Lo bueno nunca es duradero

596 48 6
                                    

Los estudiantes de las clases 1-A y 1-B se veían inmersos en un grave problema... Estaban siendo atacados por villanos... ¿Cómo demonios pasó esto?

~ Horas antes ~

Eran las 5 a.m. el peliverde se iba despertando y claramente este poco a poco recordaba todo lo que hizo anoche.

Izuku: Así que no fue un sueño... Bueno, al menos fue hermoso.

Este había acordado con Eraserhead que él entrenaría a Iida y a Todoroki con sus quirks aunque ahora debía mandarle un mensaje diciendo que Jirou se le unirá, pero por un momento se detuvo a analizarlo y llegó a la conclusión que no hacía falta por lo que decidió volver a dormir.

Sin embargo, el recuerdo de que ahora Momo Yaoyorozu le podría hacer algo a su chica era algo que le había quitado el sueño por lo que tenía que idear un plan que le permita a Kyoka huir.

Izuku: (De todas las personas... ¿Por qué ella? Más concreto aún... ¿Por qué se habría de molestar? Melissa tuvo el valor, si, incluso le conté de Himiko, carajo... Sé que prometí no romper el acuerdo con Nezu, pero esto me obliga a acelerar las cosas)

El peliverde se levantó de la cama con cuidado de no despertar a la pelivioleta y procedió a realizar algunas llamadas, aprovechando que en la residencia había señal e internet.

Izuku: Si, soy yo... ¿Que qué necesito? Necesito que todo se pase para la noche de hoy, que no haya víctimas más pueden haber heridos... También necesito que un par de personas se oculten... No preguntes por qué.... Entendido, gracias, te debo una.

Tras esa llamada, Izuku comenzó a pensar en alguna idea que pudiese funcionar aunque también se cuestionaba el por qué de la reacción de la azabache, si bien era cierto que lo ocultaron, no debió pasar a mayores.

Izuku: (Si de alguna manera suele hacer una estupidez, podré aprovechar eso y utilizarlo para más adelante... Esto puede ser arriesgado, pero puedo mandar un mensaje a ese par y que nos veamos en la habitación del Zuko pirata... Esa puede ser una buena idea) Bien... Hagamos eso.

El peliverde mandó un par de mensajes con la esperanza de que estos fuesen leídos y tan pronto los envío, recibió una afirmación como respuesta.

Izuku: Hablaré con ellos de este asunto y de ahí procederemos con el entrenamiento.

Este se acercó a una dormida Kyoka y besó su frente, sin duda se ablandaba por ella como si fuera un adolescente normal.

Izuku: (Me pregunto cuando fue que me ablandé... ¿Quizás desde que la conocí? No... Pasar tiempo con los héroes me ha hecho así aunque ha sido bueno negociar con los demás criminales o incluso el padre de Melissa, sin duda alguna sigo siendo yo... Sólo que ese sentimentalismo no puedo ocultarlo de ella)

El peliverde salió de su habitación, cerrándola como se debía y se dirigió a la habitación del bicolor para hablar.

Izuku: -toca la puerta- Tienes dos segundos para abrirme...

La puerta se abre revelando a un despeinado bicolor que recién se despertaba.

Shoto: Es raro que nos hables temprano, normalmente somos los que te hablamos ya en las tardes.

Izuku: Si, si, en cuanto el cuatro ojos venga hablaré con ustedes de algo importante... Para mí.

Shoto: Bueno, en ese caso pasa.

Izuku entró a la habitación de este y entre los dos esperaron al peliazul quien rápidamente llegó pensando que se había tardado.

Izuku: Vaya... Ni cuando pedí una pizza fue tan rápido.

Libertad condicionalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora