar de que ustedes ya salían desde hace ya un par de años.

Tomaste una remera que tenías guardada y te fuiste a tomar un baño.

(...)

Un par de golpes se oyeron en la puerta. Dejaste tu cena a un lado y te paraste a ver quién era.

- Hola -

- H.hola -

Te sorprendió ver a Asahi en tu casa a estás horas, ya que el entrenamiento debió haber terminado hace dos horas y él ya debía de estar en su casa.

- solo quería pasar para ver si te pasó algo, Yachi me dijo que no te veías bien - dijo preocupado mirándote de pies a cabeza.

- pasa - dijiste aliviada

- pero tus padres...- se alarmó. Si lo vieran allí a esas horas lo matarían.

- Descuida, esta noche no hay nadie - reíste

Azumane se sonrojó en el momento en que te hiciste a un lado para que él pasara. Llevabas puesta una remera de él, que te llegaba a mitad de tus muslos.

Hablaron un rato mientras tú comías tu cena.

- Azu - era tu pequeño apodo - quieres quedarte a dormir esta noche? - tus pómulos estaban teñidos de un color carmesí

Asahi era una paleta de tonalidades de rojo. Paso de tener un color rojizo bien clarito a un rojo potente, lo que menos esperaba era esa invitación de parte de su novia, pero obviamente no la rechazó.

La peli___ parecía un koala sujetado a la rama de un árbol. Estaba recostada sobre el pecho del de mayor estatura, con sus piernas a los costados de las caderas del contrario y su cabeza en su pecho.

La joven, se acercó a dejar un par de besos en los labios de su novio. Eran pocas las veces que eso pasaba, porque "___ o dejás las puertas y ventanas abiertas de tu cuarto o tu novio se va".

Sus padres no estaban, era de noche y estaba acostada sobre un chico que a sus ojos era la persona más hermosa en toda la faz de la tierra, sus hormonas adolescentes no lo dejarían pasar.

El último de los besos que dejaba en sus labios lo fue subiendo de tono intencionalmente; en una rápida acción Azumane quedó sentado con las piernas estiradas y ____ sobre él.

- espera - dijo el peli marrón - esto está bien? -

- y qué más da si no lo está - respondiste volviendo a atacar sus labios nuevamente.

Sus lenguas danzaban en sintonía, no querían dejar ningún rincón sin conocer del otro.
Con valentía, quitaste su prenda superior, Asahi no se quedó atrás y quitó la remera que traías puesta. Vaya sorpresa se llevó al ver que su pequeña novia, no traía nada debajo.
Miró ala los ojos ____ en búsqueda de aprobación. Claramente ella aceptó.

- ____, aún estás a tiempo de pedirme que pare - dijo a la vez que tomaba los muslos de la chica y la levantaba para cambiar de posición.

Besos y manos juguetonas iban y venían. Una de las grandes manos del chico comenzó a estimular lentamente el clítoris de ____. Por su parte, ella oprimía sus gemidos mordiéndose el labio, hasta que uno de sus dedos entró y allí perdió totalmente su cordura.

- más Azumane, más - rogaba levantando su pelvis hacía él.

Azumane metió un segundo y alcabo de un par de segundos un tercero. Pasados unos minutos quiso seguir estimulando la zona hasta que llegue a su primer orgasmo, por lo que jugaba con su lengua en los pliegues y clítoris, besaba y mordía levemente esos lugares.

- y.ya casi - apenas pudo pronunciar la muchacha.

El azabache, quitó sus dedos y los reemplazó por su lengua, fingiendo dar estocadas en el interior de su chica. Poco bastó para que ella llegara en su boca. Sus líquidos eran exquisitos, sin duda quería quedarse allí por más tiempo y claramente lo volvería a hacer en las próximas ocasiones.

Tomó su miembro ya erecto y se colocó la protección necesaria. Posteriormente tomó las caderas de la fémina y entró lentamente. Unos minutos después ella movió sus caderas, para que él comience a entrar y salir de su interior.

Varias estocadas bastaron para que él pueda saber cómo quitarle la muy poca cordura sobrante a su chica.

Entraba y salía con fuerza, rapidez y profundidad, era la mejor sensación que tuviste en tu vida. Abriste los ojos y lo viste, con el cabello despeinado, pequeñas gotas de sudor caian en su cara, sus ojos entrecerrados por la excitación y el placer que sentía, te parecía hermoso.

- Azumane - gemiste con fuerza, viniendote.

Asahi siguió unas 5 o 6 estocadas más y se corrió gimiendo tu nombre y mirando en dirección al techo.

Cayó rendido sobre tí, procurando no hacerte daño.

- eso fue exelente - dijiste con la respiración agitada.

Tu pecho subía y bajaba, con descontrol. Sentías el cálido aliento de tu novio en tu cuello.

- te amo _____-

- te amo Azumane -

Ambos se ahogaron en un sueño profundo, producto del cansancio.











Fin

✨ Espero que te haya gustado ✨

Nos vemos en el próximo 😗

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