Capitulo 18 - La lanza

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Al llegar a Olimpia algo raro sucedía, se podía ver cómo una nube de humo se sobreponia a la ciudad. Y al acercarnos más nos percatamos que las puertas estaban abiertas.

L: Zero, algo pasa en Olimpia... Nunca, y nunca es nunca, las puertas se dejan abiertas, ¿y ese humo? - Me miró preocupada.

Z: Vamos para dentro... - dije agarrando aún no hombro dislocado.

Al entrar, descubrimos lo que había pasado. Nada más entrar en la ciudad vimos que la gente me miraba con desprecio, hasta la alcaldesa parecía mirarme mal. Pude observar como varios de los edificios de la ciudad estaban quemados incluidos el laboratorio de Río.

Cuando nos vieron llegar, Río y Melody vinieron preocupados.

R: ¿Estáis bien? Zero? Tu hombro...

Z: Mi hombro estará bien y la bestia ya no es un problema... Pero ¿que ha pasado aquí? ¿Porque todo está quemado?

L: ¿Que está pasando mamá? Porque miráis así a Zero, acaba de jugarse la vida por Olimpia y esta es la manera que tenéis de agradecérselo? - Dijo cabreada mirando a la alcaldesa

M: Lidia cariño, estate tranquila, lo mejor será que lo hablemos todos juntos en un lugar más privado...

Río me ayudó con mis cosas y fuimos a la casa de Lidia. Una vez allí Melody y Río se encargarom de recolocar mi hombro mientras la alcaldesa comenzó a hablar.

A: Zero te tengo mucho aprecio, y se que eres importante para mi hija. Y que darías la vida por todos nosotros. Pero Olímpia era una ciudad segura y tranquila, hasta tu llegada. Si es cierto que algunos mineros o trabajadores que salían de la ciudad luego no volvían.
Peri nunca había pasado nada en la ciudad. Hoy a vuelto a pasar Zero, el Alcalde ha vuelto, no venía en tu busca... Venía en busca de la lanza que mantiene tus instintos a raya. De alguna manera sabía de la existencia de la lanza y ni han parado hasta encontrarla.

R: Estaba también la chica está, la que te conocía como se llama.. Rosan?

L: ¿Como que tienen la lanza? Entonces Zero ahora está en peligro... - dijo asustada abrazándome con todas sus fuerzas.

Z: Si El Alcalde tiene esa lanza tendré que ir a buscarla... Volver al refugio y acabar con el...

R: No, eso sería nsuicidarse, si tienen esa lanza, ¿tú sabes las armas que pueden hacer para acabar contigo? Si conseguirías sacar el máximo potencial a tus instintos pero controlandolos, a lo mejor tendrías una pequeña posibilidad. Pero si no sería un suicidio.

Z: Lo que es un suicidio es no hacer nada... ¿Vais a vivir con miedo para siempre? Lo siento pero no me voy a quedar de brazos cruzados.

Lidia salió de la casa cabreada.

M: Zero, tú me sacaste del refugio, gracias a ti soy feliz y conocí a Río - me dijo mientras cogía a Río de la mano y sonreía - No quiero que te pase nada, se lo importante que es para ti sentir que puedes ser feliz, y se lo mal que te sientes porque los habitantes de Olimpia tengan que sufrir su terror, pero no es buena idea.

R: No sabemos cuántos soldados tiene, pero han venido más de 30... Solo para buscar la lanza...

Z: Estoy arto de permitir que El Alcalde haga lo que quiera y atemorice a la gente a sus anchas, lo permitió 17 años, no voy a permitirlo - Dije cabreado mientras abandonaba la casa.

Al salir estaba Lidia delante de la puerta y un gran conjunto de habitantes detrás de ella.

L: Estamos todos de acuerdo con que no se puede vivir con miedo Zero. Pero no vas a ir a la guerra solo, nos negamos - dijo acompañado de un puñado de habitantes.

Eran unas 30 personas que estaban dispuestas a dar la vida por Olimpia. No eran soldados, pero con entrenamiento y si conseguíamos armamento, podríamos lidiar una guerra.

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