Razones para vivir

Sirena

-lo primero va a ser ponerte una dieta para que ganes peso, creo que comer alimentos en bastante almíbar o grasa, ayudará mucho.- explica la doctora mientras mi madre y yo escuchamos atentamente.- sigues siendo bulímica o anoréxica?.- me pregunta directamente y trago saliva, aun me parece raro que mi madre sea consciente de todo.

-ehh- titubeo un poco en contestar. Mi madre se da cuenta de lo incómoda que me siento al hablar de todo esto y mucho más delante de ella, así que aprieta mi hombro en un gesto de apoyo y yo decido tomarme esto enserio.- pues, ya no me provoco el vomitar, ni nada que se le parezca, realmente, ya no me fijo en mi peso, pero sí como muy poco, no es por no querer comer, sino por el hecho de que no me da hambre.

-esto, pasa por la anorexia, al pasarte mucho tiempo sin comer, para no subir de peso, tu estómago ha reducido su tamaño, lo que provoca que ya no te exija tanta comida. Pero, es importante que lo vuelvas a adaptar a una alimentación correcta, así como al resto de tu cuerpo porque esto puede causar muchas consecuencias créeme que muy poco favorables para tu salud.- la doctora intenta meterse en mi mente y hacerme ver que, estar por debajo de mi peso correcto es mucho peor de lo que parece.- de hecho Jinoel, tu período se retiró debido a que estás en un peso muy bajo.- ok, esa no la vi venir.

Desde hace cinco meses mi período se retiró de manera brusca y radical, en un momento de debilidad hablé de esto con mi madre y ella casi pega el grito en el cielo pensando que su hija de entonces 17 años estaba embarazada, lo cuál hubiera sido algo casi común en cualquier adolescentes normal, pero yo no soy normal, y soy virgen, así que ella pronto se desinteresó aunque de vez en cuando se alteraba solo de pensarlo. Como sea mis planes ahora, son comer y dormir, para ganar peso y estabilizar mi salud, y luego encargarme de todo lo demás.

Esto, tenía que contárselo a Carlos.

Te apetece un jugo de manzana en el "caffé Delicias"? Tengo algo que contarte y te va a sorprender.

Le mando ese mensaje y él no demora mucho en responder.

Me estás invitando a tomar jugo de manzana?. Pero quién eres tú?. Jaja. Allí te veo suicida.

Carlos estaba en todo su derecho de decirme así, "suicida", y quizás pueda sonar mal y no sé como lo tome si llegara a escucharlo de otra persona, pero que él me lo diga, nunca me ha importado.

Llegué al punto de encuentro y me acerco a la mesa en la que está sentado Carlos, que como siempre, llegó antes que yo. Él me sonrió al verme y de repente sentí como si me hubieran dado un golpe en la panza, no sabía como explicar la sensación pero, era la mejor revoltura de estómago que hubiera podido tener. De la nada todos mis sentidos se pusieron eufóricos y quería gritar, reír, correr y hacer todo eso a la vez. Traté de disimular todo lo que estaba pasando dentro de mi cuerpo que era demasiado desconocido para mí, y me senté en la silla que él mismo ofreció para mí, sacándola hacía afuera de la mesa.

-gracias!- consigo decir eso pero siento que se me traba la lengua aunque el me entendió, lo que quiere decir que no sonó tan torpe como lo sentí salir de mi boca.

-aquí tienes tu jugo de manzana.- dice eso y me muestra el jugo.

-desde la luna se ve lo idiota que eres.- el se ríe con lo que digo como si escuchar que yo le llame idiota fuera lo mejor de sus días.

-cuéntamelo, para que me sacaste de la comodidad de mi cuarto?.- dice fingiendo sueño.

-estabas durmiendo?.- pregunto apenada de haberlo despertado.