Haikyuu ~ Lemmons ~

Satori Tendou

Satori Tendou x Male reader

— eres un monstruo!! — el grito de aquel niño se escuchó retumbar en todo el gimnasio. Tras él, el resto de niños gritaron lo mismo, atacando al pelirrojo.

Estático observaba como cada uno de sus compañeros gritaban contra él. Qué he hecho.... Se repetía continuamente en su cabeza.

El estruendo de la puerta siendo brutalmente abierta frenó los insultos. Su aura desprendía furia. Cada paso que daba lograba hacer sentir cada vez más pequeños a los insultantes.

— repitelo — ordenó al niño que dió el primer insulto.

Sus piernitas flaquearon. En sus ojos se notaban a kilómetros las ganas de lloras y de huir.
Dió un paso atrás y se echó a correr, junto al resto de sus compañeros.

____ _____, era conocido como el alumno problemático. Era un poco más alto que Satori, su cabello era un tanto largo y oscuro. Algo se daba por asegurado en cuanto a él, jamás te enfrentes.

— gracias — sus grandes ojos contemplaban a su salvador, nuevamente.

____ suspiró, no entendía la razón de por qué se metían con él. Era un buen niño, solo algo peculiar.

— si, quieres? — ____ no entendía, cómo supo que preguntaría por galletas

Ambos se sentaron en una banca, compartiendo sus meriendas.

Sin querer, algo en ellos comenzaba a crecer, era como mariposas en el estómago; ese sentimiento apartir de allí empezó a crecer más y más.

[....]

Todos los días se repetía la rutina, hasta que el día más esperado, más triste, espeluznante o simplemente otro día más llegó, el último día de clases.

El oji____ abrió la puerta del gimnasio, pero solo encontró a Satori jugando con la pelota. Se sorprendió de no ver a la bola de niños gritando idioteces.

— Te —

— en el tupper azúl — sonrió el ojirojo

El ahora apenas más bajo le devolvió la sonrisa.

Ambos sentados en los escalones de la entrada, disfrutaban de la compañía del otro.

— ____ — sus miradas se conectaron — a qué preparatoria irás? — alzó una ceja al ver la expresión que se posó en su cara

— Tendō.... Mi familia se mudará a Estados Unidos — sus mirada estaba perdida en el lugar

— oh....— no sabía que decir

— y tú? A dónde irás? Si algún día vuelvo quiero saber dónde estés así ir — eso alegró a ambos niños

— iré a Shiratorizawa. Si vuelves prométeme que me buscarás — extendió su dedo meñique

— lo prometo — entrelazaron sus dedos.

Sus orbes estaban posados en los contrarios, guardando cada detalle.

La campana sonó. El día había acabado.

— hasta pronto ____ ____ —

—ha.hasta pronto Satori Tendō — se quedó sentado, viendo como la esbelta figura del pelirrojo se alejaba

~ Años más tarde ~

El público gritaba, el gran gimnasio estaba repleto de gente.
Estaba parado mirando la cancha, encontrándose con esa cabellera tan peculiar.